Lo hizo la realidad. Tal y como lo prometió en la campaña con la que se ganó una curul en el Senado de la República, la congresista liberal Kelly Karina Espinosa radicó, recientemente, la ley que tituló “Cero Cacho”, con la que pretende que en Colombia no se cometan infidelidades.
Con este proyecto, que ya ha despertado reacciones en contra desde diferentes sectores, se busca modificar la Ley 115 de 1994 en el que, entre otras cosas, se exhorta al magisterio del país para que, desde las aulas, eduquen para prevenir ese tipo de hechos durante las relaciones amorosas.
“Para educar en valores, principios, innovación, emprendimiento y educación económica, financiera y aritmética de los negocios, y se otorga un papel preponderante a los docentes y padres de familia en el modelo educativo Cero Cacho”, reza el articulado del proyecto.
La senadora aseguró que su iniciativa, que le habría ayudado a ganar su puesto en el legislativo en el 2022, también pretende “reconstruir el tejido social” y lograr que, desde tempranas edades, los colombianos se forjen con valores como la lealtad y la fidelidad.
La ley Cero Cacho llegó al Congreso este miércoles y, desde entonces, no ha dejado de causar reacciones al respecto. Por ello, la congresista del Partido Liberal se pronunció en las últimas horas y aseguró que uno de los objetivos del proyecto es erradicar la infidelidad porque, desde su concepto, es una de las causantes de violencia en Colombia.
“La infidelidad, celos y desconfianza son las principales causas de la agresividad y la violencia que se presenta al interior de las familias colombianas para ambos sexos. Ahí está la semilla de la corrupción que carcome a Colombia”, señaló la congresista que, además, vinculó esas situaciones con graves problemas de salud mental y de, incluso, atentados contra la propia vida de quienes resultan cachoneados.
“La infidelidad está generando violencia, depresión, suicidios y todos los días ocurre esto, entonces no podemos cerrar la mirada; es una labor de todos”, expresó Espinosa durante una entrevista con la emisora BluRadio.
El proyecto, además, modificaría sustancialmente varios aspectos en los espacios educativos y administrativos con los que, según otras declaraciones que ha dado la autora, prevendrán “el consumo de drogas, bullying o acoso escolar, reclutamiento infantil, maltrato infantil, abuso infantil, suicidio en niños y el “cacho”, señala el texto.
Incluso, ella misma reconoció que, durante toda su vida, ha sido víctima de que la cachonen y por eso, no solo quiere evitarle eso a otras colombianas, sino que también pretende crear conciencia para que esas situaciones empiecen, según ella, a eliminarse de la sociedad de manera gradual.
“Toda la vida he estado rodeada de hombres infieles y esta cultura de la moda del cacho, que se volvió normal en nuestra sociedad, es lo que queremos combatir y prevenir porque está haciendo mucho daño”, le dijo la senadora a BluRadio, en donde aseguró que su papá y mamá se divorciaron por ese mismo tema, lo que le generó tristeza y depresión.
¿Y cómo hará la congresista del Liberalismo para alcanzar esa iniciativa? En el proyecto, que fue criticado por el mismo presidente del Congreso, Roy Barreras, se contempla que se intentarán reducir las conductas “nocivas, penosas, inmorales, perjudiciales, incorrectas, crueles, que una persona comete hacia otra”, determinó Espinoza.
Esas situaciones, según describió la legisladora, permiten que se amenace lo que ella considera como “institución familiar” que, de acuerdo con su proyecto, “puede afectar la salud física o mental, de una o varias personas y deteriora el tejido social”, agregó.
Por ahora, el proyecto deberá ser recibido por las comisiones en el Senado, mientras que varias figuras políticas lo cuestionan porque no sería acorde a lo que necesita el país.