“Pues de malas” fue la frase que utilizó la vicepresidenta de Colombia, Francia Márquez, cuando se le preguntó acerca de las críticas recibidas por utilizar un helicóptero para transportarse a pesar del costo que ello implica y sabiendo que para eso se utilizan recursos públicos. Aquella desafortunada frase para ella no solo le multiplicó las críticas, sino que le trajo burlas y sátiras.
Así pasó en la versión número 33 del Festival del Burro, que se celebra en el municipio de San Antero, Córdoba. En el concurso de disfraces, el evento más esperado por los lugareños y asistentes, los participantes exhibieron su creatividad y habilidad para adornar a los animales. Por ejemplo, hubo uno de Shakira a bordo de un Ferrari; también hubo un “burro reformista”, con relación a las reformas pretendidas por el Gobierno nacional, y un “burro intelectual”. Pero, el más aplaudido fue el que hacía alusión al helicóptero de la vicepresidenta.
El disfraz, obra del hacedor cultural del municipio de Santo Tomás, Atlántico, Antonio Riquildo Salcedo, fue realizado con varillas de hierro delgadas, material plástico, cartón y pegantes. Consistió en una cabina ovalada sobre el lomo del animal, una delgada cola pintada de negro y un recubrimiento de aluminio en lo que sería la parte delantera de la aeronave para simular el vidrio. Allí fue pegada una foto del rostro de Francia Márquez para simular que estaba adentro y a un lado se le incluyó la famosa frase “de malas”.
Riquildo Salcedo explicó que elaboró una estructura de poco peso para no lastimar al burro y que la hizo como una sátira a las declaraciones hechas por la vicepresidenta en medio de una entrevista para justificar sus viajes en helicóptero. “Yo vi la entrevista y la foto en redes sociales y pensé que ese debía ser. También pensé en un disfraz alusivo al hijo del presidente, pero me decidí por este”, dijo el hacedor.
Por haber ganado el concurso, este hombre, oriundo de Santo Tomás, ganó un total de 6′500.000 pesos, los cuales invertirá en su taller para seguir elaborando obras creativas.
El segundo lugar se lo llevó el “burro África”; en tercer lugar quedó el “burro Manglero”; en cuarto lugar, “La Burrachía”, y en quinto lugar, el “Burrotanque”. Este evento no solo promueve la creatividad y el ingenio de los habitantes de esta zona de Córdoba, sino que destaca la importancia del burro como animal de carga, fundamental para la vida campesina, y resalta su presencia en la cultura popular colombiana.
Sobre el Festival del Burro
La celebración es de tipo religioso y toma vida el Sábado Santo y Domingo de Resurrección. El festival también se destaca porque al finalizar se quema una figura que va montada sobre un burro de Judas Iscariote, el apóstol que traicionó a Jesucristo.
Además de los desfiles de burros disfrazados, también se realizan comparsas, presentaciones folclóricas de decimeros, gritos de monte, cantos de vaquería, bandas de viento y conjunto de pitos y tambores, así como un concurso de las mejores burras y sus pollinos, coronación del rey y la reina burro, entre otros eventos.
Surgió a principios del siglo XX, cuando los habitantes de este pueblo quemaban un muñeco que sobre un burro que hacía alusión a Judas Iscariote, durante una procesión de Semana Santa. A partir de 1987 a este evento se le agregaron todos los eventos con los que cuenta el festival en la actualidad, y hoy en día es considerado parte del patrimonio cultural inmaterial de Colombia.
San Antero está ubicado a unos 70 kilómetros de Montería, capital del departamento de Córdoba, sobre la vía que conduce a los municipios de Coveñas y Tolú.