Como “una discusión muy franca” catalogó el senador estadounidense, Bob Menéndez, el Diálogo de Alto Nivel sostenido con el ministro de Justicia, Néstor Osuna; el canciller, Álvaro Leyva, y el embajador de Colombia en ese país, Luis Gilberto Murillo.
En el encuentro sostenido en Washington, los delegados de ambos países abordaron los retos que tienen los países en materia de lucha contra el narcotráfico, tema que ha preocupado al Departamento de Estado tras los más recientes informes emitidos sobre erradicación de cultivos ilícitos y las dudas sobre la nueva política antidrogas adoptada por el Gobierno del presidente Gustavo Petro.
Tanto Menéndez como el republicano Jim Risch escucharon en detalle las apuestas de la actual administración para sustituir los cultivos de hoja de coca y atacar las rentas ilícitas que deja el narcotráfico mientras se protege de forma paralela al campesinado colombiano, considerado como el eslabón más débil de la cadena de esa actividad ilegal. En ese sentido, el congresista demócrata reveló que era la primera vez que escuchaban a fondo esa estrategia.
“Vemos que hay una estrategia, lo que es importante aquí son los resultados, no solo la intención”, mencionó el también presidente del Comité de Relaciones Exteriores. Por su parte, Risch resaltó las precisiones que entregó el ministro de Justicia sobre la nueva política y la manera en que beneficiará a ambos países; incluso, reveló que no habían comprendido a ese nivel las pretensiones del gobierno nacional para combatir el tráfico de estupefacientes.
“No creo que nadie en el edificio entendiera la estrategia que el Gobierno colombiano está persiguiendo, y creo que ahora tenemos una mejor idea”, mencionó el republicano. Enfatizó en que el gabinete Petro tiene mayor conocimiento que el Gobierno estadounidense sobre las medidas que funcionan para atacar el narcotráfico. En ese sentido, dijo también que las relaciones en ese tema van avanzando “bajo la suposición de que están actuando de buena fe” y que será beneficiosa para las dos naciones.
Con respecto al panorama optimista que entregaron los congresistas, Osuna resaltó que ese Diálogo de Alto Nivel no solo permitió explicar en detalle la política antidrogas actual, sino resolver las dudas que se tenían sobre este tema. Por ello, destacó que el encuentro fue provechoso para todos los funcionarios.
“Le pudimos exponer a los dos senadores las líneas básicas de la estrategia de drogas del Gobierno, donde queremos concentrar la lucha criminal, cómo queremos enfrentar los cultivos con datos concretos, fechas y aproximativo de hectáreas que queremos intervenir”, comentó Osuna. En el encuentro —según el ministro—, los funcionarios colombianos notaron que hay perspectivas diferentes a las estadounidenses con respecto a la forma en que se quiere combatir el narcotráfico y otras actividades relacionadas.
Bajo ese panorama, acordaron compartir información de manera permanente sobre los logros de esa política, pues configura un cambio en el paradigma que ha tenido Estados Unidos sobre la forma en que se debe atacar esta problemática. Osuna, en cambio, le planteó a los congresistas que la nueva política va detrás de quienes cometen actos contra el medio ambiente y también se atacarán otras rentas de las estructuras criminales, como la destrucción de dragas para la minería ilegal.
Cabe mencionar que dentro de la décima edición del Diálogo de Alto Nivel entre Estados Unidos y Colombia, el jefe de la cartera de la Justicia y el Derecho participó en la mesa de ‘seguridad, desarrollo rural y antinarcóticos’ y en el primer diálogo con la sociedad civil. Allí volvió a exponer los principales puntos de enfoque de la lucha contra las drogas durante el gobierno Petro.
Asimismo, se concluyó que las relaciones de Colombia con los partidos Demócrata y Republicano van por buen camino siempre y cuando la política del actual Gobierno muestre resultados favorables