El exdirector de la Policía Nacional y también exvicepresidente de Colombia, el general (r) Óscar naranjo, se convertiría en el nuevo director de la Universidad Internacional de La Rioja (Unir), una institución de educación superior española que opera bajo la modalidad virtual.
La noticia fue confirmada por el periodista de la W Radio, Julio Sánchez Cristo, quién aseguró que el también exnegociador “plenipotenciario del gobierno del expresidente Juan Manuel Santos en el proceso de paz con las Farc”, se convertirá en el director de La Rioja.
Es de recordar que la Unir es reconocida por ser una institución privada que oferta programas de pregrado y posgrado de manera virtual. Los jóvenes que se gradúen de La Rioja salen con títulos de oficialidad de la Agencia de Evaluación de la Calidad y Acreditación (ANECA), con validez dentro de España y el Espacio Europeo de Educación Superior (EEES).
“Además, tienen el reconocimiento de prestigiosas instituciones internacionales, que certifican su calidad. Nuestra metodología está avalada a nivel mundial por más de 62.000 graduados y más de 40.000 estudiantes en activo”, asegura la universidad a través de su página web oficial.
De acuerdo con la institución, son casi 8.000 estudiantes colombianos los que se han formado en la Universidad Internacional de La Rioja.
Por ahora, ni el general retirado Óscar Naranjo ni La Rioja se han pronunciado al respecto.
La última vez que el nombre del exdirector de la Policía Nacional había sonado tanto fue cuando, en febrero del 2020, su hija María Claudia Naranjo y Gabriel Santos, hijo del también ex vicepresidente de Colombia, Pacho Santos, contrajeron nupcias.
El matrimonio, que se celebró en una emotiva ceremonia religiosa en Barichara (Santander), se concretó luego de más de una década en la que el amor entre ambos parecieró ser imposible.
En diálogo con la revista Jet Set, la joven pareja contó que se conoció durante una clase de Historia Europea del siglo XX, mientras cursaban sus estudios en la Universidad de los Andes, en Bogotá. Desde allí, se convirtieron en buenos amigos, aunque “el corazón les decía otra cosa”, recordaron en su diálogo con la publicación bogotana.
Pese a los sentimientos que florecían, dejaron su amor entre excusas: “No, porque tengo novio”, “No, porque me acabo de cuadrar con Fulana”, “No, porque estoy entusada”, hasta que María Claudia se casó y tomaron caminos separados, contaron a Jet Set.
“Fue horrible. No hay peor sensación que amar tanto y no poder tener a esa persona, sobre todo ya con la certeza de que se casó y que no hay oportunidad de nada. Pasé por todo el proceso de la tusa, desde la tristeza profunda hasta la aceptación. Lo interioricé, le deseé felicidad y le puse punto final”, rememoró Gabriel en su diálogo con el citado medio.
Aunque en el momento pareció que la historia de amor llegó a su fin, María Claudia, quien se había mudado a Miami, en Estados Unidos, para iniciar su vida con su esposo, sorpresivamente se divorció y volvió a Colombia para recuperarse de la pérdida junto a su familia.
Fue así como, según contaron ambos a Jet Set, se reencontraron en una reunión de amigos y desde ahí cimentaron su relación que sabían causaría conmoción debido a las creencias y caminos políticos de sus padres.
“Nuestra relación no era fácil de digerir para las familias, para la gente, ni para nosotros mismos. Si hubiéramos escuchado las voces que decían que éramos como Romeo y Julieta, hoy no estaríamos juntos”, subrayó María Claudia al citado medio.
Pese a que fueron tiempos duros, Gabriel le propuso matrimonio a María Claudia en el Nezu Museum de Tokio, Japón, durante un viaje familiar. En 2020, sellaron su amor en Barichara.