Días atrás el presidente Gustavo Petro recibió una carta firmada por varios exministros, representantes de distintos gremios del sector sanitario y académicos en la que le solicitaron el retiro del artículo de la reforma a la salud, este proyecto ha generado todo tipo de debates desde distintas orillas y aunque ha estado en dos jornadas de votación no se tiene certeza de su futuro.
Uno de los exfuncionarios que firmó el texto enviado a Petro es el exministro de Hacienda, Rudolf Hommes, quien habló del tema con RCN y afirmó ante el medio que de aprobarse, va a perjudicar a los más pobres en la nación.
Según el exministro. “El mayor inconveniente es que no se ha tenido en cuenta la opinión de la mayoría de gente. El segundo es que se están saltando pasos reales y constitucionales que debían haber atendido con anterioridad. Acá han ido a la fuerza y con la intención de imponer, sin tener en cuenta a la opinión de la gente”. Añadió también: “Ellos podrían estar afectando el sistema de salud, para nadie es un secreto que este sistema se ha convertido en uno de los más importantes de Colombia”.
En el escrito también está la firma de algunas académicas como Tatiana Andia, experta en salud pública, y de dirigentes gremiales como Paula Acosta, la presidente ejecutiva de la (Acemi) Asociación Colombiana de Empresas de Medicina Integral, que agremia a varias Entidades Promotoras de Salud del país.
En la misiva se menciona. “Los abajo firmantes creemos firmemente en la posibilidad de generar cambios positivos en nuestra nación. Nos dirigimos a usted con respeto y apertura, conscientes de que el diálogo y la colaboración son fundamentales para construir un futuro próspero y equitativo en Colombia”.
Además afirmaron que no buscan debatir ni evaluar los aciertos o las fallas del Gobierno, sino que pretenden simplemente expresar sus preocupaciones y propuestas acerca de las reformas sociales que están en discusión, particularmente la de la salud.
“En primer lugar, consideramos importante señalar que el proceso llevado a cabo hasta el momento ha carecido de una participación amplia y transparente por parte de toda la sociedad. A pesar de que numerosas voces de expertos, usuarios, pacientes, hospitales, empresarios, médicos y trabajadores del sector salud han expresado sus preocupaciones y planteamientos, estas no han sido debidamente tomadas en cuenta”, señalaron.
Y mencionaron que esta discusión se ha parecido a un monólogo en el cual se impuso una visión única del sistema de salud. Más porque consideraron la propuesta no tiene en cuenta algunos riesgos a los que se podría enfrentar el país una vez empiecen a implementarse los cambios propuestos en el texto de la reforma.
“Además, nos preocupa que hasta el momento no se nos haya proporcionado una explicación clara y fundamentada sobre cómo se llevará a cabo la transición de un sistema en funcionamiento a otro que no existe y cuya operación no es clara para más de 50 millones de colombianos y migrantes que actualmente cuentan con un plan de salud y una garantía de su derecho a través de las EPS”, explicaron los firmantes de la misiva.
Es decir que para los firmantes el articulado que ya pasó el primer debate en la Comisión Séptima de la Cámara aún no aclaro en varios puntos y señalaron que pasar del actual modelo de aseguramiento mixto a uno público podría representar muchos retos que consideraron que son “innecesarios” e incluso podrían sobrepasar las capacidades que tiene el Estado para asumir esas nuevas funciones.
Se aplazó nuevamente el debate de la reforma
El miércoles 7 de junio el Gobierno nacional falló nuevamente en un intento de lograr que se vote positivamente la reforma a la salud ante la Plenaria de la Cámara de Representantes aún con las menciones hechas por parte del presidente Petro. El ambiente se ha puesto tenso debido a los audios que reveló Revista Semana en los que el exembajador de Colombia en Venezuela dejó entrever que había existido un manejo irregular en los dineros que ingresaron a la campaña presidencial de Gustavo Petro lo cual a cooperado para que el Congreso de la República no quiera darle visto bueno a las reformas propuestas por el Gobierno.
En este sentido el 7 de junio se esperaba un debate en la Plenaria de la Cámara sobre el proyecto, pero el legislativo se dedicó a dar a conocer variedad de impedimentos que presentaron varios congresistas. La sesión poco a poco se fue prolongando hasta que el presidente de la corporación, David Racero, no tuvo más opción que levantar sin haber iniciado el debate y citar para la próxima semana.
Cabe mencionar que a las 6:00 de la tarde aún se continuaba la votación de los 31 impedimentos radicados, sobre las 3:30 p. m., se inició con el orden del día y a las 7:30 después de casi cinco horas de sesión, se anunciaron proyectos, se levantó la sesión y se citó para el próximo martes 13 de junio.
Esta sería la segunda vez en la semana que se trata de discutir la iniciativa sin que se puede avanzar, el martes se tuvo que cancelar la sesión media hora antes de su inicio porque no había ambiente político para dar el debate.