El jefe del ente investigador no tuvo un buen augurio del gobierno de Gustavo Petro desde el momento en que asistió a la posesión presidencial. Señaló que ese día sintió temor y reconoce que aunque ha cambiado su impresión, aún guarda varias dudas acerca de las administración del presidente.
El presidente y el fiscal general Francisco Barbosa han mantenido una relación con varios choques por cuenta de diferencias en cuanto al planteamiento de políticas de paz y tratamiento criminal. Una postura que para algunos dibuja la división de poderes pero, para otros, la participación política.
Barbosa, en entrevista con el programa Los Informantes, reveló que su primera impresión del gobierno de Petro no fue nada agradable. Se confesó con el anécdota del 7 de agosto cuando asistió a la posesión del mandatario que sucedería a Iván Duque, quien lo consideraba su mejor amigo. Ese día, señala, ha sido uno de los más temerosos de su vida como encargado del Búnker.
“¿Sabe cuando me dio susto? Cuando fui a la posesión del presidente Petro, porque me tocó ir con chaleco antibalas y me metieron en medio de una multitud que gritaba, insultaba; ahí yo dije: esta cosa se complicó”, contó Barbosa al programa, al destacar ese día por encima de las amenazas y riesgos de su cargo.
La posesión de Petro es recordada porque, contrario a las que le antecedieron, el centro de Bogotá estaba atiborrado de personas que esperaban asistir a la Plaza de Bolívar para presenciar el acto de posesión y verlo en las pantallas dispuestas en los alrededores. El mandatario, caracterizado por su capacidad de convocatoria, esperaba celebrar con actos culturales y rodeado de público su llegada al poder.
En la Plaza de Bolívar se dispuso un espacio para los invitados especiales y la otra mitad para público, que solo se separaba por las vallas metálicas. Un hecho que impresionó incluso al presidente de Chile, Gabriel Boric, quien lo puso de presente en la reseña que hizo de Petro para los hombres más influyentes seleccionados por la revista Time.
Sin embargo, al fiscal general, con quien el mandatario había sostenido duras críticas durante su periodo como senador, no le gusto la organización del evento, e incluso pensó, cual adagio popular, que tal cual era el desayuno iba a ser el almuerzo.
“Nos pusieron en una zona expuestos. No estuvo bien, maluco. Dije: ¡uy! que no empiece así el gobierno porque va a ser maluco entonces. Pero bueno, ahí ha venido arreglándose; medio maluco, ha sido”, aseguró Barbosa.
El jefe del ente acusador es crítico de la administración de Petro que atribuye a falta de experiencia de varios de sus funcionarios. Barbosa considera que varios de ellos no han hecho el paso de la campaña política a ser gobierno, por lo que ha identificado en algunas situaciones que le ha tocado sobrellevar.
“Hay una manía, que encontré al inicio de este gobierno, y es que lo que hacen es que, paulatinamente, a través de Twitter y de trinos decir: “Acaba de ocurrir un atentado, un acto de corrupción en tal entidad, pasó tal cosa, pasó tal otra” y cuando uno los llama a la Fiscalía llegan acá y se sientan, ahí sí con los fiscales, y dicen “no mes consta”. Hay como una costumbre a querer llevar a la opinión pública a que diga que hay grandes escándalos de corrupción y cuando llegan acá no tienen ningún elemento”, señaló Barbosa a Los Informantes.
El fiscal general considera que varios funcionarios “no se han acostumbrado a hacer gobierno” y tras más de siete meses de posesión no se han acoplado a las funciones. “Creo que algunos están muy perdidos. Un presidente que no escuche a todos los sectores es un presidente que se queda con el Palacio de Nariño y sin el país”, sentenció el fiscal al programa.