Tragedia en Medellín: niño indígena falleció bajo protección del Instituto de Bienestar familiar

Al parecer, el menor tenía signos de tuberculosis y presentaba lesiones en la cabeza, por lo que las autoridades iniciaron una investigación para esclarecer los hechos

Niño indígena fallece bajo protección de Bienestar familiar, al parecer tenía cuadros graves de tuberculosis y lesiones en la cabeza. Foto Colprensa.

El menor perteneciente a una comunidad indígena, tenía dos años y, se encontraba bajo la protección del Instituto de Bienestar Familiar, cuando murió en circunstancias que por el momento no han sido esclarecidas.

Según las autoridades, el fallecimiento del menor, identificado como Marco Gelver Stiven Vitucay, podría haberse registrado por el grave cuadro de tuberculosis que presentaba, sin embargo, analizan el dictamen médico, ya que se encontró que el menor presentaba un golpe en la cabeza.

La muerte del menor indígena se registró en las instalaciones del Hospital General de Medellín, a donde lo llevaron funcionarios de la Secretaría de Educación desde el pasado 6 de mayo para recibir atención médica, puesto que el niño presentaba síntomas de desaliento y vómito frecuente.

Según algunas versiones, un jaibaná (chamán o el portador de espíritus) lo atendió por un tiempo, con el fin de tratar al menor a través de sus rituales, sin embargo, la enfermedad fue más fuerte y tomaron la decisión de trasladarlo a un centro médico con el fin de que recibiera atención con medicina convencional.

El dictamen clínico explicaría las circunstancias de la muerte del menor, sin embargo, el médico forense del centro asistencial determinó no certificar la muerte natural, según parece, se resolvió así porque el menor contaba con medida de protección del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (Icbf).

Ante el hecho, los agentes del CTI de la Fiscalía determinaron que el cuerpo sin vida del menor ya tenía una lesión en la cabeza, por lo que finalmente no se lograron esclarecer las causas puntuales de la muerte del menor, por lo que será Medicina Legal el ente encargado de determinar las razones del descenso del niño indígena.

Es importante destacar que el niño formaba parte de la comunidad indígena de Alto Mondó, en Tadó, Chocó, y pertenecía a la etnia emberá-katío. Sin embargo, debido a que el Icbf inició un proceso de restablecimiento de derechos, el menor fue trasladado a Manizales, capital del departamento de Caldas, donde se le asignó un hogar sustituto como medida provisional.

Se resalta que este proceso es presionado por la administración, ya que debe tener en cuenta que se debía garantizar el bienestar y el desarrollo adecuado del niño, en vista de su pertenencia étnica.

Tras residir en los inquilinatos de Niquitao por un tiempo, el niño y su familia decidieron mudarse al albergue instalado en las inmediaciones de la Institución Educativa Héctor Abad Gómez, en el centro de Medellín. Fue precisamente en este lugar donde empezó a manifestar síntomas que, días después, llevaron a solicitar asistencia médica.

Luego de ser evaluado en el centro asistencial, se descubrió que además de padecer tuberculosis, también tenía meningitis y problemas nutrición que necesitaban tratamiento inmediato. A pesar de los esfuerzos médicos, lamentablemente, el menor nunca logró superar su condición y permaneció en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).

Después del trágico fallecimiento y con el objetivo de determinar las causas exactas del golpe que presentaba su cuerpo, las autoridades han iniciado un proceso legal contra los padres. Dada la naturaleza de las circunstancias en las que ocurrió el deceso, se ha considerado necesario esclarecer los hechos y proceder legalmente conforme a lo establecido por las leyes.

Finalmente, se espera que se realice una investigación profunda para determinar si existió algún tipo de negligencia o conducta inapropiada por parte de los padres o del Icbf, de ser el caso, las autoridades tomarán las medidas pertinentes en aras de hacer justicia.