José Félix Laufurie calificó de fallido el proceso de paz de Santos con las Farc: “El país regresó a unas épocas que creímos superadas”:

En el marco de los diálogos de paz con el ELN, el presidente de Fedegán aseguró que Colombia tendrá dificultades para asimilar el proceso mientras haya lógica del terror

José Félix Lafaurie, presidente ejecutivo de Fedegán.

Las delegaciones del Gobierno nacional y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) decidieron postergar el tercer ciclo en la mesa de conversaciones para buscar un acuerdo de paz, tras la crisis que se desató a mediados de mayo. Continuarán trabajando dos semanas más hasta el 8 de junio en La Habana, Cuba. Respecto a esta decisión el presidente de Fedegán (Federación Colombiana de Ganaderos) José Félix Lafaurie se refirió al tema.

De acuerdo con el negociador del Gobierno se pretende avanzar en un cese de hostilidades, y por esta razón indicó que el país tendrá dificultades para asimilar el proceso mientras haya lógica del terror: “No creo que la sociedad colombiana sea capaz de asimilar un proceso que como este, viene después de uno que considero fallido”.

“El acuerdo de paz con las Farc no fue un trato que realmente le haya permitido a Colombia tener unos escenarios de paz, como lo que se prometió durante seis años de negociación. El país regresó a unas épocas que creímos estaban superadas”, señaló el líder gremial.

Además, Lafaurie calificó los hechos cometidos por el grupo criminal como “luctuosos”. El presidente de Fedegán agregó también que, “haber puesto una bomba en la zona norte de Santander, asesinar a unos soldados que estaban dormidos, haber cometido el atropello en Saravena (Cauca) de coger una comunidad y desplazarla. Me parece que no son unos hechos que entusiasmen en estos diálogos”.

Finalmente, el líder gremial aseguró que para avanzar en las negociaciones se debe salir de la lógica del terror porque “Colombia tiene que repensarse otra vez, hay que volvernos a montar una utopía que sea capaz de pensar en un mejor país porque como vamos, vamos mal”, concluyó.

imagen de archivo de la reinstalación de la mesa de diálogos entre el Gobierno Nacional y la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) el 21 de noviembre de 2022. Foto: Presidencia de Colombia

En días pasados José Félix Lafaurie había destacado “la firme decisión de permanecer en la mesa”, así como “el compromiso de lograr en este ciclo los acuerdos de cese al fuego bilateral y nacional, participación de la sociedad en la construcción de paz y acciones y dinámicas humanitarias”.

También sostuvo que el cese al fuego no se puede separar del cese de los hostigamientos a la población civil ni de la suspensión de las actividades ilícitas del ELN.

“El cese al fuego no se puede separar del cese de hostigamientos a la población derivados de las actividades ilícitas del ELN. Son ‘siameses’, como ambos lo son de la participación de la sociedad en la construcción de la paz”, explicó.

Anotó que si por cese al fuego se entienden los enfrentamientos entre la Fuerza Pública y el ELN, este nunca será posible mientras no cesen las actividades ilícitas, porque la Fuerza Pública está obligada por la Constitución Política a perseguirlas, como está obligada a defender a la población del fuego cruzado entre grupos ilegales por el control territorial, convertido en azote de las comunidades en los territorios.

¿Por qué extendieron el tercer ciclo de conversaciones?

Del Gobierno nacional y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) en la mesa de conversaciones para buscar un acuerdo de paz, extendieron el tiempo para consolidar los acuerdos que preparan. “Dada la importancia de los temas de la agenda que está desarrollando (participación de la sociedad en el proceso de construcción de paz, cese al fuego y, las acciones y dinámicas humanitarias), decidió prorrogar este tercer ciclo hasta el día 8 de junio de 2023; fecha en la que hará la clausura oficial de este ciclo”, señalaron las partes a través de un comunicado.

De acuerdo con la Oficina del Alto Comisionado para la Paz, no es la primera vez que se extiende el tiempo de conversaciones durante los ciclos. El objetivo de esta decisión es avanzar en la agenda, que se definió en los dos primeros y se conoce como Acuerdo de México, y que empezó a abordarse oficialmente en el tercer ciclo que se desarrolla en La Habana, Cuba.

El primer punto de la agenda es la participación de la sociedad, que la delegación insurgente considera el corazón de la negociación y, según dijeron el 23 de mayo, es uno de los puntos claves del ciclo. “Busca que sea la sociedad misma quien diseñe la forma de participar. Es decir, que la Participación sea incluyente y vinculante desde el diseño mismo”, sostuvieron.