Tal parece que la reforma a la salud se enfermó y no saldrá de esta. Luego de que los partidos Conservador, Liberal y La U se retiraron de la discusión del proyecto, el panorama para la iniciativa del Gobierno nacional será mucho más complejo. ¿Cómo será la eventual votación en las Comisiones Séptimas del Congreso?
El proyecto radicado por la ministra de Salud, Carolina Corcho, necesitará casi que un milagro para pasar, al menos, del primer debate en la Comisión Séptima de la Cámara que, aunque dirige el representante Agmeth Escaf, del Pacto Histórico, no garantiza que la iniciativa salga a flote. ¿Cómo quedaron los apoyos en esa dependencia?
En esa comisión, el gobierno de Gustavo Petro tiene cuatro curules de Alfredo Mondragón, Alexandra Vásquez y María Fernanda Carrascal. Además de contar con el espaldarazo de la Alianza Verde, que hasta ahora ha sido el único partido de la coalición oficialista que no se ha apartado de la reforma a la salud. Allí, los verdes tienen dos representantes, la ponente Martha Alfonso y el legislador Juan Felipe Corzo.
Sin embargo, aunque por ahora el partido del girasol no ha tomado distancia del proyecto de Corcho, algunos representantes verdes como Duvalier Sánchez y Catherine Juvinao, que no pertenecen a la Comisión Séptima, están evaluando aliarse a otros congresistas del Nuevo Liberalismo para presentar un proyecto aparte de reforma a la salud que también modifique las reglas para prestar servicios salubristas en el país.
Así que, por ahora, no se sabe si toda la bancada de Alianza Verde respalde al gobierno Petro en esa idea. Sin embargo, allí el partido Comunes tiene al representante Germán Gómez, que también es de la coalición de Petro y ayudaría a sumar ocho votos a la reforma junto a los del Pacto y el Verde. No obstante, nada está dicho.
La reforma a la salud, además, podría alcanzar los votos de los representantes de las Circunscripciones Transitorias Especiales de Paz, cuyos representantes se han mostrado afines al proyecto. Sin embargo, ni por esas, superaría los votos en contra que recibiría luego de la renuencia de los liberales, conservadores y La U.
Por ejemplo, el liberal tiene cuatro curules en la Comisión Séptima, que se sumarían a los 8 votos que tienen el Centro Democrático, Cambio Radical, La U y Conservadores, que se opondrían a la iniciativa con sus dos representantes cada uno. Lo que, de facto, hundiría el proyecto antes de salir de primer debate.
Sin embargo, hay hipótesis que aseguran que los votos de los partidos oficialista que se salieron del proyecto no les pertenecen a Dilian Francisca Toro (La U), Efraín Cepeda (Conservador) y César Gaviria (Liberal), los jefes de esas colectividades. Por ello, se presume que el Gobierno empezaría a seducir los votos de los representantes y senadores para que los secunden y desobedezcan a sus dirigentes.
Previendo esta situación, César Gaviria tomó medidas al respecto y, según revelaron recientes informaciones de prensa, podría echar mano de sus facultades como director de los liberales y sancionar a quienes respalden a Gustavo Petro en la reforma a la salud.
Por ahora, queda en veremos determinar si Gaviria puede controlar por completo a sus 14 senadores y 32 representantes; así como a Cepeda dirimir si los 15 senadores y 25 representantes conservadores, así como los 10 senadores y 15 representantes de La U, le hacen caso a Dilian Franscica, así como a los demás dirigentes de esos partidos, y se alejan del controversial proyecto que, a más de un mes y medio de llegar al Congreso, sigue sin discutirse y, dicen expertos, cada vez es más complejo el panorama.
La ministra Corcho, por su parte, dice que estará abierta para seguir con los consensos y así tener un proyecto que le ayude a la ciudadanía.
“La única estrategia nuestra es mantener el diálogo con todos los sectores sociales y políticos para que se logre la mejor reforma a la salud. Es el Congreso en su independencia y función constitucional quien deberá tomar la mejor decisión para el pueblo colombiano”, señaló la funcionaria en recientes horas.