ELN se atribuyó atentado terrorista en Tibú que dejó dos policías y una civil muertos: “Seguimos comprometidos con la búsqueda de una solución política al conflicto”

Tres muertos y varios heridos dejó el atentado terrorista en Tibú, Norte de Santander, del que en las últimas horas se conocieron los responsables: fue la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) la que, mediante un comunicado, aceptaron su autoría en ese hecho delictivo por el que las autoridades ofrecían hasta 250 millones de pesos como recompensa.

Las víctimas mortales fueron dos policías y una mujer que perdieron la vida luego de que el Frente de Guerra Nororiental (FGNO) del ELN atacó una caravana de la Fuerza Pública que se movilizaba por vías nortesantandereanas, específicamente en el sector conocido como La Uno, cuando un bus de transporte público y una patrulla de la Policía pasaban por la zona.

“La más reciente acción tiene como escenario la cabecera municipal de Tibú, Norte de Santander donde el pasado 24 de mayo unidades pertenecientes al Frente de Guerra activan minado al avance al paso de una patrulla de la Policía Nacional”, informaron los guerrilleros en el comunicado.

Aseguraron, además, que sus actuaciones bélicas correspondieron a los enfrentamientos que vienen desarrollando contra las disidencias de las Farc y lo que llamaron “estructuras narco-paramilitares” en las que, lamentablemente, perecieron uniformados y civiles.

Los guerrilleros, con los que el Gobierno del presidente Gustavo Petro están negociando la paz en estos momentos, intentaron justificar su ataque terrorista con el argumento de que era una respuesta a las “intimidaciones” por parte de la Policía y del Ejército, y aseguraron que se vieron obligados a esas actuaciones.

Aunque no se mostraron arrepentidos por el fallecimiento del subintendente Ángelo Raúl Martínez Arévalo y el patrullero Andrés Idarraga Orozco, sí dijeron que lamentaban la muerte de Katherine Castillo Cárdenas, que fue la mujer que falleció en la explosión. Incluso, se atrevieron a enviarles condolencias a los familiares de la víctima y justificaron diciendo que “no tenían como propósito producir estas afecciones”.

Antes de finalizar el comunicado, con sus lemas más utilizados como “¡Colombia para los trabajadores!” y “¡Ni un paso atrás... Liberación o Muerte!”, los subversivos de ese grupo armado reiteraron que quieren alcanzar la paz, que se negocia actualmente con el Gobierno Petro en Cuba, siendo reconocidos como agentes políticos.

Cuando se conoció del ataque en Tibú, el ministro de Defensa, Iván Velásquez, desmintió que le haya ordenado a las tropas militares tener “brazos caídos” frente al ELN. Ahora, cuando la única guerrilla activa en Colombia reconoció el haber detonado los explosivos que apagaron tres vidas inocentes, el Alto Comisionado para la Paz, Danilo Rueda, también se pronunció.

En su declaratoria, el funcionario destacó, de alguna forma, que los delincuentes aceptaran ser los cerebros detrás de ese hecho que enluta a tres familias colombianas y, de nuevo, reiteró que el Gobierno de Petro rechaza ese tipo de atentados.

“Desde el comienzo hemos repudiado ese hecho. Que el Eln se lo atribuya, pues es un gesto de responsabilidad para aclarar la situación y ya habrá el momento y el escenario judicial para que estos hechos sean sancionados”, aseguró Rueda a la prensa, aunque dijo que el reconocimiento de ese atentado era “un avance” en lo que se viene negociando con esa estructura armada.

Además, reiteró que ese tipo de actuaciones obligan tanto al Estado colombiano como al ELN “pactar lo más pronto este cese del fuego y evitar que este tipo de situaciones se repitan”, aseveró.

Hay que mencionar que, entre los lesionados, también están el mayor Wilson Millán Triana; el intendente Edinson Niño Hernández; y los patrulleros Brando Lec Coronado Aaron, Germán Yahir Gómez Monsalve y Ezequiel Pérez Arciniegas, así como a la civil Elizabeth Rosales, con quien el ELN sí se excusó.