Socios de Ultra Air se reunirán y podrían salvar a la aerolinea de la quiebra tras el cese de operaciones

Aún no se sabe qué sucederá con UltraAir, conocida por ser una de las compañías de transporte aéreo de bajo costo que operaba en el país. Tras afrontar una complicada situación económica en los últimos meses, los directivos de la empresa decidieron cesar operaciones en el territorio nacional el pasado miércoles 29 de marzo.

En medio de la incertidumbre de los usuarios de la popular aerolínea, en la mañana del jueves 18 de mayo se anunció que el próximo miércoles 24 de mayo de 2023 se realizará una asamblea extraordinaria entre sus accionistas.

La reunión, que inicialmente tendrá una duración de dos horas, tendrá como objetivo hablar acerca del futuro de la compañía luego de su cese de operaciones, situación que afectó a miles de viajeros a nivel nacional, quienes quedaron sin la posibilidad de llegar a sus destinos.

Según indica el orden del día que se propuso para la asamblea, se presentará un informe de la situación que acoge la empresa en sociedad, que para junio de 2022 arrastraba pasivos por $271.455 millones de pesos, según cifras de la Aerocivil.

De igual manera, los socios conocerán un reporte en el que se hará énfasis en el avance del proceso de solicitud de reorganización que se adelantó frente a la Superintendencia de Sociedades.

La Superintendencia emitió un comunicado a comienzos de mayo en el que precisaban que los términos establecidos en la ley se estaban corriendo para que la sociedad allegara la documentación que se requería por parte del juez del concurso para que finalmente se efectuara el trámite.

Aquel término tiene como fecha de vencimiento el próximo 24 de mayo de 2023, misma fecha en la que se llevará a cabo la reunión entre los accionistas de la compañía.

Otro de los puntos que se tratará en la asamblea es el “análisis de alternativas de la sociedad”, enunciado que ha llamado la atención de los socios debido a que este podría interpretarse como la “definición” de sí se liquidará o se salvará la empresa que lleva más de un mes inactiva.

Es un hecho que los miembros de la junta directiva renunciarán masivamente, tal como se plasma en otro de los puntos del día, y se escogerán sus reemplazantes, de quienes aún no hay pistas ni candidatos sobre la mesa que afronten la complicada situación.

El punto 10 del orden del día propuso la “cesión de las acciones serie M a la sociedad para tener solamente el 10% de las acciones en circulación”, siendo este uno de los atenuantes más particulares dentro del documento.

El movimiento, que también se denominó como la “decisión de asamblea para readquisición de las acciones por parte de la compañía a valor cero” buscaría la salida de un amplio número de accionistas de la empresa.

La situación generó polémica debido a que la estrategia se basaría en que un número reducido de socios concentrarán el 90% de la propiedad y de esta manera se facilite una posible transacción de venta en los próximos meses.

De igual forma, se espera que las ofertas que lleguen por la aerolínea superen a la ofrecida por el empresario colombo-boliviano Germán Efromovich, expropietario de Avianca, que ofreció la simbólica cifra de $1 dólar por la totalidad de la compañía el pasado 10 de abril.

La propuesta del empresario, si bien fue tomada como una burla en un comienzo, pudo ser el inicio de una fuerte puja de ofrecimientos que le podrían dar vuelo a la compañía posterior a la asamblea de la próxima semana.

La oferta de Efromovich no fue aceptada.