Sigue la investigación de los hechos sucedidos en la tarde del domingo 14 de mayo en los que Christian Camilo Rincón, un hombre de 26 años, disparó y asesinó a Érika Aponte, su expareja sentimental por más de once años y con quien además tuvo un hijo que hoy tiene ocho años y que además quedó huérfano.
Después de lo sucedido con los padres del menor, se ha generado controversia alrededor de lo que podría suceder con el niño, que hoy vive con sus abuelos paternos en una pequeña vivienda en la localidad de Usme, en el sur de la capital colombiana, lugar en el cual también convivía con sus padres antes de su separación.
Según informó la alcaldesa mayor de Bogotá, Claudia López, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) decidió otorgarle la custodia del menor a los padres de Rincón, aludiendo a que son ellos las personas con quienes el niño mantiene un vínculo afectivo importante a su corta edad.
“El defensor del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, usando sus facultades y funciones, ha determinado dejar la custodia del niño en cabeza de sus abuelos paternos porque es con quienes residía y con quienes mantiene un vínculo estable”, manifestó la mandataria a través de un video que publicó a través de su cuenta de Twitter en la tarde de este lunes.
De igual manera, la alcaldesa aclaró que la determinación contó con el apoyo de la familia de la mujer asesinada: “La familia de Érika ha estado de acuerdo con esta decisión del defensor”.
Además de ello, López aseguró que desde su administración se mantendrán atentos a la situación del pequeño y brindarán todos los cuidados necesarios para afrontar la delicada situación.
“Nosotros seguiremos activos y pendientes para ofrecerle a la familia que tiene la custodia todos los servicios necesarios para superar este momento doloroso”, concluyó.
El defensor del ICBF visitó el domicilio donde se encuentra el menor en la mañana de este lunes, pocas horas después de que se presentaran los trágicos hechos en medio de la celebración del Día de la Madre.
Con relación a la custodia del niño, una de las tías de la fallecida mujer mostró su apoyo a la decisión que se tomó desde las directrices del Bienestar Familiar, según contó en declaraciones entregadas a Caracol Radio.
“Él ha vivido toda la vida con ellos, los abuelos paternos han estado muy pendientes y para ellos Érika era como una hija más. Nosotros con los abuelos no tenemos ningún pleito y debemos pensar en el niño y en su bienestar”, afirmó la mujer.
La tía de Aponte hizo énfasis en la buena relación que mantenía la víctima y su familia con los padres de su agresor, siendo este uno de los puntos claves para que sean ellos quienes conserven la custodia del pequeño.
“La relación con los papás de Christian es muy buena y es fundamental para el niño. De hecho, Érika me dijo hace poco que quería dejarles la custodia a ellos”.
“Nosotros cada vez que podemos lo vemos (al pequeño) compartimos cumpleaños y en ocasiones ellos vienen y nos visitan. La relación es muy buena, el problema siempre fue Christian. Sus papas son unos grandes señores con unos valores muy grandes, ojalá uno pudiera entender esta situación”, concluyó.