Curioso momento vivieron tres viajeros que pasaban por el Parque Nacional Natural Chingaza, ubicado en la cordillera oriental de Los Andes, al noreste de Bogotá. Pues, un pequeño oso de anteojos salió a su encuentro cuando se movilizaban en una camioneta Renault Duster. El animal, que ha reportado más de un avistamiento en el lugar, se acercó al vehículo para olerlo.
Los integrantes del grupo no dudaron en bajarse de la camioneta para ver más de cerca al oso que los visitaba. Gracias a que no hubo momentos de peligro, ni para el animal ni para los excursionistas, estos últimos aprovecharon para tomarse divertidas fotos con él. El encuentro no presentó ningún tipo de dificultad, y tanto los viajeros como el mamífero pudieron seguir sus caminos.
En algunas de las imágenes se le ve observando e identificando el automóvil en el que se transportaba el grupo de viajeros. En otras, se le ve caminando por el espacio natural en el que habita.
Las fotografías fueron publicadas por Luis Alberto Rodríguez Castillo, que figura en Twitter como @Dylupan. “Esto se encontró mi hermana este fin de semana en Chingaza”, comentó el internauta en la red social, acompañando el texto con las imágenes. El momento con el oso andino generó todo tipo de reacciones y se hizo tan viral, que la publicación ya cuenta con más de 600 “me gusta” y 116 “retuits”.
Parque Nacional Natural Chingaza
De acuerdo con el sitio oficial Parques Nacionales Naturales de Colombia, el Parque Nacional Natural Chingaza es un tesoro natural compuesto de todo tipo de ecosistemas, hidrografía, fauna, flora y comunidades. Su extensión abarca 11 municipios, de los cuales siete hacen parte de Cundinamarca: Fómeque, Choachí, La Calera, Guasca, Junín, Gachalá y Medina. Los otros cuatro municipios son del departamento del Meta: San Juanito, El Calvario, Restrepo y Cumaral.
Chingaza cuenta con humedales altoandinos y con páramos que se avistan en el lado suroccidental del lugar. Mientras tanto, en el costado oriental se encuentran ecosistemas de piedemonte llanero y quebradas con caudales del Orinoco.
El oso andino (Tremarctos ornatus) que se encontraron los tres viajeros hace parte de las 101 especies de mamíferos que se han registrado en el parque. Además de él, se destacan el venado de cola blanca, el venado colorado y el puma.
Con respecto a las aves, el parque cuenta con 531 especies, como el colibrí barbudito de páramo, la tingua bogotana, el cóndor de los Andes y el gallito de roca. Los reptiles tampoco se quedan atrás, pues hay 32 especies en el hábitat, que se unen a 42 especies de anfibios.
El oso andino
Según WWF, el oso de anteojos vive en bosques andinos de mil metros de altura. Es un oso cuya alimentación se basa, en su mayoría, en plantas y, por lo menos los machos, pueden llegar a pesar hasta 180 kilogramos. Incluso, llegan a medir dos metros de altura.
En Colombia, pueden existir alrededor de 8.000 osos andinos. De hecho, de acuerdo con el biólogo e investigador Héctor Restrepo, entrevistado por RCN, este animal solo se encuentra en cinco países de Los Andes. “El parque Chingaza es el lugar donde se cree que hay más osos de anteojos en el país. Solo hay 50″, aclaró Restrepo para el medio.
De acuerdo con WWF, el oso andino es una especie fundamental para la perdurabilidad de los bosques, porque gracias a su alimentación y a los largos caminos que pueden recorrer, diseminan semillas por el suelo.
Sin embargo, se encuentra en peligro de extinción; clasificado en la categoría “vulnerable”. Pues, se tiene el imaginario de que es una especie peligrosa; por eso, los campesinos suelen cazarlo, para evitar que dañen sus cultivos y que ataquen a otros animales. El WWF aclara en su portal que el oso andino es tímido y que no se ha registrado ningún ataque por parte de él a ningún ser humano.
Recomendaciones para avistamiento de osos andinos
De acuerdo con información del Área Metropolitana Valle de Aburrá, es importante que, al momento de tener un encuentro con un oso de anteojos, se evite por completo el contacto visual directo. También, se invita a mantener la calma y no acorralar o amenazar al animal.
Además, es de vital importancia desplazarse lentamente, evitar hacer sonidos fuertes y acercase. Luego, quienes hayan tenido contacto con el animal deberán informar a las autoridades su avistamiento.