El proceso de elección y las opiniones del pasado de Germán Bahamón, nuevo gerente de la Federación Nacional de Cafeteros, no cayeron bien para el Gobierno nacional y el presidente Gustavo Petro. Ahora el líder gremial arranca su gestión tratando de mantener las relaciones con mensajes de cordialidad.
Desde su discurso de posesión, Bahamón trató de mermar los ánimos y aseguró que los cafeteros siempre han ido de la mano del Gobierno nacional como parte fundamental del desarrollo económico y social. Le dijo al presidente que tenía una “indeclinable decisión” para contribuir al Plan Nacional de Desarrollo del que le interesa mejorar las condiciones de vida para más de 540 mil familias cafeteras en cuanto a titulación de predios y construcción de vivienda.
Tan pronto como se produjo su elección, Petro publicó en su cuenta de Twitter varios mensajes en los que calificó a Bahamón como “rival”. Señaló que el proceso de elección no fue democrático para elegir a “quien se pudiera oponer al presidente”. Inicialmente hizo entender que privilegiaría el diálogo con los gerentes regionales, como una jugada para desconocer al nacional.
Pese a las críticas, Bahamón no se niega a zanjar las diferencias con el jefe de Estado y construir relaciones cordiales y armoniosas para su gestión. “Yo como ciudadano pude haber tenido algún tipo de diferencia, pero lo único a lo que me invita esta situación es a trabajar; a trabajar en búsqueda de construir puentes de comunicación armoniosa con el señor Presidente de la República”, afirmó a El Tiempo.
Señaló que el proceso de elección del gerente en el Congreso Nacional Cafetero fue democrático, acompañado por el Gobierno desde su diseño, y que él no tiene inhabilidades para ejercer el cargo. El nuevo gerente apeló a la voluntad de diálogo de Petro y solicitó una audiencia con el presidente para establecer comunicación. Espera que no se rompan las relaciones y asegurar que la Federación mantenga la administración del Fondo Nacional del Café.
“Yo no tengo ninguna diferencia en este momento con el señor presidente Gustavo Petro”, aseguró Bahamón al diario citado. “Yo creo que son puntos que debo tratar con él, y eso que haya ocurrido como ciudadano, incluso no como dirigente gremial ni político hace ocho años o diez años, pues no creo que tenga incidencia hoy, cuando lo importante es que trabajemos de la mano con él”, agregó.
Bahamón considera que la administración del contrato del Fondo Nacional del Café es una garantía de buen entendimiento entre la empresa privada y el Gobierno, según dijo a El País. Señaló que si bien hay una relación armónica actual del gremio con el Gobierno y las relaciones deben ser fluidas para velar por la prosperidad de 540.000 familias, “la única garantía de autonomía y sostenibilidad” para los cafeteros son sus negocios y marcas.
Por eso en su discurso, el nuevo gerente de la FNC propuso “lograr autonomía financiera a través del plan de expansión de Juan Valdez, del crecimiento de Buencafé, de la potencialización y rentabilización de la infraestructura de Almacafe, de la apertura al mundo del mejor parque temático de América y dando un paso más hacia la Universidad del Café, entre otras importantes apuestas empresariales de la Federación”.
La idea del presidente Petro para el gremio cafetero, según expresó desde su campaña, es “apoyar la rentabilidad de la producción del pequeño caficultor, expandirla, asociarlo y lograr que del precio internacional vaya más al productor directo. Propuse industrializar más al café y protegerlo de importaciones”.
La diferencia entre el mandatario y la FNC se dio porque el Congreso estaba citado para el día siguiente al anuncio de cambios en el gabinete ministerial, por lo que el ministro de Hacienda designado no alcanzaría a estar en funciones para participar del evento. Aunque solicitó aplazar la elección, los cafeteros eligieron su gerente que, para agregar, no era el de la predilección de Petro.