Continúa la alerta naranja en el volcán Nevado del Ruíz, que tiene pendientes a todas las autoridades de las zonas de influencia por una posible emergencia de aumentarse su actividad. En su más reciente boletín informativo, el Servicio Geológico Colombiano (SGC) reportó que desde las 9:00 de la mañana del 27 de mayo disminuyó la sismicidad relacionada con el movimiento de fluidos al interior de los conductos volcánicos y asociada a emisión de gases y ceniza respecto al día anterior (26 de mayo).
De tal manera que se reportaron sismos pequeños en el cráter Arenas, los cuales se asocian a la actividad del domo (protuberancia o montículo) de lava ubicado en el fondo del cráter. Además, hubo emisiones pulsátiles de ceniza confirmadas a través de las cámaras web dispuestas por el SGC utilizadas para el monitoreo volcánico.
Al mismo tiempo, continuó el registro de sismicidad asociada a fracturamiento de roca al interior del edificio volcánico, que se ha estado registrando desde el 24 de mayo en el sector nororiental del volcán. Esta actividad disminuyó en cuanto al número de sismos y la energía sísmica en comparación al 26 de mayo, y se localizó a una distancia máxima de 3 kilómetros a partir del cráter Arenas y a profundidades entre 4 y 6 kilómetros.
Adicionalmente, se sigue viendo una columna de gases y cenizas saliendo desde el volcán, cuya altura máxima reportada fue de 800 metros medidos desde la cima y su dirección de dispersión se mantuvo principalmente hacia el noroccidente del volcán. “Continúan las variaciones en la desgasificación de dióxido de azufre y la salida de vapor de agua desde el cráter a la atmósfera”, agregó el SGC.
Todos estos indicadores llevaron a la conclusión de que la actividad en el volcán sigue siendo muy inestable, por lo que el SGC recomendó seguir todas las instrucciones de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) y autoridades locales, y estar atenta a la información proporcionada.
Adicionalmente, la entidad advirtió que los niveles de actividad sísmica, así como los niveles de desgasificación o salida de ceniza, pueden disminuir o ser oscilatorios, en el sentido de aumentar unos días y disminuir otros, sin que esto quiera decir que la actividad del volcán pase a alerta amarilla, por lo que permanecerá en alerta naranja. “Para cambiar de nivel y retornar a nivel amarillo se requiere un tiempo prudencial donde se puedan observar tendencias y patrones que permitan inferir la posible disminución de la actividad”, explicó el SGC.
Para que el nivel cambie a rojo, se requiere que “se produzca una aceleración de los procesos que sugieran una erupción inminente o que se produzca la erupción en sí”.
Por último, el Servicio Geológico Colombiano enfatizó en que “continuará atento a la evolución del fenómeno volcánico e informará oportunamente sobre los cambios que puedan presentarse”.
Tembló en Colombia: fuerte sismo sacude el centro del país
El sismo sacudió el centro del país sobre la mañana del domingo 28 de mayo, con una magnitud superior a cinco grados en la escala de Richter. Conforme a lo expuesto por el Servicio Geológico Colombiano (SGC) el epicentro se localizó en la región de Santander; por su parte, la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo y Desastres evalúa en diferentes puntos los eventuales daños.
El sismo se sintió en varias zonas del país, desde Bogotá hasta la costa caribe colombiana; hasta el momento, Bomberos y otras entidades encargadas de emergencia reportan que no hay actividad en las líneas de atención. En su actualización el SGC resaltó que la magnitud del movimiento telúrico fue de 5,7 grados, con epicentro en el municipio de Los Santos, Santander.
Por su parte, la alcaldesa de Bogotá, Claudia López señaló: “Al momento no se reportan daños ni emergencias en la ciudad por el sismo de magnitud 5.5 con epicentro en Santander. Seguimos atentos. Cualquier emergencia repórtenla a la Línea 123″.
Asimismo, el presidente Petro descartó de manera preliminar posibles víctimas, sin embargo, el seguimiento continúa en diferentes partes del país. “No hay reportes hasta el momento de víctimas por el temblor de hoy”, expresó el mandatario.
Por qué tiembla en Colombia
Flover Rodríguez-Portillo, director ejecutivo de la Asociación Colombiana de Geólogos y Geofísicos de la Energía (ACGGP), le explicó a Infobae la importancia que tiene la ubicación geográfica de Colombia, con relación a la sismicidad del territorio. Para Rodríguez, los movimientos telúricos hacen parte de las denominadas expresiones que emana la tierra, esto, gracias a que el país cafetero se encuentra sobre dos placas tectónicas de gran importancia.
“Colombia es un país con una diversidad geológica interesante, el hecho de que el país está ubicado en esta esquina noroccidental de Sudamérica, hace que se haya configurado toda una serie de expresiones geológicas, acá tenemos la interacción de placas tectónicas, tenemos la Placa Sudamericana que está donde básicamente está el continente, tenemos la Placa de Nazca en el occidente, que es esa digamos la placa oceánica y que genera esa interacción en el Pacífico; el choque de esas dos placas genera una serie de fenómenos muy particulares en nuestro país”, expresó.
Diferencia entre intensidad y magnitud
Cuando se registra un sismo, es común que tanto la población como los mismos medios de comunicación se pronuncien de manera inmediata y traigan a colación términos como magnitud e intensidad y aunque suenan parecidos son totalmente diferentes.
“La gente del común y los medios de comunicación usan los términos magnitud e intensidad, pero son conceptos totalmente diferentes que vale la pena aclarar: la magnitud de un terremoto es una medida que nos da una idea de la energía que liberó ese terremoto, pero la intensidad es una medida que nos dice la capacidad de destrucción que puede tener ese terremoto”, expuso Flover Rodríguez-Portillo.
Cabe resaltar que, la magnitud se mide en escala de Richter, mientras que la intensidad es cuantificada basándose en la escala sismológica de Mercalli, cuyos grados pueden ir de I a XII, grados que se diferencian entre lo más débil a lo más catastrófico.
Algunas regiones del país presentan mayor actividad de esta índole, resaltando las que se encuentran sobre las cordilleras y en el litoral pacífico, tal como lo explica Londoño Bonilla.
“Desde el punto de vista sísmico, hay un mapa de amenaza basado en la norma sismo resistente que muestra que toda la parte del Pacífico, el borde llanero, digamos del Norte de Santander y Santander, tiene amenaza alta, así como la parte central de Colombia en medio y también en parte de la Costa Atlántica. Ya lo que viene siendo los Llanos y la Amazonía sería amenaza baja”, sintetizó Londoño.