Tras seis meses del inicio de conversaciones formales, el Gobierno nacional y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) acordaron un cese al fuego que se hará oficial el 9 de junio en la clausura del tercer ciclo de conversaciones. El logro, que sería el más importante hasta el momento de la negociación, fue calificado por Danilo Rueda, alto comisionado para la Paz, como “histórico”.
“Es la primera vez que el ELN en los diversos procesos de paz con diversos gobiernos, pacta un cese bilateral por seis meses con unos mecanismos de monitoreo y verificación que se instalarán en los próximos días y semanas”, señaló Rueda en el canal de comunicación oficial del Gobierno, Colombia Hoy Radio.
El anuncio será dado por el presidente Gustavo Petro que viajó a La Habana para participar de la clausura del tercer ciclo. Así mismo, estará en la isla el comandante de la guerrilla Antonio García, con quienes se suscribirán los acuerdos que tienen el objetivo de reducir la violencia en los territorios para permitir la participación de la sociedad.
Los términos del cese al fuego
Rueda señaló que la suspensión de las hostilidades de la fuerza pública con esa estructura armada se decretará en todo el territorio nacional. En ese sentido, no se habría acogido la propuesta del Gobierno de hacerlo solamente por regiones, sino que se enfocará en territorios para reducir la violencia.
“Va a haber un cese de fuego de carácter nacional y simultáneamente tendremos escenarios de incidencia territorial. Todo esto que se anunciará desde hoy, tendrá unos efectos muy concretos en los territorios, con procesos pedagógicos y, adicionalmente, con generar garantías para la reducción de la zozobra de los pobladores en varios territorios del país”, sostuvo el alto comisionado.
Para Rueda se trata de un avance significativo para la negociación que “nunca antes se ha logrado esto en un proceso de paz con esta guerrilla”, según dijo a El País. Iván Cepeda, delegado del gobierno en la mesa, señaló que es “un día memorable para la paz de Colombia”.
El alto comisionado también señaló que este avance muestra que la mesa de conversaciones cuenta con un “ambiente de absoluta confianza y seguridad para lograr enfrentar los reveses y, en particular, el horizonte de la posibilidad cierta [...] para que podamos tener muy buenas noticias en un mediano plazo, para que el ejercicio de la política sin armas se pueda lograr en nuestro país”, concluyó.
Las reacciones al cese al fuego
Todavía no se conocen los detalles del acuerdo que no logró estar terminado para la clausura y llevó a las delegaciones a solicitar al presidente Petro y al comandante guerrillero un día más de plazo. Según dijeron, falta definir detalles y protocolos para poder firmar los documentos denominados Acuerdos de Cuba.
Aún así el anuncio ya ha generado críticas por las posibles condiciones que se contemplen. “¿Entonces la firma del cese al fuego con terroristas del ELN no es para que ellos dejen de delinquir, sino para que la Fuerza Pública no pueda perseguir? El Estado arrodillado a las exigencias de terroristas que no han respondido por sus atroces crímenes”, señaló la senadora María Fernanda Cabal.
“Varias fuentes han alertado sobre esto. Por afán de Gustavo Petro de mostrar resultados en “algo”, va a terminar firmando un cese al fuego con el ELN que, en la práctica, es unilateral. Ata las manos a FFMM y Policía y permite al ELN seguir delinquiendo”, sostuvo el analista y exsecretario de Seguridad de Bogotá, Daniel Mejía.
Para otros sectores, en cambio, se trata de un avance tanto en las negociaciones con esa estructura armada, como en la búsqueda de alivios para la violencia que azota algunos territorios. En especial, de cara a las elecciones regionales que se desarrollarán en octubre.