El director de la Cámara Colombiana de la Construcción, Camacol, de Bogotá y Cundinamarca, Edwin Chiviró, explicó en Citytv cómo se ha comportado el mercado de vivienda durante los primeros cuatro meses del año.
Y si bien el panorama no es el mejor, pues la disminución de compra se ha evidenciado, son más de 1,1 millones de ciudadanos que a diario continúan con la búsqueda para adquirir una vivienda propia.
Edwin Chiriví dijo que a pesar de todo, hay un buen porcentaje de intención de compra, lo cual es una luz de esperanza para lo que resta de 2023.
Camacol dio a conocer que en las localidades de Suba, Kennedy y Fontibón se centra el mayor número de ofertas para aquellos que buscaban comprar una vivienda. Es decir, que las personas que están en búsqueda de su casa o departamento propio, pueden localizarlas en las localidades mencionadas.
“La buena noticia viene del lado de la demanda. Al analizar el número de los hogares que están buscando vivienda y los que efectivamente han mostrado intención de compra, los números son muy favorables y describen las oportunidades de inversión en la región”, explicó el gerente de Camacol Bogotá y Cundinamarca, Edwin Chiriví.
Cabe recordar que para 2023, el precio máximo de la Vivienda de Interés Social (VIS) es de 174 millones de pesos, lo que equivale a 150 salarios mínimos legales mensuales vigentes. Sin embargo, el director destacó que la vivienda de interés social prevalece en estos sectores de la ciudad, representando el 65% del total de viviendas disponibles para la compra.
La ciudad capitalina cuenta con una oferta que supera las 38 mil unidades de vivienda y más de 20 mil en los municipios de Cundinamarca con mayor actividad edificadora, según Camacol.
En Cundinamarca, los municipios de Cajicá, Chía y Soacha son los que lideran la oferta, y en total los municipios cuentan con 54% de su oferta en el segmento de interés social.
La disminución en las ventas de vivienda social en abril de 2023
La venta de vivienda social ha ido de caída en los primeros cuatro meses de 2023, así lo informó en su momento la Coordenada Urbana, el sistema de información georreferenciado de Camacol, que da cuenta de que la contracción en las ventas de vivienda nueva (VIS y No Vis) se mantuvo en abril con una caída de 62% frente al mismo mes de 2022.
En el caso específico de la vivienda de interés social (VIS), el informe reveló que durante los cuatro primeros meses del año las ventas totales cayeron 55%, con una contracción del 59% en la vivienda de interés social.
Además, en abril se comercializaron 186.416 viviendas nuevas, que representan una disminución de 30%; la contracción de la VIS en dicho período fue del 31% en términos anuales.
Aseguró el presidente de Camacol, Guillermo Herrera, que “todas las acciones, en una estrategia contracíclica, serán determinantes para reactivar el comportamiento del Producto Interno Bruto (PIB) del sector constructor, especialmente el de edificaciones”.
Por otro lado, el Dane reveló la caída del PIB de este sector en el primer trimestre del año, del 3,1% respecto al mismo periodo de 2022, especialmente por el comportamiento de las obras civiles. Por su parte, el PIB de la construcción de edificaciones residenciales y no residenciales registró una variación positiva de 2,6% durante los primeros tres meses del año, muy inferior al crecimiento de 11,9% observado en igual lapso de 2022.
El presidente de Camacol afirmó que es muy importante reactivar la actividad edificadora, dado los riesgos sobre el empleo que se pueden tener al no revertir la actual tendencia. Las iniciaciones de nuevas obras de construcción de vivienda VIS en abril disminuyeron 39 %, frente al mismo mes de 2022, y volumen actividad que detuvo su proceso constructivo aumentó 30% anual en el primer trimestre del año.
“Estos resultados deben verse como una señal de alerta para poner en marcha todas las acciones de política sectorial y de vivienda que permitan el volumen de actividad que suspendió sus procesos constructivos”, sostuvo Herrera.