Después que el exembajador de Colombia en Venezuela Armando Benedetti afirmara que consiguió $15.000 millones para la campaña presidencial de Gustavo Petro, y que se abriera una investigación porque estos dineros que no están demostrados en los libros de las finanzas de la campaña, se conoció la reacción de la Misión de Observación Electoral en Colombia (MOE).
A través de un comunicado, solicitaron al Consejo Nacional Electoral (CNE) y a la Fiscalía General de la Nación que de manera articulada “se adelanten las investigaciones penales y administrativas correspondientes con el propósito de determinar las responsabilidades a que haya lugar”, frente al origen y monto de los recursos utilizados por el presidente.
“Los adecuados y oportunos controles sobre el origen, monto y destinación de los recursos para la financiación de las campañas, han sido un principal reto para garantizar la transparencia de los comicios, evitar la cooptación por parte de actores ilegales y finalmente disminuir el riesgo de corrupción en el ejercicio del cargo”, se agregó en la misiva.
“Esta situación tiene que ser un llamado para que se tomen acciones contundentes por parte de la Fiscalía General de la Nación y el CNE, para que generen los controles suficientes a la financiación de las campañas de las elecciones de autoridades locales que se desarrollarán en el mes de octubre de este año”, enfatizó la MOE.
Por tal razón, de acuerdo con Barrios, solicitó a las dos instituciones que se instale una mesa técnica para que se generen los controles necesarios a la financiación de las campañas.
El camino que debe tomar el CNE
Al respecto, la directora de la MOE, Alejandra Barrios, le dijo a El Nuevo Siglo que se necesita de un CNE que tenga la suficiencia técnica de monitoreo y seguimiento, además de “una capacidad muy fuerte de las organizaciones políticas y sus campañas frente al uso de recursos por fuera de los topes aceptados o los que están por fuera de la ley cuando no se les permite financiación”.
“Si nosotros no tenemos eso, temas como los que hoy se denuncian van a seguir saliendo en campañas electorales porque hay poca certeza por la debilidad en el control de la financiación de las mismas”, se añadió en el comunicado.
Y recomendó al CNE citar al señor Armando Benedetti. “También se está citando a Laura Sarabia, pues Benedetti la involucra. Pero también, indiscutiblemente, al gerente y contador de la campaña, pues ambos hacen la revisión documentaria de la información que fue entregada. Esa es la acción que muy seguramente debe estar en el plan de trabajo del CNE para esta investigación”, remarcó Barrios.
“Después de eso, se debe definir si se entregó o no la información correspondiente a los gastos de ingresos reales de la campaña electoral. Después, la Fiscalía tendrá que determinar si hubo ingresos ilegales o no reportados a la campaña electoral”, subrayó la directora en el diario.
En cuanto a cómo evitar las filtraciones ilícitas para las próximas elecciones, Barrios advirtió que será un dolor de cabeza, “pues vamos a tener más de ciento veinte mil candidaturas, con un CNE que requiere ser fortalecido en su capacidad de vigilancia y control de las campañas electorales”.
Finalmente, Barrios señaló que y a se tomó una decisión importante con respecto a este tema. “Y es llevar a cabo una mesa de trabajo con el Banco Agrario para que los candidatos puedan tener cuentas. Lamentablemente, los candidatos son considerados sujetos con alto impacto, por lo que a los bancos no les gusta abrir cuentas para campañas”, indicó.
“Esto fomenta el uso de efectivo. Los mayores problemas que tenemos en transparencia es cuando empiezas a mover recursos en efectivo para financiar campañas, porque, efectivamente, se desconocen con exactitud ingresos y gastos”, finalizó.