Con inteligencia artificial, una colombiana estudia dónde restaurar corales en San Andrés y Providencia

La inteligencia artificial se ha venido utilizando en cada vez más ámbitos de la vida cotidiana. Incluso, un reciente estudio de IBM en Colombia, asegura que el país es una de las zonas de Latinoamérica con mayor adopción de la inteligencia artificial. Según esta organización, en 2022 el número de empresas que usan IA creció 7% con respecto a 2021 y casi la mitad de las compañías consultadas, están explorando usarla de alguna manera.

Lo anterior se evidencia en los casos en que el país se ha utilizado este tipo de tecnología para realizar avances científicos en materia de salud y bienestar, para crear discursos políticos y hasta para tomar decisiones judiciales mediante un ChatGPT.

Sin embargo, en esta oportunidad la colombiana Ángela Alegría, biologa marina, decidió utilizar la inteligencia artificial con fines medioambientales, específicamente, para restaurar corales en las islas de San Andrés y Providencia.

Según el diario El Tiempo, Alegría construyó un soporte para realizar fotogrametría marina y de esta manera para capturar fotografías debajo del mar mientras va buceando en línea recta.

La científica está trabajando de la mano de la organización Reef Support y de la ONG ambientalista WWF Países Bajos. Al utilizar el soporte, Alegría captura unas 1.500 fotos por sesión, las sube a un programa para crear modelos 3D, y revisa el estado de la zona que quiere estudiar.

El propósito principal de Ángela Alegría es utilizar la inteligencia artificial para optimizar el proceso de recolección de la información que obtiene sobre una zona determinada que ha estudiado. De esta manera, es posible tomar decisiones más rápidas y efectivas para restaurar arrecifes de coral.

Según la colombiana, si las fotografías son capturadas de manera correcta y con buena iluminación, es posible visualizar los colores y determinar si los corales tienen alguna enfermedad.

La científica asegura que la captura de fotografías con el soporte se debe hacer al menos una vez cada año. Esto, para comparar cómo va cambiando la zona estudiada.

Los arrecifes de coral son unos de los ecosistemas marinos más amenazados por la sobrepesca, el derrame de desechos y el cambio climático. Investigaciones científicas estiman que se ha perdido el 80% de la cobertura coralina en el Caribe y que, de seguir a ese ritmo, para el año 2050 podrían desaparecer.

El Día Mundial de los Arrecifes, que se celebra cada primero de junio, es un llamado a proteger y restaurar los arrecifes coralinos debido a que tienen un papel fundamental en el equilibrio de los ecosistemas marinos.

Los arrecifes son los encargados de la regulación de los océanos y su presencia es vital para el desarrollo y sobrevivencia de diferentes especies como peces y crustáceos de interés comercial. Por lo tanto, una vez que mueren, impacta directamente en la pesca artesanal.

Marco Macuto, biólogo marino, señaló para El Diario que los arrecifes, al igual que los árboles, son grandes productores de oxígeno. Por lo tanto, se considera que el verdadero pulmón del planeta está en los océanos.

Pese a la importancia de los arrecifes de coral para los ecosistemas, una de las problemáticas actuales, según registran varios gobiernos y organizaciones ambientales, es que la falta de financiamiento y de recursos en las ONG, provoca que los estudios e investigaciones sobre el estado de estas especies marinas sea escaso y, a su vez, limitado.