Presidenta de Asocaña denunció que el gremio ha perdido más de 6.000 empleos por la violencia en la región

Claudia Calero, presidenta de Asocaña, denunció que, en el transcurso del año, cinco trabajadores de los ingenios han perdido la vida, ocho han sido heridos y uno fue secuestrado. Ella asegura que hasta la fecha no se ha tenido ninguna respuesta por parte de la justicia, y no hay nada concreto sobre quiénes pueden ser los autores de estos hechos ocurridos en el norte del Cauca.

La funcionaria aseguró que en la región “hay zozobra, hay incertidumbre, hay impunidad y la impunidad trae más violencia”. Luego, enfatizó en que “a la fecha, solo en el Norte del Cauca, se han perdido más de 6.000 empleos, empleos que llevan desarrollo a la región, son familias que hoy en día no tienen sustento”.

Del mismo modo, la directora gremial recordó también que “en el norte del Cauca es potencia para el desarrollo del país y puede ser el mejor laboratorio de paz. El esfuerzo de gobierno, comunidades y sector privado por el bienestar de esta región debe ir acompañado de justicia efectiva y seguridad”.

Por último, Calero reiteró que los ingenios azucareros afiliados a este gremio siempre apoyarán el diálogo como una forma de construir el desarrollo del suroccidente y la paz del país.

Igualmente, ante la situación de inseguridad no solo en el Cauca sino también en el Valle del Cauca, gremios y empresas de esos departamentos hicieron un llamado a la Presidencia de la República y a la Fiscalía General de la Nación para que tomen acciones inmediatas que garanticen derechos a la vida, el trabajo, libre movilidad y convivencia pacífica.

“Los 45 gremios y ocho cámaras de comercio, que reúnen cerca de 140.000 empresas en ambos departamentos, han evidenciado con preocupación un aumento de situaciones que atentan que atentan contra la vida e integridad de los trabajadores de los diferentes sectores productivos de la región, así como de sus familias”, indica el comunicado.

“Son frecuentes los casos de hurtos, destrucción de maquinarias y vías, atentados mediante instalación o lanzamiento de explosivos, extorsiones, secuestros, tentativas de homicidio y homicidios, que han incrementado el temor y la zozobra de quienes hacen parte del sector productivo”, señalan los gremios de la región.

Del mismo modo, Edwin Maldonado, director ejecutivo del Comité Intergremial del Valle del Cauca, aseguró que “el suroccidente de Colombia es la puerta de entrada para las materias primas de la industria y del comercio, es la plataforma para las exportaciones de los bienes producidos en el interior del país y un punto estratégico para la reserva alimentaria de los colombianos”.

Por eso, Maldonado pidió al Gobierno nacional y a los gobiernos regionales que “desarrollen una estrategia conjunta y coordinada que permita terminar con la impunidad y garantizar el derecho a la vida, el trabajo, la movilidad y la propiedad privada de todos los que vivimos en esta región”.

Por su parte, la Sociedad de Agricultores de Colombia (SAC), había hecho un pedido similar después de conocerse la muerte de dos trabajadores del sector agroindustrial de la caña en febrero de este año: “Le solicitamos al Gobierno nacional que despliegue los esfuerzos necesarios para garantizar el derecho a la vida de todos los trabajadores del sector agroindustrial de la caña y de todo el sector agropecuario colombiano. Hacemos un llamado a la Fiscalía General de la Nación para que realice las labores que conduzcan ante la justicia a los responsables de este reprochable crimen”.