La jornada de Copa Sudamericana para Indepediente Santa Fe fue una pesadilla total. El conjunto Cardenal visitó suelo argentino para enfrentar a Gimnasia y Esgrima La Plata con la obligación de llevarse la victoria para evitar hundirse más en el certamen internacional, no obstante, terminaron perdiendo por doble partida.
El conjunto bogotano había logrado mantener el cero en su arco durante gran parte del compromiso, incluso después del altercado que se dio al final del primer tiempo y que terminó en varias expulsiones, pero justo en los últimos minutos del partido un gol agónico de Franco Ramón Torres, les entregó los tres puntos a los argentinos.
Como si fuera poco para los hinchas del León, tendrán que aguantarse al menos la siguiente fecha de la Sudamericana sin su delantero principal Wilson Morelo y su director técnico Gerardo Bedoya, quienes vieron la tarjeta roja sobre los 43 minutos de juego tras un altercado entre jugadores y miembros del cuerpo técnico.
La expulsión de Bedoya es tema de conversación, no solo por el hecho de que incluso estando retirado como futbolista sigue acumulando rojas como goles (lleva 49 en toda su carrera), sino también por una acción luego de retirarse del campo que podría representarle una millonaria sanción por parte de la CONMEBOL.
Justo después de haber recibido la orden del árbitro de salir del césped, la trasmisión de ESPN logró captar al estratega en uno de los palcos del Estadio del Bosque hablando por celular, posteriormente enfocó a Mauricio Rodríguez, preparador físico del equipo, quien estaría recibiendo órdenes del timonel interino.
Dentro del reglamento de la Conmebol el uso de objetos de comunicación entre los miembros del cuerpo técnico está permitido siempre y cuando estos no hayan sido expulsados del encuentro. Si alguno de estos ve la tarjeta roja, está prohibido el uso de los mismos y podría ser sancionado por el organismo rector del fútbol sudamericano:
“La utilización de equipamientos de comunicación por los miembros de la comisión técnica está permitida de acuerdo con lo establecido en las Reglas del Juego. No obstante, los jugadores y/o miembros del cuerpo técnico suspendidos para un partido no podrán de cualquier forma comunicarse con su equipo, directa o indirectamente, estando o no en el estadio donde se desarrollará el partido. En el caso de incumplimiento a la presente disposición, el club, el oficial y/o jugador estarán sujetos a apertura de expedientes de la Unidad Disciplinaria con las respectivas multas y sanciones previstas en el Código disciplinario”.
Siendo así la situación, si la Unidad Disciplinaria de la Conmebol decide hacer efectiva la sanción contra Bedoya, entonces Santa Fe deberá abrir la caja para saldar una multa económica bastante alta para este tipo de acciones.
Según las regulaciones de seguridad y competición establecidas por la institución previamente mencionadas la multa que tendría que pagar el Cardenal sería de un total de USD $8.000 por infringir el protocolo del partido, lo que vendrían siendo aproximadamente $35.800.000 millones de pesos colombianos.
Los ataques contra Rodallega, el punto más triste de la noche
La derrota y la expulsión de Bedoya quedaron a un lado cuando, luego del final del partido, el delantero Hugo Rodallega afirmó que fue víctima de gritos e insultos racistas por parte de la hinchada de Gimnasia y Esgrima.
Según el artillero los aficionados argentinos le habrían llamado “negro” y “mono”, palabras que dejaron bastante sentido al jugador que no esperaba ese trato y más en el espectro internacional:
“No mejoramos como humanidad nosotros. Es un desastre lo que pasa en el mundo entero y una tristeza que vengamos acá, no estoy diciendo que perdimos porque la gente ofende, pero el tema del racismo ya cansa. Me llamaron mono y negro, es una falta de respeto y tristeza”