Sobre la tarde del martes 2 de mayo, un juzgado de ejecución de penas le revocó la medida de prisión domiciliaria a Jorge Luis Alfonso López, alias el Gatico e hijo de Enilce López. En cambio, fue enviado a un centro carcelario para que continúe cumpliendo con su condena.
Una vez se conoció la decisión, el Inpec activó los protocolos para el traslado del sentenciado por homicidio; sin embargo, al llegar a la casa de López se percataron de que no estaba allí, pues tuvo que dirigirse a una unidad de urgencias debido a problemas de salud.
Así las cosas, permanecerá en ese centro médico hasta que se entregue un parte oficial; con base en este, se determinará la hora de traslado del hijo de la empresaria del chance condenada por parapolítica a la cárcel El Bosque, de Barranquilla.
Alias El gatico había sido designado por la oficina del alto comisionado para la Paz como gestor de paz en el Gobierno del presidente Gustavo Petro. Dicho anuncio generó polémica, al punto de que la entidad salió a aclarar que en ningún momento pidieron la liberación de Alfonso López; incluso, el juez Orlando José Petro, investigado justamente por otorgarle la libertad al homicida, le revocó esa medida e interpuso en su contra la detención domiciliaria.
Por esa medida, la Comisión Nacional de Disciplina Judicial suspendió al juez por tres meses. “(...) Se cumple con la condición para suspenderlo provisionalmente, pues las conductas que se investigan fueron cometidas a través de providencias dictadas posiblemente contrarias a la ley, mediante las cuales se otorgaron, aparentemente, de forma indebida, beneficios judiciales al condenado (residencia por cárcel y suspensión temporal de la aplicación de la pena con libertad”, mencionó la instancia conocida el miércoles 19 de abril.
Jorge Luis Alfonso López fue condenado en 2014 a 29 años de prisión por estar relacionado con el asesinato del periodista Rafael Enrique Prins, perpetrado el 19 de febrero de 2005, ya que había cuestionado a la familia Alfonso López tras la incursión paramilitar en el municipio Magangué, Bolívar.
El comunicador, a través del periódico local Apocalipsis denunció una serie de irregularidades presentadas en el Fondo Municipal de Tránsito y Transporte de esa población. También alcanzó a compartir las investigaciones correspondientes a anomalías cometidas desde el Plan de Atención Básica –PAB– dirigido por la Secretaría de Salud.
“Tengo miedo de que me maten porque cuando perdí mi trabajo yo hablé por el periódico cosas que no debí haber dicho, tengo miedo porque esa gente es ignorante”, escribió Prins en una nota hallada por la Fiscalía después de su asesinato. Sobre las 7:30 de la noche de ese 19 de febrero, llegaron hombres a bordo de una motocicleta. El parrillero se bajó y se acercó al periodista y le disparó en seis ocasiones. Prins Velásquez fue trasladado y atendido por urgencias en el Hospital San Juan de Dios de Magangué, pero a la mañana siguiente murió.
Al respecto, Nevis Consuelo Caballero, protegida actualmente por el Gobierno de Estados Unidos, indicó cómo en la finca El Gallinazo, en una reunión con los López y miembros paramilitares, se definió el homicidio del comunicador social.
“Ellos, los López, se hartaron de que el periodista siempre estuviera hablando mal de ellos. Hablaba de los malos manejos en la alcaldía casi todos los días”, fue indicado en un testimonio por la exparamilitar. Por su parte, el Gatico respondió en múltiples veces que no tuvo que ver nada con el asesinato del periodista. Por ello, la Jurisdicción Especial para la Paz –JEP– le cerró la puerta en 2022 bajo el argumento de que no entregó los suficientes aportes a la verdad sobre su versión del conflicto armado.