El expresidente Álvaro Uribe Vélez deberá ir a juicio luego de que la juez 41 de Conocimiento negó la segunda solicitud de preclusión que presentó la Fiscalía General de la Nación a su favor. El exmandatario publicó sus alegatos finales ante la decisión, en la que apoya al ente acusador que presentó una apelación.
Según Uribe, sus abogados enviaban toda la información que recolectaban a la Corte Suprema de Justicia “con el pedido que se verificara”. Pese a que varias de esas pruebas fueron las que llevaron a acusarlo de presunto fraude procesal, tanto al expresidente, como al abogado Diego Cadena.
“Yo no podía hacer verificaciones de las declaraciones que llegaban, ¡cómo la señora juez afirma que yo debí verificar antes de enviar algo a la Corte. Ahí estaría yo intentando sustituir a la justicia!”, señaló el exmandatario en su alegato. Por ejemplo, la carta de retractación de Juan Guillermo Monsalve que llevó a una Acción de Revisión en el alto tribunal, de la que Uribe dice no haber conocido ni autorizado.
La reunión de Cadena con Deyanira Gómez, exesposa de Monsalve, según Uribe Vélez, fue una trampa para que “lo pusieran preso y fueran de inmediato por mi persona. El lugar público donde se reunieron, cerca de la Corte, según narración del doctor Cadena, estaba rodeado por personas con características de agentes de seguridad del Estado. Eso coincidió con el rumor generalizado en Bogotá de que me llevarían a la cárcel, yo era el único que no lo creía, el proceso lo mantuvieron oculto y la Corte lo negó en respuesta a mis abogados”, señaló.
El rumor habría alcanzado las esferas políticas en medio de contienda electoral para el 2018, año en que se inhibió al senador Cepeda y se compulsaron copias en contra del exmandatario. “El doctor Germán Vargas llegó a comunicar que por lo que ocurriría en la justicia ya no sería el doctor Iván Duque sino él quien pasaría a la segunda vuelta presidencial a competir con el doctor Petro”, aseguró Uribe.
Pese a que el exmandatario sostiene que él no tenía posibilidad de verificar la información que le llegaba, reiteró en su defensa que le solicitó las verificaciones correspondientes a su abogado Cadena. Así lo dijo sobre las funciones de este con reclusos de Estados Unidos, la retractación de Monsalve, las acusaciones de Harlinton Mosquera sobre ofrecimientos de Iván Cepeda e Iván Velásquez a paramilitares extraditados, así como de la declaración del ‘Tuso’ Sierra.
“Pretendió la señora juez que yo no presentara a la Corte las declaraciones que porque eran falsas. Recuerdo, todo lo enviaba a la Corte, sin ediciones, sin embellecimientos, para la verificación. Más aun, cómo pretende la señora juez que yo no las presentara con tanto antecedente público del senador Cepeda para afectar mi reputación”, afirmó Uribe.
El exmandatario aseguró que su urgencia por defender su honra era por, supuestamente, defender sus derechos políticos por un proceso que iniciaba en vísperas electorales. Además, alegó que no tenía cómo saber que la información que pasaba a la Corte no correspondía a la verdad.
Según Uribe, en el proceso hay “una sustitución de la independencia de los jueces por la imposición de las tesis de algunos de sus superiores”, e incluso vinculó a su sucesor en las acusaciones. “Un proceso político en el cual los magistrados Barceló y Luis Hernández salieron en la televisión a hacer agitación política judicial contra mi persona. Aquí hay temor a los magistrados que me encarcelaron, inducidos por el magistrado Reyes, contratista de Juan Manuel Santos en el Proceso de La Habana, del cual yo fui opositor.
Será el Tribunal Superior de Bogotá el que tenga la última palabra en la solicitud de preclusión, pues deberá evaluar la decisión tomada por la juez de conocimiento para decidir si proceden las apelaciones de la defensa y la Fiscalía o si, por el contrario, ratifica el fallo y el exmandatario deberá enfrentar un juicio.