Mercernarios acusados por el asesinato del presidente de Haití aseguran que se encuentran enfermos y en pésimas condiciones

A través de imágenes y cartas, los 17 colombianos que están siendo procesados por el magnicidio del presidente Jovenel Moïse, denuncian permanecer en pésimas condiciones de salubridad y salud en Haití, lugar en el que están desde hace aproximadamente 20 meses.

La preocupación de los familiares de los exmilitares que permanecen detenidos creció cuando dieron cuenta de que no solo se encuentran en pésimas condiciones de salubridad, sino que algunos se encuentran enfermos y las autoridades del centro de reclusión no les habrán permitido el ingreso de medicinas.

La información fue conocida por Noticias RCN, donde los detenidos también insisten en obtener la extradición y que, de acuerdo con esto, se realice un juicio justo. Según el material recopilado por este medio, los detenidos señalan que no participaron en el asesinato del presidente de Haití y reiteran el llamado a las autoridades colombianas para que se acuerde un juicio de manera adecuada.

Imágenes y cartas llegaron a la Presidencia de la República, donde retratan las condiciones en las que se encuentran los detenidos en el centro penal de Puerto Príncipe. Según se habría conocido, tendrían que usar un balde para realizar sus necesidades fisiológicas y recibir su alimentación en el mismo recipiente.

Otra de las graves denuncias que se habrían registrado tiene que ver con el acceso limitado a la alimentación, dado que la cárcel civil no ofrece comida por varios días a los 17 detenidos. Este proceso, incluso, podría tardar de 4 a 5 días para facilitar el acceso a la necesidad de los detenidos.

Por su parte, los familiares de los detenidos también hacen un llamado de auxilio para que se construya una mesa de diálogo que le permita a los exmilitares tener garantías de seguridad y salud, abriendo una cooperación internacional entre el Gobierno de Haití con el Gobierno colombiano.

En conversación con el programa La Noche de NTN24, Sandra Carolina Bonilla, esposa de Ángel Mario Yarce, detenido en Haití, señaló lo siguiente:

“Ellos no son mercenarios, ellos son militares que salieron con honores. Nosotros exigimos un juicio justo porque creemos en la inocencia de nuestros familiares. Ellos no irían a un país a asesinar a un presidente, por ello peleamos por su libertad”.

Hacia el mes de julio del año 2021, 17 exmilitares procedentes de Colombia fueron acusados por estar involucrados en los hechos que produjeron la muerte del presidente de Haití, Jovenel Moïse.

Es así que desde hace casi dos años los colombianos han estado retenidos en un centro penal de ese país y desde entonces, las denuncias en contra de malos tratos y tortura no han dejado de sonar. Tanto familias como presos han elevado llamados al Estado Colombiano para que a través de la mediación puedan ser extraditados a su país y tener allí un trato justo.

Por su parte, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, hace algunos días anunció que se desplazaría hasta Haití. Ante el anuncio, reiteró la responsabilidad del grupo de militares colombianos en los hechos y aseguró que se debe restaurar la democracia en ese país.

Así lo dio a conocer el presidente durante la XXVIII Cumbre Iberoamericana que se desarrolla en República Dominicana. Dijo que se irá hasta Haití para reforzar, también, los lazo de cooperación entre los dos países, sin dejar de lado la responsabilidad de los detenidos en materia de orden público.

Según señaló en la intervención, los militares colombianos habrían participado tanto en el proceso de planeación, como en la ejecución del ataque que generó la muerte del presidente de Haití.

“Quiero mirar bien esa corresponsabilidad, por eso quiero ir a Haití, hablar con su gobierno y ciertos actores de la sociedad haitiana que permitan establecer un camino democrático”, indicó el mandatario.