Una de las principales preocupaciones en Colombia es cerrar las brechas de género. Un objetivo en el que el país ha trabajado tanto desde los movimientos sociales, feministas y de mujeres, como desde el gobierno y el sector privado.
Actualmente, el 52% de las mujeres que están vinculadas a una empresa quieren continuar sus procesos de formación, según se reveló en un reciente estudio realizado por la empresa de formación corporativa Ubits, donde se entrevistó a 5.000 trabajadores entre los 26 y 50 años.
Una intensión que contrasta con el hecho de que solo el 16% de los entrevistados aseguran no tener oportunidad de aplicar esos conocimientos, debido a que en sus empresas no le ha dado la oportunidad de hacerlo, y que la Andi expusiera que solo el 36,4 de los cargos operativos eran ocupados por mujeres, en la Encuesta Equidad de Género.
Las razones detrás del interés por la capacitación continua radicarían en las transformaciones que vive el mercado laboral, cada vez más expuesto al manejo de conocimientos especializados y relacionados con el mundo digital.
“Hoy las personas están en una constante búsqueda de crecer profesionalmente. Así lo asegura el 45% de nuestros encuestados, mientras que el 47% asegura hacerlo para mejorar su desempeño”, explicó Alejandra Otálora, Customer Experience Manager.
Con base al estudio, se evidenció que la especialización en un campo y la tendencia a continuar con los estudios contribuye a bajar los niveles de estrés en los trabajadores, principalmente en las mujeres, lo que se puede explicar en gran parte por la presión a la que esta parte de la población se ve expuesta.
“En las mujeres es el 84% la confianza, sintiéndose mucho más empoderadas, casi igual de confiadas que un hombre para ejecutar su trabajo, esto gracias a capacitarse. Ellas se preparan para trabajar en equipo, construir comunidad porque se sienten parte de, donde van por un objetivo que comparten”, agregó Otálora.
Esta situación no es exclusiva de Colombia, pues las brechas de género en América Latina, en materia laboral, demorarán 67 años en acortarse, según reveló el más reciente informe del Foro Económico Mundial (WEF). Una situación que solo se agravó con motivo de la pandemia del covid-19.
Aunque si bien en los últimos años se han logrado A pesar de los notables avances logrados, el desafío fundamental radica en potenciar el empoderamiento de mujeres y niñas, garantizando así su acceso a amplias oportunidades. La convocatoria de las Naciones Unidas hacia la sociedad consiste en continuar progresando en la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible presentados en la Agenda 2030.
“Creemos que es muy importante que las empresas crean en sus trabajadores y generen estas instancias de aprendizaje para que después se apliquen efectivamente en su día a día”, concluyó Otálora.
Estos datos concuerdan con el estudio “Mujeres Millennial: profesionales, trabajadoras, urbanas” realizado por el Centro de Liderazgo Colaborativo y de la Mujer del Instituto Centroamericano de Administración de Empresas, Incae, reveló que esta generación de mujeres es una de las que mejor potencial tienen en Latinoamérica.
En una investigación realizada en cuatro capitales latinas, incluida Bogotá, se pudo establecer cuáles son las características en cuanto a personalidad y logros laborales de la generación de los “millennials”, a quienes se les tilda de estar poco preparados.
“Se encontraron hallazgos importantes, entre otros destaca la movilidad intergeneracional ascendente que evidencia que las mujeres millennial, a diferencia de sus padres, tienen un título universitario y mejores ingresos y condición de vida”, expresó Margaret Rose Grigsby, directora Académica del estudio Mujeres Millennial, profesionales, trabajadoras, urbanas