Desde el pasado Domingo de Ramos (2 de abril) los católicos de todo el mundo se preparan para vivir la Semana Santa, un tiempo que tradicionalmente es de reflexión y oración en el que, a través de misas, procesiones y otros eventos litúrgicos los creyentes recuerdan los hechos que vivió Jesucristo en Jerusalén y se le reconoce como Salvador de los hombres. Para ello, también se acostumbra prescindir de algunos alimentos durante los días festivos de la semana.
¿Cuáles son los alimentos que los católicos deben evitar en la Semana Santa?
Aunque no se trata de un tema de todos los días de la Semana Santa, muchos creyentes sí deciden no incluir algunos alimentos en sus comidas diarias durante estos días y algunos van más allá realizando diferentes ayunos. Además de las diferentes tradiciones religiosas acostumbradas por los feligreses, estas personas también deciden no comer carne roja durante estos días santos.
Cabe mencionar que la tradición de la Iglesia católica sólo señala que se debe evitar este alimento durante tres días específicos de la cuaresma que son el miércoles de Ceniza, Jueves y Viernes Santos. En ese sentido, los fieles católicos no incluyen en sus dietas durante esos días platos que contengan carne de vaca, cerdo, cordero, ganso, ciervo, cabra, entre otras.
En algunos países, según informa la Agencia Católica de Informaciones (ACI) esto también incluye preparaciones y productos derivados de esos animales; como por ejemplo caldos, sopas y consomés; así como las salsas y los aderezos o condimentos que se creen con grasa animal.
El motivo por el que se evitan las carnes rojas en Semana Santa
Hay muchas explicaciones y hasta mitos sobre lo que implica comer carne roja durante los días de vigilia. La Semana Santa es una conmemoración que data del siglo IV, cuando se creó como acto de penitencia y renovación para la Iglesia católica y sus creyentes. Actualmente, lo que sucede en estos días se rige por el Concilio Vaticano II de 1966 en el que se planteó que, así como Jesús pasó 40 días sin comer ni beber nada, sus creyentes honran su sacrificio con el suyo propio absteniéndose de este alimento.
De la misma forma, hay quienes señalan que este tipo de ayuno ayuda a los feligreses a purificar su cuerpo, pues se adoptan las carnes rojas como símbolo del cuerpo de Cristo, por lo que el alimento debe ser evitado antes de que se dé la pasión y muerte de Jesús.
Finalmente, esta es una abstinencia que también está detallada en el derecho canónico de la Iglesia, en donde señalan específicamente sobre el viernes santo que “todos los viernes, a no ser que coincidan con una solemnidad, debe guardarse la abstinencia de carne, o de otro alimento que haya determinado la Conferencia Episcopal”. Ahí se agrega que el objetivo con esto es que los creyentes estén más concentrados en la oración y reflexión, que en los placeres de a alimentación.
Cabe aclarar también que la Iglesia exime de esta abstinencia a sus fieles menores de 14 años y a los mayores de 60. Según la Agencia ACI también a “quienes tienen problemas mentales, los enfermos, los frágiles, las mujeres en estado o que alimentan a los bebés”.
¿Qué alternativas tienen los creyentes para reemplazar las carnes rojas en sus comidas?
La Iglesia católica ha dado a sus creyentes los pescados y mariscos como alternativa para la alimentación en sus hogares durante estos días; además de privilegiar las verduras y frutas en la dieta de los creyentes. La preferencia por el pescado se da porque, según la tradición católica se da porque es considerada una comida austera y que tienen un amplio significado en la historia bíblica.
La importancia del pescado en esto es que este alimento figura en la famosa historia de la multiplicación de los panes y los peces, así como en el hecho de que cuatro de los 12 discípulos escogidos por Jesús fueran pescadores.