En la madrugada del 21 de abril se desarrolló un operativo en Cartagena, su resultado fue la desarticulación de una organización criminal dedicada a la trata de personas con fin de explotación sexual. La operación conjunta fue liderada por la Dijin de la Policía, con la participación de la Alcaldía de Cartagena, Migración Colombia y la Fiscalía General de la Nación.
Los resultados fueron expuestos por la general Olga Patricia Sánchez Salazar, directora de la Dijín, la funcionaria explicó que tras cuatro meses de investigaciones se dio el golpe a la organización, en la que participaban hasta taxistas, que llevaban a extranjeros hasta el lugar donde se explotaba sexualmente de las personas retenidas.
El balance es de al menos 20 capturas, a quienes se le imputará los delitos de Inducción a la prostitución, constreñimiento, concierto para delinquir, tráfico de estupefacientes, falsedad en documento público, trata de personas y concierto para delinquir. Una vez detenidos, los investigados fueron dirigidos a un juzgado de la ciudad, en donde se realizaron las audiencias de legalización de las capturas.
Una de las imputadas es una reconocida influenciadora de la ciudad, cuya identidad no se ha confirmado por parte de las autoridades. Al parecer esta mujer se encargaba de captar mujeres en Barranquilla, que luego eran explotadas.
La general Sánchez detalló el funcionamiento de la organización criminal, el primer acercamiento a los clientes (en su mayoría extranjeros) era hecho por los taxistas, que ofrecían catálogos de las víctimas, en su mayoría originarias de Barranquilla.
Luego de que los clientes aceptaban los servicios, eran trasladados hasta el local, que se ubicaba en cercanía de la Torre del Reloj, en pleno casco histórico de la ciudad amurallada. Según explicó la general, las víctimas recibían el 40% y la organización tomaba el restante del pago.
“Todos tenían una participación, desde la llegada de los extranjeros, hasta quienes captaban a las mujeres y las confinaban en lugares que más bien parecían laberintos, donde las mantenían en condiciones infrahumanas”, señaló Sánchez Salazar para El Universal de Cartagena.
La Policía pudo establecer que la organización también ofrecía los servicios sexuales en apartamentos del centro histórico de la ciudad, hasta donde eran conducidas las mujeres. Además de ofrecer estupefacientes, escopolaminar a algunos clientes (para robarlos) y ejercer control territorial en el centro histórico.
En total, las autoridades lograron rescatas a ocho víctimas, todas menores de 25 años, también se detalló que dos mujeres eran trans. Como se mencionó, previamente, la mayoría de las víctimas provenía de Barranquilla, pero otras eran migrantes, a estas se les entregó documentos falsos, facilitados por la banda criminal.
La organización también ejercía la Explotación Sexual Comercial De Niñas, Niños y Adolescentes (Escnna), pues algunas de las víctimas eran menores de edad. Al momento de su rescate se estableció que las mujeres estaban retenidas en el local. Se trata del segundo operativo de estas características desarrollado en lo corrido del año.
El portal www.esoescuento.com una iniciativa conjunta del Ministerio del Interior y organizaciones sociales en contra de la trata de personas, explican que algunos de los aspectos que se deben considerar para evitar caer en redes de explotación sexual son: estar alerta a ofertas de trabajo como modelo, actriz, cineasta, impulsadora y hasta empresaria; dudar de salarios que superan cualquier expectativa; el que hecho de que cubran trámites de visa y pasaporte inmediatos; ofrecimiento de facilidades de pago para tiquetes y hospedaje, incluso descontándolo del primer salario; finalmente el encontrarte con la pareja que conociste en internet.
En tanto, en el caso de los captadores, estos pueden ser mujeres u hombres atractivos y carismáticos, con habilidad para ganar la confianza de las amistades y familia, usualmente contactas a sus víctimas por redes sociales, clasificados de prensa, casas de modelaje, agencias de viajes y salones de belleza. Aseguran que asumirán los gastos de viaje e indican como vestirte, qué decir y cómo comportarse ante las autoridades. Finalmente, suelen acompañar el viaje, con el fin de vigilar y garantizar la llegada de la víctima a su destino final.
Las personas que conozcan o sean víctimas de la trata y explotación sexual pueden comunicarse a la línea gratuita nacional 018000522020, o a cualquiera de los números de emergencia, donde deberán ser atendidas y orientadas hacia las rutas de atención.