El escándalo de chuzadas que le costó el cargo a la ex jefa de gabinete Laura Sarabia se dio a conocer cuando la Fiscalía General de la Nación confirmó que sí se realizaron interceptaciones al teléfono personal de Marelbys Mesa, exniñera del hijo de Sarabia.
Como parte del anuncio se conoció que un patrullero fue el que le solicitó a la Fiscalía la interceptación de los números, por lo que fue el primer señalado de que un número de un civil terminara vinculado a una investigación en contra del Clan del Golfo.
En una entrevista con el periodista Daniel Coronell, el patrullero confirmó que no tenía conocimiento de que el número perteneciera a Mesa, pues la información le fue entregada por una fuente que hacía parte del Clan del Golfo, y aseguró que su trabajo consiste en motivar el trámite de interceptación y la Fiscalía General es la que se encarga de realizarla.
“La interceptación se solicitó ante la Fiscalía General de la Nación el día 30 de enero del año 2023, la cual ingresa como tal a la sala de interceptación de la Policía Nacional el día 31 de enero del presente año. Yo dentro de mis labores solamente motivo el trámite de Interceptación, la que intercepta es la Fiscalía General de la Nación”.
Sobre el procedimiento que se debe llevar a cabo para presentar los números y que sean avalados, el patrullero aseguró que él hace un informe que le entrega al fiscal que lleva la investigación, y una vez avalados los números, la Fiscalía General es la encargada de verificar los trámites.
“El procedimiento que se hace acá es elaborar un informe de fuente humana y los trámites que van encaminados a la Fiscalía General de la Nación. Yo realizo los trámites y los envió al señor fiscal y el señor fiscal los avala y después de eso se envía la sala de interceptación de la Policía Nacional, obviamente verificados dentro de los parámetros de la sala de interceptación. En eso también está Fiscalía General de la Nación que es la que revisa los trámites y demás”.
En cuanto a la manera en la que le llegaron los números de las empleadas de Laura Sarabia, el patrullero confirmó que se los entregó una fuente que es integrante del Clan del Golfo con la que ya había trabajado y que le había dado datos confiables sobre la organización.
“Esos abonados telefónicos me los brinda una fuente humana que previamente me había dado información importante la cual, me llevó a un resultado muy importante en contra del clan del Golfo en el departamento del Chocó”.
Según lo confirmó el patrullero, su fuente era un miembro activo de la organización criminal, por lo que le aseguró que los números, que resultaron ser de Marelbys Mesa y de otra empleada de Laura Sarabia, lo llevarían a dar con la ubicación de alias Siopas, que era un cabecilla principal de la organización en el Choco.
“Yo motivé la interceptación de cuatro abonados telefónicos, dos fueron los abonados que me brindó la fuente humana y los otros dos abonados fueron dados por el analista de comunicaciones de la sala de interceptación de la Policía Nacional”.
Sobre las declaraciones del Fiscal General en las que afirmó que el patrullero indujo al error al fiscal que avaló las interceptaciones, el agente de la Policía aseguró que él motivó la inclusión de los números porque creyó en que la información que le brindó la fuente era confiable.
“Él dice que yo aduje al error al señor Fiscal 191, entonces a mí también me indujeron al error porque yo partí de la buena fe de la fuente humana y por los sugeridos por el analista de comunicaciones de la sala de interceptación de la Policía Nacional”.
Uno de los problemas a los que se enfrenta el patrullero es que la fuente humana que, supuestamente, le entregó los números de teléfono puede estar muerta, pues el Clan del Golfo protagoniza una serie de enfrentamientos internos que le ha costado la vida a varios de sus miembros como, por ejemplo, el propio alias Siopas.
“Uno puede deducir que como en ese entonces habían confrontaciones internas dentro de esta estructura criminal, uno aduce que esta fuente humana puede haber muerto o no sé, pero en este momento dónde está la fuente humana, desconozco el paradero”.