El 23 de mayo de 2023, la Comisión Séptima de la Cámara de Representantes aprobó la reforma a la salud en el primer debate. La discusión fue retomada tras la admisión de más del 80% de los artículos en la sesión llevada a cabo el jueves 18 de mayo.
Durante el debate, los congresistas eliminaron en bloque los artículos 36, 59, 70, 71, 72, 74, 79, 80 y 81, que estaban relacionados con la financiación de servicios de alta complejidad, los cambios en la administración de recursos en los departamentos y la administración del Adres en los fondos regionales.
Ante la decisión de la eliminación de los diferentes artículos, “Lo que comenzó como un proyecto de reforma ya no es. Esto ha cambiado sustancialmente”, para el ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo.
El alto funcionario mencionó en el debate que hubo cambios drásticos a comparación del presentado desde un comienzo por el Gobierno nacional y por la entonces ministra de salud, Carolina Corcho.
Ante la aprobación de la reforma de la salud, en el primer debate, alguno de los congresistas rechazaron la decisión de sus colegas, una de ellas fue la senadora María Fernanda Cabal, que aseguró que el presidente Gustavo Petro celebrara la destrucción de uno de los mejores sistemas de salud del mundo.
Además, la senadora militante del partido político, Centro Democrático, recordó que en 2005, en Venezuela aprobaron una ley de salud que marcó el inicio de la crisis política, económica y social del país vecino, que comenzó durante el régimen de Hugo Chávez y que continuó con su sucesor, Nicolás Maduro.
“Venezuela también pasó por una reforma a la salud que destruyó el sistema. Hoy no tienen hospitales, medicamentos ni atención digna”, escribió la congresista en su cuenta de Twitter.
Parlamentarios del Pacto Histórico celebraron la noticia, entre ellos el antropólogo Alberto Benavides, que remplazó a Gustavo Bolívar, aseguró que las reformas del Gobierno buscan mejorar la vida de los ciudadanos. También el congresista, Agmeth Escaf , quien dijo en un tuit que, “Seguiremos en plenaria de la Cámara de Representantes de Colombia defendiendo el cambio y un sistema de salud que proteja a quienes han estado marginados”.
Gremios de la salud, preocupados ante el primer debate la reforma aprobado
La Asociación Colombiana de Empresas de Medicina Integral (Acemi) advirtió que un importante número de empleados podrían perder sus trabajos si el articulado es aprobado.
De acuerdo con Acemi, se perderían más de 100.000 empleos formales con el “fin” de las EPS, también conocidas como Empresas Promotoras de Salud, ya que la aprobación del artículo 4 “deformarían” su rol dentro del sistema de salud.
“Se destruye el concepto de seguridad social y se reemplaza por una recolección de recursos. Se eliminan conceptos básicos del aseguramiento como el plan de beneficios. También la figura de asegurador (las EPS) y nociones financieras básicas como reservas técnicas, inversiones y patrimonio técnico”, dijo el gremio en un comunicado de prensa.
Además, señaló que es preocupante el tiempo de dos años que les tomaría a las autoridades la construcción de los Centros de Atención Primaria, también conocido como Caps y, la consolidación de toda la información médica de los más de 50 colombianos.
“El texto aprobado se plantea metas que resultan de difícil cumplimiento: en dos años, al menos 2.000 Caps tendrán que estar construidos, habilitados y en operación. Para entonces, además, esos centros deberán administrar la información y el registro de todas las personas que viven en el territorio nacional, no solo colombianos sino también migrantes. Todo eso pese a que hoy no existen recursos, capacidades o sistemas de información que hagan viable el modelo”, añade el documento.