Varados: alcalde de Cartagena y otras 40 personas tuvieron un incidente en las aguas del mar Caribe

El mandatario William Dau, funcionarios de la ONG IsraAID, miembros del gabinete distrital y algunos periodistas se dirigían a Isla Grande. En el camino, el motor de la embarcación falló

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"No fue un naufragio, ni
"No fue un naufragio, ni la embarcación quedó a la deriva", dice un comunicado de la Alcaldía de Cartagena. Cortesía: Colprensa - Sergio Acero.

En la mañana del viernes 19 de mayo, el alcalde de Cartagena y un grupo de personas se dirigían a Isla Grande, con el objetivo de inaugurar una planta desalinizadora de agua. Unos minutos después de haber zarpado, la embarcación en la que iban dejó de funcionar debido a una falla en el motor, lo cual los retuvo en aguas del mar Caribe.

En un video que circula por redes sociales y medios de comunicación, se puede observar a William Dau generando risas por el incidente que estaban viviendo.

“Bien, chévere, hace parte de la ‘cartageneidad’“, dijo el alcalde a un periodista de El Tiempo que se dirigía con todo el grupo para cubrir el evento en Isla Grande.

Debido a lo sucedido, la Alcaldía de Cartagena emitió un comunicado de prensa en el que narra y explica la situación que vivieron las personas que viajaban por el mar Caribe. El documento aclara que en el grupo no se encontraba el embajador de Israel, ni tampoco miembros del gabinete de ese estamento diplomático.

El incidente no tuvo mayores repercusiones y los viajeros pudieron zarpar nuevamente hacia su destino. Para ello, fue necesario que un proveedor hiciera llegar otra lancha y que, de esta manera, todos los integrantes del grupo pudieran llegar a la inauguración de la planta.

Inauguración de la planta desalinizadora

“¡Isla grande ya tiene agua potable!”, así celebró en Twitter la Alcaldía de Cartagena la inauguración de la primera planta de ósmosis inversa que se instaló en la comunidad de Orika, en Isla Grande, una de las 28 islas que componen el archipiélago Islas del Rosario.

De acuerdo con la entidad, gracias al trabajo mancomunado que llevaron a cabo con la ONG IsraAID, de Israel, el 19 de mayo fue posible entregar a la comunidad la planta desalinizadora de agua, que beneficiará a cerca de 1.300 personas en el territorio.

La planta fue inaugurada el
La planta fue inaugurada el viernes 19 de mayo. Podrá abastecer de agua potable a la comunidad del caserío Orika. Cortesía: Alcaldía de Cartagena.

La capacidad de la planta le permitirá producir hasta 2.000 litros de agua al día, lo que se traduce en 300 personas beneficiadas diariamente. De esta manera, la población podrá abastecerse de agua potable. Pues, el equipo cuenta con la tecnología de desalinización de agua Ez-Pure de Ez-pack, el cual permite una remoción de contaminantes, minerales y materiales biológicos de más del 90%.

Según declaraciones del alcalde, que fueron publicadas en la cuenta de Twitter de la entidad, la planta fue donada por el gobierno de Israel a través de su Agencia de Cooperación Internacional. “Necesitan acceso a tecnología fácil, ligera, pero muy efectiva para las comunidades. Y es así como llegamos con nuestro programa de agua, saneamiento e higiene, para abastecer a esta comunidad”, expresó una funcionaria de la ONG israelí.

“Para nosotros es un privilegio que nos hayan priorizado como comunidad para poder tener esta tecnología, que hoy por hoy es un beneficio directo a una necesidad básica sufrida, como es el agua”, comentó una de las beneficiarias.

De acuerdo con información suministrada por Carlos Alberto La Rota García, secretario general del Distrito, la planta inaugurada funciona con energía solar. Además, dijo que el objetivo es poder ampliarla en un futuro, de manera gradual. De esta manera, la calidad de vida de los habitantes de Isla grande tendrá un impacto positivo.

Recordemos que para 2021, el Juzgado Primero Laboral del circuito de Cartagena ordenó al Distrito, a la Gobernación de Bolívar y a Aguas de Cartagena, enviar agua potable a la comunidad de Orika, en Isla Grande. Pues, ese año, los habitantes del lugar solicitaron una solución a su situación de agua no apta para consumo humano, por medio de tutela.

El juzgado, en el fallo, pidió que el envío de agua se hiciera en un término no mayor a 30 días con el objetivo de garantizar a la comunidad los derechos fundamentales de acceso a agua y saneamiento básico.

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