La reforma a la Salud se ha convertido, con el paso de los meses, en un dolor de cabeza para el gobierno de Gustavo Petro, pues el articulado que presentó el Ejecutivo Nacional no ha logrado generar consenso en las filas legislativas.
De hecho, fue gracias a esta reforma que el bloque de partidos de coalición se rompió definitivamente hace poco más de un mes, y la salida de la ahora exministra Carolina Corcho fue resultado directo de la forma en la que gestionó su trámite.
Y para el Gobierno Nacional esta reforma sigue siendo un pulso en el que ha tenido que ceder frente a temas que, inicialmente, se veían más como líneas rojas.
De acuerdo con Caracol Radio, el lunes 29 de mayo, tras varias horas de reunión entre el ministro de esta cartera, Guillermo Jaramillo, y las Entidades Prestadoras de Salud, se acordó que las EPS podrán presentar todos los reparos que tengan sobre el proyecto antes del jueves 1 de junio, para evaluar una eventual modificación de la ponencia que se presentó el lunes para abordar el segundo debate.
Adicionalmente, en la misma reunión los directivos de las EPS presentaron una propuesta para mantener todas las funciones que hoy cumplen estas entidades en el sistema de salud (referencia de pacientes, gestión del riesgo en salud) excepto la administración de los recursos del sector. Así lo confirmó el medio de comunicación ya citado.
La manzana de la discordia
En esa propuesta radica buena parte de la discordia que hay alrededor de este articulado y, precisamente por eso, fue un aspecto frente al cual más llamaron la atención tanto ACEMI y como el exvicepresidente de la República Germán Vargas Lleras, un día después de que se aprobara en primer debate esta reforma. Vargas espera que en el Senado esta iniciativa tome otro rumbo.
“ACEMI concluye que la iniciativa constituye un grave retroceso en el derecho a la salud de los colombianos. Entre las principales preocupaciones, que ya han sido enviadas al Congreso e la República, se destacan que se mantiene la propuesta inicial del MinSalud de eliminar el modelo de aseguramiento, constituir un pagador de naturaleza pública universal, eliminar las EPS, adscribir a las personas a Centros de Atención Primaria (CAP) y fragmentar la prestación (...) Como ya no hay EPS, serán los hogares colombianos los que deban financiar cobros adicionales o inesperados”, precisó un comunicado de Acemi.
Y dijo Germán Vargas Lleras: “lo peor de esta reforma es que se acaba el modelo de aseguramiento estatal. Por supuesto que se eliminan las EPS y básicamente acaba con las aseguradoras, las primas, las reservas técnicas. La gestión de riesgo pasa a unas estructuras burocráticas, es decir, a lo que se denominan fondos cuota regionales”, indicó el líder natural de Cambio Radical, German Vargas Lleras el pasado 24 de año.
En una segunda medida, advirtió hace menos de una semana Vargas Lleras, “ese monstruo de la Adres y sus mil tentáculos ahora controlará, auditará y además será el pagador único del sistema en el país. Se acaba el aseguramiento individual. Usted ya no podrá seleccionar la entidad que le cubra su sistema de salud. Tendremos que ir todos a empadronarnos a un centro de atención primaria y eso, a mí me parece, es una captura personal y política de todas las personas”. precisó.
Y también se refirió al inconveniente que hay en que los giros a las IPS se hagan por adelantado. “Por adelantado, se le girará a las IPS el 80% de las cápitas, o sea, de los recursos, y no habrá control de gasto. Este, por supuesto, explotará. Recordemos que hoy a las clínicas aun se les deben 10 billones de pesos y la prestación de todo el servicio será estatizada y pública”.