El Gobierno de Gustavo Petro presentó el 22 de marzo en el Congreso de la República el proyecto de reforma pensional con el cual se busca, entre otras cosas, que toda persona adulta mayor, hombre o mujer, que cumpla los tiempos de trabajo y la edad, tenga una pensión.
El mismo recibió voces a favor y en contra, ya que, además, busca que la mayoría de cotizantes dejen los fondos privados de pensiones y migren a Colpensiones.
Tras conocer el texto presentado, el director del Observatorio Fiscal de la Universidad Javeriana, Oliver Pardo, dio a conocer que el proyecto de ley tiene tres aciertos y tres desaciertos.
Entre los aciertos, el primero es la creación del pilar solidario, con el cual se entregará un bono de $223.000 a los adultos mayores que no alcanzaron a cotizar pese a trabajar durante gran parte de su vida.
“Es un acierto, ya que saca de la pobreza extrema a los mayores de 65 años de edad”, justificó Pardo.
De igual forma, como segundo acierto subrayó la eliminación de la competencia entre Colpensiones y el régimen privado. “Esta es una competencia muy ineficiente”, remarcó.
Por último, y tercero, rescató la reducción de los subsidios a las pensiones muy altas, ya que el sistema hoy en día es muy injusto.
Los 3 desaciertos de la reforma pensional
Entre tanto, anotó que, desafortunadamente, también tiene desaciertos. El primero es el umbral a partir del cual las cotizaciones van al régimen privado sigue siendo demasiado alto.
“Es de tres salarios mínimos ($3.900.000) y en el Observatorio Fiscal de la Universidad Javeriana proponemos que sea de dos salarios mínimos ($2.600.000)”, indicó Pardo.
El académico también anotó que no hay claridad sobre cómo se va a invertir el dinero del fondo de ahorro del pilar contributivo. Sobre esto, puntualizó que la ley debe dejar orientaciones claras con respecto a cómo se va a manejar este dinero.
Como tercer desacierto, Oliver Pardo señaló que el sistema sigue siendo muy injusto con las personas que no alcanzan a cumplir el requisito de semanas de cotización.
La alerta de las AFP
Las administradoras de fondos de pensiones (AFP) de Colombia alertaron sobre la insostenibilidad del proyecto de reforma pensional que presentó el Gobierno de Gustavo Petro, así como el alto impacto que tendrá sobre la financiación de los mercados de capitales.
Dicha reforma busca ampliar la cobertura y garantizar una renta básica a quienes no hayan reunido los requisitos para obtener una jubilación, para lo cual las AFP tendrán que enviar la mayor parte de recursos que administran actualmente hacia la estatal Colpensiones. Por lo tanto, estas advirtieron que de aprobarse, las AFP tendrían que transferir cerca del 80% de las cotizaciones de los trabajadores que administran, que rondan alrededor de $18 billones al año.
El presidente de la Asociación Colombiana de Administradoras de Fondos de Pensiones (Asofondos), Santiago Montenegro, explicó que ante ello las AFP van tener muchos menos recursos para invertir en deuda pública, bonos corporativos de las empresas, así como acciones en el mercado local e internacional.
“Esto es un flujo muy importante que deja de proveer al mercado de capitales, a la financiación de las empresas, a la refinanciación de las deudas”, dijo Montenegro en rueda de prensa.
Recordó que los fondos privados de pensiones administran ahorros para pensiones obligatorias por $346 billones, equivalente a cerca del 30% del PIB (Producto Interno Bruto) de Colombia, que están invertidos en instrumentos como acciones locales y extranjeras, bonos internacionales y otras alternativas.
Solo en títulos de deuda pública interna (TES) al cierre de febrero, las AFP tenían invertidos $116,2 billones en TES, el 25% del total de la deuda interna pública del país.
Pasivo pensional se incrementaría entre 230% y 250% del PIB
La Asociación Nacional de Instituciones Financieras (Anif) hizo los cálculos del impacto fiscal de las medidas que se propone, ya que no solo está en juego la sostenibilidad del sistema, sino también la de las finanzas públicas.
Los resultados son claros, de acuerdo con la entidad. Esta precisó que, de ser aprobada la reforma, tal y como está planteada, el alto pasivo pensional, que de por sí hoy alcanza una cifra cercana a 110% del PIB (Producto Interno Bruto), se duplicaría y llegaría a representar 249% del PIB, por lo que de esa manera se daría un fuerte golpe al ahorro, la sostenibilidad fiscal y se pondría en alto riesgo la posibilidad de pagar las pensiones futuras.