Los millones de personas que atraviesan la selva del Darién entre Colombia y Panamá para llegar a los países del norte sigue preocupando a los Estados Unidos. Para buscar control de la situación y ofrecer soluciones, ese país instalará oficinas en varias naciones de la región que hacen parte del flujo migratorio y las rutas irregulares de tránsito.
“En fecha reciente el gobierno de los Estados Unidos ha propuesto la creación de Puntos de Movilidad Segura (Safe Mobility Offices) que tendrían como objeto identificar, registrar y conocer los motivos de la migración irregular y dirigirla por rutas legales partiendo desde Colombia a los Estados Unidos”, señaló la Cancillería y el Departamento de Estado de EE.UU. a través de un comunicado conjunto.
El gobierno norteamericano publicó la información como un “compromiso conjunto” de ambos países para la implementación de las oficinas que se haría, según la Cancillería, “en los próximos días”. Además aclararon que el manejo de las mismas se haría por parte de ambos gobiernos.
“El gobierno de los Estados Unidos está trabajando con el gobierno de Colombia en la pronta implementación de un modelo que garantice el éxito de lo propuesto. Este modelo podría ponerse en marcha conduciendo migrantes de Haití, Cuba y Venezuela hacia rutas legales”, señaló la Cancillería.
Se buscaría establecer compromisos con otros países de la región para instalar otros Puntos de Movilidad que tendrán el objetivo de prevenir riesgos de quienes pretenden “iniciar o continuar esa migración irregular hacia los Estados Unidos u otros lugares como Canadá”, señalaron las entidades.
Tanto la Cancillería como el Departamento de Estado anunciaron que buscan ampliar las vías formales de migración, como un mensaje para que las personas opten por mecanismos regulares para llegar a ese país y desincentivar el uso de las rutas sin control.
“El gobierno de los Estados Unidos de América reafirma a su vez su compromiso de expandir simultáneamente vías legales adicionales para colombianos con visas de trabajo temporales y reunificación familiar ampliada, creando más caminos para reunir familias colombo-estadounidenses y ayudar a trabajadores colombianos a acceder a oportunidades laborales en los Estados Unidos”, señalaron en el comunicado conjunto.
Las cifras de la migración en el Darién
El número de personas de diferentes nacionalidades que han utilizado las diversas rutas de tránsito para llegar a la frontera con Norteamérica puede llegar medirse en millones. Estos sectores generan riesgos debido a que son controlados por grupos armados y no tienen presencia permanente de autoridades.
En el 2022, el Servicio Nacional de Migración de Panamá registró 248.284 personas migrantes con necesidad de protección internacional en la frontera con Colombia, es decir el Darién. De acuerdo con la Defensoría nacional, hasta mayo de 2023 se tenía registro de 127.000 personas. La mayoría de las personas serían de nacionalidad venezolana con 55.589 registros, seguidos por haitianos 28.610 y ecuatorianos 16.992.
Para el quinto mes del año, la Defensoría alertó de un aumento en el flujo migratorio evidenciado por los equipos regionales de Urabá Darién y Chocó, donde se encuentran los principales puntos de salida, al encontrar mayor número de personas en los municipios de Turbo y Necoclí (Antioquia), Acandí y Juradó en (Chocó).
El defensor Carlos Camargo, además, lanzó una alerta porque consideraba que tras levantar el Título 42 en el que se estableció la medida que permitió a los Estados Unidos expulsar rápidamente a los migrantes irregulares en ese país, se podría aumentar el número de personas.
“Hago un llamado a toda la institucionalidad para que de inmediato se construyan planes de contingencia que permitan garantizar los derechos de los migrantes y refugiados ante el aumento que podría presentarse a partir de ahora. Es fundamental que se considere la instalación de albergues humanitarios para atender esta población en sus necesidades básicas y puntos de orientación y asistencia legal”, subrayó el defensor del Pueblo.