El Gobierno de México situó el martes 28 de marzo en 39 la cifra de ciudadanos migrantes muertos y 29 heridos por un incendio en una estación del Instituto Nacional de Migración (INM) en Ciudad Juárez, en la frontera con Estados Unidos.
En comunicado entregado por la Fiscalía General de la República (FGR) se confirmó que: “Tras los lamentables hechos ocurridos en la estación migratoria de Ciudad Juárez, donde fallecieron 39 personas y 29 más se encuentran graves”.
Según lo mencionado por el organismo los migrantes pertenecen a las siguientes nacionalidades; 1 colombiano, 1 ecuatoriano, 12 salvadoreños, 28 guatemantecos, 13 hondureños y 12 ciudadanos venezolanos, aunque no se precisaron los fallecidos y heridos.
Jesús Ramírez Cuevas, portavoz de la Presidencia de México anunció previamente que la cifra de fallecidos había ascendió a 40, a su vez el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador (AMLO) detalló que el incidente se registró sobre las 9:30 p. m., del lunes en Ciudad Juárez, en territorio fronterizo con la ciudad estadounidense de El Paso, Texas, donde primero hubo un saldo inicial de 37 fallecidos, la mayoría de ellos de Centroamérica y Venezuela.
Presidente AMLO responsabilizó a una protesta de migrantes por el incendio
El mandatario mexicano declaró; “Esto tuvo que ver con una protesta que ellos iniciaron, a partir, suponemos, de que se enteraron que iban a ser deportados, movilizados, y como protesta, en la puerta del albergue pusieron colchonetas y les prendieron fuego”.
Informó que el siniestro se produjo a causa de una protesta y que el director del INM (Francisco Garduño) y la FGR (Fiscalía General de la República) ya investigan para deslindar las responsabilidades, según remarcó Ramírez Cuevas.
Previo al incidente, los agentes del INM habían realizado un operativo para remover de las calles a migrantes que acostumbran pedir limosna. La presencia de estos se han intensificado en la zona en el 2023, desde que el Gobierno de Estados Unidos anunció nuevas medidas, que incluye la deportación inmediata de migrantes de Haití, Venezuela, Nicaragua y Cuba que lleguen por tierra bajo el Título 42.
Desde territorio mexicano se ha afrontado críticas de organizaciones de derechos humanos por aceptar las políticas del Gobierno de los Estados Unidos y desplegar a más de 20 mil elementos de las Fuerzas Armadas en las fronteras para tareas migratorias.
Organizaciones civiles mexicanas, confirman que el 2022 se consolida como el año más trágico para los migrantes en México, pues unos 900 murieron en el intento de cruzar sin documentos desde el país hacia Estados Unidos.
En la región se vive un flujo migratorio récord, con 2,76 millones de indocumentados que han sido capturados en la frontera entre EE. UU., con México.
A su vez el canciller de Guatemala, Mario Búcaro, confirmó la cifra de víctimas guatemalteca y dijo que tiene el apoyo de las autoridades mexicanas “para conocer la verdad”. Añadió, “Vamos a buscar dar con los responsables de esto”, aseguró.
El fuego comenzó el lunes por la noche en una zona de dormitorios donde “estaban alojados 68 hombres mayores de edad originarios de Centro y Sudamérica”, según un comunicado del INM.
Los heridos fueron trasladados “en estado delicado-grave a cuatro hospitales de la localidad para su atención inmediata”.
Las autoridades investigaban la causa del incendio y solicitaron a la Comisión Nacional de Derechos Humanos, que atienda a los migrantes. También, empezaron a trabajar con funcionarios consulares de varios países para identificar a los fallecidos.
“El Instituto Nacional de Migración rechaza enérgicamente los actos que derivaron en esta tragedia”, añadió el comunicado oficial, sin aclarar a qué acciones se refería.
“El uso extendido de la detención de migrantes conduce a tragedias como esta”, tuiteó Felipe González Morales, relator especial de las Naciones Unidas para los derechos humanos de los migrantes. “De acuerdo con el derecho internacional, la detención de migrantes debe ser una medida excepcional y no generalizada”, concluyó.