El pasado domingo 14 de mayo la celebración del día de la madre en Bogotá estuvo trazada por la tragedia debido al asesinato de Érika Aponte Lugo, de 26 años de edad, quien murió a manos de su expareja, identificado como Christian Camilo Rincón, de 31 años, y quien le disparó en el centro comercial Unicentro donde laboraba la víctima.
El feminicidio ha despertado gran indignación y dolor, especialmente en sus familiares que aún siguen sin entender por qué ocurrió el crimen sí Érika en constantes ocasiones había denunciado la situación que estaba viviendo con Rincón; incluso, fue revelado que el asesino había ido al centro comercial el día anterior, pero los amigos del trabajo de Érika la ayudaron a esconderse del agresor.
Es por tal razón que los familiares de la mujer asesinada han señalado negligencia por parte del centro comercial al ver la situación- la cual había explicado previamente Érika- y la falta de medidas para evitar la tragedia que cometió Rincón. Al respecto una tía de la víctima, que se identificó como Sandra, señaló en Caracol Radio:
“¿Cómo Christian pudo entrar tantas veces al centro comercial después de que ella tenía medida de protección? (...) Ella habló en el centro comercial y expuso el tema, llevó los papeles, la documentación (...) Él iba al centro comercial. Él estuvo allá de grosero, se llamó a la Policía, un agente fue, no lo requisó, le dijeron que se fuera y lo sacaron. Por eso ella fue a quejarse el jueves (11 de mayo) y le dieron medida de protección permanente”.
De igual forma Nazario Aponte, padre de Érika, comentó en la emisora radial que Rincón ya había evidenciado conductas violentas e, incluso, que lo había amenazado de muerte; Nazario reafirmó en el medio de comunicación que en el centro comercial tenían conocimiento de las amenazas y constantes intimidaciones del agresor.
“Yo le presté todo mi apoyo, le conseguí una habitación cerca a mi casa porque él llegaba a la mía a buscarla. Ella puso en alerta a las autoridades y le brindaron medida de protección. En el centro comercial también pasó el reporte y él ya había ido a amenazarla al trabajo en varias oportunidades, andaba armado y entraba como pedro por su casa a ese lugar. ¿Por qué la seguridad nunca hizo nada?”.
Qué pasará con el hijo de Érika y Rincón
Sigue la investigación de los hechos sucedidos en la tarde del domingo 14 de mayo en los que Christian Camilo Rincón, un hombre de 26 años, disparó y asesinó a Érika Aponte, su expareja sentimental por más de once años y con quien además tuvo un hijo que hoy tiene ocho años y que además quedó huérfano.
Después de lo sucedido con los padres del menor, se ha generado controversia alrededor de lo que podría suceder con el niño, que hoy vive con sus abuelos paternos en una pequeña vivienda en la localidad de Usme, en el sur de la capital colombiana, lugar en el cual también convivía con sus padres antes de su separación.
Según informó la alcaldesa mayor de Bogotá, Claudia López, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) decidió otorgarle la custodia del menor a los padres de Rincón, aludiendo a que son ellos las personas con quienes el niño mantiene un vínculo afectivo importante a su corta edad.
“El defensor del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, usando sus facultades y funciones, ha determinado dejar la custodia del niño en cabeza de sus abuelos paternos porque es con quienes residía y con quienes mantiene un vínculo estable”, manifestó la mandataria a través de un video que publicó a través de su cuenta de Twitter en la tarde de este lunes.
De igual manera, la alcaldesa aclaró que la determinación contó con el apoyo de la familia de la mujer asesinada: “La familia de Érika ha estado de acuerdo con esta decisión del defensor”.
Además de ello, López aseguró que desde su administración se mantendrán atentos a la situación del pequeño y brindarán todos los cuidados necesarios para afrontar la delicada situación.