Conductor de TransMilenio denunció maltratos y bajos salarios, lo despidieron, ganó una tutela y tendrá que ser reintegrado

El fallo obliga a la operadora a promover un ambiente que garantice los derechos laborales, pues el conductor que interpuso la tutela, ya había manifestado su inconformidad a la gerente, Carolina Martínez Cuellar, quien no se lo tomó bien

El concejal Manuel Sarmiento (Dignidad) respaldó la solicitud al Juez. (Oficina de prensa Manuel Sarmiento)

Un conductor de la Operadora Distrital de Transporte La Rolita, Alberto Hernández Robles, perdió su empleo el mismo día en que asistió al Concejo de Bogotá y denunció las malas condiciones laborales que padecen los trabajadores del Sistema de TransMilenio.

En específico, el operario denunció las pésimas condiciones en las que debían operar diariamente, y también se refirió a los malos salarios. Esta no era la primera vez que el trabajador denunciaba su inconformidad, pues el 10 de febrero de 2023 en el marco de un evento que organizó la gerente de La Rolita, Carolina Martínez Cuellar, él se había referido a la necesidad de mejorar los espejos derechos de los buses y a reformar el sistema de “tablas”, pues si se les pagara una tarifa fija y no horas extras la empresa sería más productiva y el sistema sería beneficioso para los conductores.

“Ante estas manifestaciones, informa que la gerente de la empresa reaccionó de forma agresiva diciéndole que era un atrevimiento de su parte hacer estas propuestas y que, además, no iba a dejar de pagar las horas extra por su valor correspondiente al salario mínimo”, precisó el Fallo de primera instancia el Juzgado 28 penal municipal con función de conocimiento.

Poco después fue invitado por parte de la oficina del concejal del partido Dignidad, Manuel Sarmiento, a participar de una reunión el día 15 de febrero de 2023 en las instalaciones del Concejo.

En el marco del desarrollo de la comisión accidental, que contó con la participación de voceros de TransmMilenio, los despachos de otros concejales y los representantes de asociaciones de trabajadores del gremio transportador, comunicó a los asistentes las inconformidades manifestadas en la reunión con la gerente y otras problemáticas importantes para el gremio transportador.

Ese mismo dia, alrededor de las dos de la tarde, fue despedido.

La tutela

Acompañado por concejales de la ciudad, el trabajador le solicitó a los Jueces de la República que intercedieran por su reintegro, pues no podía darse el lujo de perder su trabajo, y de esta manera se interpuso una acción de tutela por parte de Germán Alberto Hernández Robles, en contra del operador de transportes.

El pasado 16 de marzo, el Juzgado 28 Municipal les dio la razón, considerando “que si bien el empleador tiene la potestad de dar por terminado un contrato de trabajo en virtud del principio de autonomía de la voluntad privada, ésta encuentra límites claros en los derechos fundamentales del trabajador.”

De acuerdo con las pruebas presentadas por el trabajador, el Juez consideró que el despido tenía una relación con las manifestaciones de inconformidad realizadas por el trabajador desde el Recinto de los comuneros, y además constató que en la empresa no existe un ambiente propicio que garantice los derechos laborales.

“Se observa de los indicios y pruebas estructuradas expuestas que sí existió una relación entre las manifestaciones de inconformidad y el despido sin justa causa (...) Se puede inferir que, la razón del despido fueron estas manifestaciones de inconformidad salarial y administrativa expuestas por el accionante”, precisó el Fallo.

El Juzgado recordó que a pesar de lo establecido por el Código Sustantivo del Trabajo, “no es excusa per se el cumplimiento de los requisitos legales para el despido sin justa causa para que se determine su constitucionalidad, sino que, este encuentra límites precisamente en derechos constitucionales, tales como la libertad de expresión”.

Por último, el concejal Manuel Sarmiento le insistió el martes 21 de marzo a la Operadora Pública de Transporte, a que respetar los derechos de los trabajadores, a que genere un ambiente propicio en donde se garanticen los derechos y a no perseguir a quienes demandan soluciones.

“La privatización del transporte público ha dejado a los trabajadores como uno de los sectores más afectados con malos salarios, jornadas extenuantes y condiciones indignas. Con La Rolita se quiere empezar a cambiar los desastres que ha dejado el oligopolio privado que volvió la movilidad en un simple negocio, por eso no se pueden replicar las mismas prácticas. Mi invitación a los trabajadores a que se organicen para reclamar mejoras en su bienestar”, precisó este martes el concejal de Dignidad.