La Junta Directiva del Banco de la República siguió con el ciclo alcista de las tasas de interés. Tras la reunión del 30 de marzo, el Emisor decidió subir 25 puntos básicos la tasa de intervención, la cual a partir de ahora es del 13%.
Con esto, se le dio la razón a Fedesarrollo, Bolsa de Valores de Colombia, Corficolombiana, y otras entidades, que tras sus análisis previeron la nueva subida, pese a que el Gobierno nacional advirtió que la inflación ya había empezado a ceder en marzo.
De acuerdo con el banco central, la decisión adoptada en la sesión de hoy es una muestra de que la política monetaria continúa con su objetivo de llevar la inflación hacia su meta de 3%.
En la discusión de política, la Junta Directiva del Banco de la República tuvo en cuenta varios elementos.
Entre ellos, que la inflación en enero y febrero presentó incrementos mensuales inferiores a los observados a lo largo de 2022. Además, que la inflación anual de alimentos inició 2023 con descensos progresivos que la ubican en febrero en 24,1%, sensiblemente por debajo del dato de diciembre (27,8%). Estos resultados, según el Emisor, sugieren que la tasa de inflación se aproxima a su techo, a partir del cual iniciaría el descenso previsto para 2023.
“Las expectativas de inflación comienzan a incorporar estas noticias positivas sobre el comportamiento reciente de la inflación. La encuesta a los analistas económicos que el Banco de la República llevó a cabo en marzo mostró que la expectativa de inflación a 12 meses cayó de 7,7% en enero a 7,2% en marzo en la mediana de la muestra. Algo similar se observó para la correspondiente expectativa a 24 meses que descendió de 4,5% a 4,0%”, anotó el banco central al explicar los motivos de la nueva alza.
Otro punto que tuvo en cuenta es que el Índice de Seguimiento a la Economía (ISE) reportado por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) registró una variación anual de 5,8% en enero, mayor a la de diciembre (1,2%) y a la esperada por el equipo técnico (3,2%). Así las cosas, el equipo técnico del Emisor aumentó su pronóstico de crecimiento del PIB (Producto Interno Bruto) para 2023 del 0,2% al 0,84%. A pesar de la revisión al alza, este señaló que la actividad económica sigue caracterizada por una desaceleración importante.
La nueva decisión también tuvo en cuenta factores internacionales, principalmente en Estados Unidos.
“Entre enero y marzo la volatilidad en los mercados internacionales ha sido excepcional, debido a los problemas de estabilidad financiera en Estados Unidos y algunos países europeos. Esta situación ha añadido incertidumbre sobre la evolución de la economía mundial, pero sus efectos sobre la economía colombiana han sido limitados”, aclaró el Emisor.
Este anotó que las decisiones sucesivas que adopte la Junta Directiva dependerán de la nueva información económica que esté disponible.
Tendencia al alza de la inflación
El gerente del Banco de la República, Leonardo Villar, reconoció que en enero pasado se veía que durante el primer semestre del año habría una reducción en la inflación que se daría por la inflación de los alimentos, pero aún se prevé que puede seguir teniendo una tendencia al alza durante los dos primeros trimestres del año, lo cual restringiría la demanda.
“Solo hacia mediados del año empezaremos a ver una reducción en la inflación básica. El problema aquí es simplemente la inflación básica, inflación diferente a la de los alimentos y a la de bienes y servicios regulados. Responde a un rezago particularmente grande a las políticas monetarias y por eso vamos a ver esa respuesta en la inflación básica mas demorada”, explicó Villar en rueda de prensa.
Según el funcionario, esa inflación básica tiene un “componente inercial” y, basado en la indexación de precios, que es más fuerte en otros segmentos de los precios, en particular el segmento de alimentos.