Pese a promesa, ministro de Transporte reconoció que peajes de megaobras subirían de precio: conozca cuáles son

El hecho de no seguir con el cobro de este servicio generaría un impacto económico para las empresas privadas, que lideran las iniciativas de infraestructura

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Guillermo Reyes. ministro de Transporte, y Luis Fernando Mejía, director de Fedesarrollo, en la presentación de un estudio de Fedesarrollo para la Cámara Colombiana de la Infraestructura (CCI) sobre del impacto del sector en la economía.
Guillermo Reyes. ministro de Transporte, y Luis Fernando Mejía, director de Fedesarrollo, en la presentación de un estudio de Fedesarrollo para la Cámara Colombiana de la Infraestructura (CCI) sobre del impacto del sector en la economía.

El ministro de Transporte, Guillermo Reyes, volvió a referirse a los peajes en Colombia, que tuvieron congelamiento de precios en enero. Lo hizo en la presentación de un estudio de Fedesarrollo para la Cámara Colombiana de la Infraestructura (CCI) sobre del impacto del sector en la economía.

Afirmó que para algunos megaproyectos del país esta decisión tendría que revertirse ya que hay unas vías 4G en Colombia, que son de iniciativas privadas (IP), y por ley no pueden recibir recursos públicos.

Explicó que en la ley se establece que el modelo se basa en el cobro de peajes y no en la recepción de recursos del Estado. Entonces, si no cobran peaje tendrían un impacto económico notable, ya que no recibirían ni un peso para construir las megaobras.

“Es muy probable que tengamos que incrementar los valores de esos peajes y lo haremos gradualmente para que el efecto sea lo menos impactante. ¿Por qué? Porque no hay otra opción”, afirmó el ministro, que recalcó que de tomas maneras se hará un análisis de las opciones que hay para que los conductores no tengan que pagar más.

De acuerdo con lo dicho por el ministro de Transporte, y según información de la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), los peajes que tendrían aumentos son los de los megaproyectos Antioquia – Bolívar, Cambao – Manizales, Girardot – Ibagué – Cajamarca, Malla Vial del Meta, Neiva – Espinal – Girardot, Vías del Nus en Antioquia, Chirajara – Fundadores y Tercer Carril Bogotá – Girardot.

Según Guillermo Reyes, como lo anunció el Gobierno nacional en enero, el resto de peajes seguirán en 2023 con las tarifas congeladas. Sobre estos, anotó que el Gobierno nacional solventará estos recursos con la adición presupuestal que se tramita en el Congreso de la República.

“En la adición van porque van los $800.000 millones para garantizar el no incremento de los peajes este año. Tenemos que pagarlo de donde sea. Estos son un componente fundamental para la construcción de este modelo que también introducirá el concepto de valorización, con el cual esperamos recaudar recursos importantes”, indicó Reyes.

El funcionario también puntualizó que la congelación de tarifas de peajes no es indefinida.

Alianzas público-privadas

Al dar detalles sobre el estudio “El aporte de las concesiones mediante APP en infraestructura de transporte al crecimiento y el bienestar de Colombia”, el director de Fedesarrollo, Luis Fernando Mejía, habló sobre las alianzas público-privadas (APP) y aseguró que las concesiones de este tipo son esquemas de ejecución que exigen estabilidad institucional y jurídica.

“Es fundamental profundizar el modelo APP en transporte como un instrumento crucial para el desarrollo nacional y la reducción de la pobreza en Colombia, dado su aporte macroeconómico y su capacidad para habilitar nuevos negocios. Para esto, es necesario mantener unas reglas claras que permitan asegurar la sostenibilidad del modelo”, explicó.

Anotó que a pesar del histórico rezago en materia de carreteras, Colombia experimenta un aumento significativo en la inversión en infraestructura en las últimas décadas. Según él, en el siglo XX la inversión promedio representó 1 punto del PIB (Producto Interno Bruto), cifra que se incrementó en los últimos años a cerca del 1,5% en lo corrido de este siglo, con un pico más alto registrado en 2012 (2,4%).

“Este impulso se debe en gran parte a la inversión privada, la cual se enfocó en un 90% en el modo de carretera. De hecho, el país se ha convertido en un referente internacional en la implementación de APP gracias a los avances significativos en materia normativa, de planificación y coordinación desde hace tres décadas”, resaltó.

No obstante, advirtió que en los últimos meses surgió gran incertidumbre en relación con las señales y anuncios del Gobierno que podrían afectar la estabilidad a mediano y largo plazo de este modelo. Uno de los ejemplos es la congelación de las tarifas de los peajes mediante el decreto 050 de enero de 2023, que podría generar una contingencia fiscal del orden de $13,8 billones en los próximos años, que es el tamaño estimado del déficit eventual de largo plazo a favor de los concesionarios.

El Gobierno nacional estableció en enero no aumentar el precio de los peajes del país.
El Gobierno nacional estableció en enero no aumentar el precio de los peajes del país.

Además, dijo que el estudio alerta sobre el efecto para las iniciativas privadas, proyectos que, como afirmó el ministro Guillermo Reyes, tienen como única fuente de ingreso de financiación el recaudo de las tarifas de peajes.

“En consecuencia, la congelación de todas las tarifas podría generar la terminación anticipada de los contratos, por no estar asegurada su viabilidad financiera. Por tanto, es un imperativo normalizar el valor que se cobrará a los usuarios de este tipo de infraestructura. Esta situación podría suceder en los 10 proyectos del programa 4G”, remarcó.

De igual forma, precisó que los retrasos en las inversiones en infraestructura que se originarían en la incertidumbre para las APP en transporte podrían reducir el crecimiento de la economía en órdenes del 0,5% del PIB, lo que afectaría de manera negativa la generación de empleo y superación pobreza.

Financiación y operación de inversiones

Sobre esto, el director del estudio, Juan Benavides, enfatizó que la naturaleza del modelo de concesiones permite la financiación y operación óptima de inversiones que no se hubieran podido hacer con los recursos públicos disponibles a lo largo de tres décadas.

“El desmantelamiento del modelo de APP reduciría la dotación de infraestructura de buena calidad dado que no hay espacio fiscal para sustituir APP por obras públicas en el corto plazo, aumentaría los costos generalizados de transporte, reduciría el ritmo de crecimiento del PIB, y empobrecería a la mayoría de la población”, concluyó.

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