Junior Roldán, cabecilla de la banda criminal ‘Los Águilas’, fue declarado muerto por el Gobierno ecuatoriano en la tarde del lunes 8 de mayo, luego de que las autoridades colombianas hallaran sus restos en la vereda El Mango, al occidente del departamento de Antioquia.
El anuncio fue realizado por el ministro del Interior ecuatoriano, Juan Zapata, luego de que la Fiscalía colombiana identificara el cadáver de alias Junior, con ayuda de las fichas dactilares enviadas desde Quito.
En su declaración de prensa indicó: “Se reportó una persona fallecida que sería de origen ecuatoriano y por información de fuentes de inteligencia se presumía que podía tratarse de alias Junior”, según referencia agencia EFE.
Mientras, el comandante de la Policía ecuatoriana, Fausto Salinas, manifestó que “hasta el momento, se establece que no se trataría de una acción entre grupos delincuenciales rivales”. Aunque, también “se verifica el alcance del atentado para tener información del causante del hecho delictivo”.
Alias Junior era “uno de los blancos de alto valor e interés para el Estado” ecuatoriano, por sus nexos con ‘Los Choneros’, banda con la que intentaban hacerse al control de las prisiones, por encima de otras organizaciones criminales. Lo que desde el 2020 habría generado una oleada de asesinatos dentro de las cárceles que, al sol de hoy, suman 450 víctimas.
El cabecilla de ‘Los Águilas’, sin embargo, fue dejado en libertad el 14 de febrero del 2023, luego de que un juez le diera el beneficio de ‘pre-libertad’. Semanas después perdería ese beneficio, pero se escapó y fue declarado prófugo de la justicia, por dejar de utilizar el grillete electrónico con el que las autoridades lograban rastrearlo.
Ciudadano cubano se hacía pasar por miembro de la Fuerza Pública para vender estupefacientes en Bogotá
La Policía Metropolitana de Bogotá y la Fiscalía General de la Nación lograron dar con la captura de un ciudadano de nacionalidad cubana que en su vivienda, ubicada en la localidad de Bosa, almacenaba un impresionante arsenal criminal.
El hombre –de identidad desconocida– pertenecía a una peligrosa banda dedicada al microtráfico, conocida como ‘Los Leones’, que opera al sur de la ciudad.
Armamento, estupefacientes y prendas de uso exclusivo de la Fuerza Pública –como uniformes de la Policía y uniformes del Ejército– fueron incautados por las autoridades, en medio de un operativo realizado durante el puente festivo del Día del trabajador.
Así lo dio a conocer en medio de una entrevista concedida para el matutino Arriba Bogotá, el director de la Fiscalía, seccional Cundinamarca, Carlos Manuel Silva: “Se logró la captura gracias a un trabajo articulado con nuestra Policía Nacional, con el comando metropolitano de Soacha”, de quien, además, utilizaba una cédula colombiana falsa para identificarse.
Sin embargo, “gracias a las labores investigativas adelantadas se permitió establecer que estaba dedicado a una organización delincuencial que comercializa sustancias estupefacientes en el sur de Bogotá y, muy especialmente, en el municipio de Soacha”.
Lo que aún se encuentran investigando es si acaso tenía elementos para la fabricación de detonantes; ya que, de igual manera “se incautaron dos artefactos explosivos improvisados y se encontraron dos estopines, que son utilizados para generar zozobra y para algunos actos menores de terrorismo”.
Si estaba o no de manera ilegal en el país es incierto, “presentó una cédula de nacionalidad cubana y un pasaporte, pero no presentó documentación que nos permita acreditar que esta de manera legal en nuestro país”.
Sospechan que su modus operandi consistía en utilizar, los elementos incautados, para hacerse con el control del microtráfico en Soacha. Y es que, como llegó a advertir el director de la Fiscalía Cundinamarca, el coronel Fernández insiste en que fueron encontradas una “gran cantidad de prendas de uso restrictivo de las Fuerzas Militares, como uniformas camuflados, insignias y distintivos, que nos hace prever que, posiblemente, comercializaba estas prendas o, también, eran utilizadas para hacer falsos controles. Falos puestos de control, con el fin de cometer, también, extorsiones y amenazas”.