Desde el Gobierno nacional se estaría promoviendo el nombramiento de una ficha de Gustavo Petro en la Presidencia ejecutiva de la Cámara de Comercio de Bogotá: el polémico excontralor de la ciudad y exmagistrado del Consejo Superior de la Judicatura Ovidio Claros.
Claros es un excongresista de origen liberal, que tuvo que abandonar su curul en la Cámara de Representantes en 2004 por una demanda de pérdida de investidura (aunque la recuperó en 2006, a un mes de que se terminara su periodo). Luego intentó volver a la política, pero no le alcanzaron los votos para llegar al Senado, ni tampoco para ser elegido como contralor General en 2018.
Ha sido cuestionado por escándalos como el llamado ‘carrusel de pensiones’ en la Judicatura y varias tutelas de ese tribunal que tuvieron que ser rectificadas por la Corte Constitucional. De hecho, también apareció en una compulsa de copias de la Fiscalía General a la Corte Suprema cuando era presidente de la Judicatura.
Inclusive, se lo recuerda por enfrentar una demanda de su exesposa por supuestamente no cumplir con la cuota de alimentación de sus hijos. Además, se lo cuestiona por hechos ocurridos en su paso por la gerencia del Instituto de Seguros Sociales (ISS).
Pero a pesar de las polémicas alrededor de Claros, el motivo por el que estaría siendo promovido para la presidencia de la Cámara de Comercio de Bogotá por el Gobierno nacional es porque podría ser fundamental para sumar apoyos en el Congreso para las reformas pretendidas por Gustavo Petro.
A esto se le suma que el mandatario nacional le debería un “agradecimiento” a Claros, ya que como magistrado impidió que se tumbaran las 300 tutelas que buscaban mantenerlo en la Alcaldía de Bogotá, ante la decisión que había tomado la Procuraduría de destituirlo.
En ese momento, los magistrados del Consejo Superior de la Judicatura debían definir si el entonces procurador Alejandro Ordóñez era competente para destituir al alcalde. La mayoría iba a votar en contra de admitir las tutelas, pero Claros solicitó revisar unos memoriales que pedían un estudio más de fondo.
La esposa de Claros es la representante a la Cámara Olga Lucía Velásquez, que ya estuvo en la cámara baja por el Partido Liberal y volvió en 2022 bajo el aval de la Alianza Verde. Además, fue la fórmula que tuvo la senadora Angélica Lozano, esposa de Claudia López. De hecho, Lozano fue quien llevó a Velásquez a esa colectividad, algo que no habría caído muy bien en sus miembros.
Actualmente, el presidente de la Cámara de Comercio de Bogotá es Nicolás Uribe, que lleva tres años y medio en ese cargo. De ser reemplazado por Claros, se daría un giro en la forma como el gremio de los empresarios ha elegido a su representante, por consenso y a través de varias juntas.
Si bien el Gobierno nacional tiene representación en la entidad, nunca se había promovido desde el Gobierno que llegue a la presidencia ejecutiva un aliado del presidente de turno.
La Junta Directiva de la Cámara de Comercio de Bogotá está integrada por 12 miembros, de los cuales cuatro representan al Gobierno nacional y ocho a los empresarios. Para la elección del presidente ejecutivo se necesita de una mayoría absoluta, es decir, ocho votos. Dicho esto, Claros aún no tendría el apoyo necesario para encabezar la entidad, pues solamente contaría con siete votos. Por eso, desde la Casa de Nariño se estaría buscando un voto más entre los empresarios.
500.000 empresas de Bogotá y Cundinamarca con registro mercantil pertenecen a la Cámara de Comercio de Bogotá, la mayoría pequeñas y medianas.