Una lamentable situación de seguridad está ocurriendo en el municipio de Valdivia, corregimiento La Cruzada (Antioquia), debido a los continuos enfrentamientos entre estructuras ilegales por control territorial. La compleja situación ha llenado de zozobra a sus habitantes que esperan prontamente la intervención del Ejército Nacional.
Los choques armados entre miembros del Clan del Golfo y de la guerrilla del ELN estarían generando graves afectaciones al orden público, según indicó el secretario de Gobierno de Valdivia, Francisco González, la situación es compleja debido a que los cuerpos se amontonan en la zona rural y no pueden ser trasladados. González recordó que el paro minero que está ocurriendo en el Bajo Cauca antioqueño ha tenido toda la atención de las autoridades.
“Nos preocupa mucho que la comunidad nos advierte que hay más cuerpos en la zona, pero que el Ejército no ha llegado y eso es fundamental porque así nosotros podemos garantizar la vida y la seguridad de quienes van a realizar la extracción de los mismos”, aseguró el secretario de Gobierno de Valdivia.
Realmente la situación es compleja, así lo señala el mismo personero del municipio Didier García quien indicó que hasta hay cadáveres que se están descomponiendo; García solicitó ayuda de las autoridades, inclusive un corredor humanitario
“Comprendemos que el momento del Bajo Cauca con el paro minero exige toda la atención, pero ya es hora de que el Ejército hubiera llegado hasta allí y nos hubiera informado de qué manera podemos gestionar la atención de la situación. Hay cuerpos pudriéndose y la misma comunidad ha reportado el incremento de aves carroñeras sobrevolando el territorio”.
Se debe recordar que, en recientes días desde el ministerio Público, alertó de la situación en el municipio antioqueño debido a los enfrentamientos entre los grupos criminales y terroristas.
Por medio de un comunicado, la Procuraduría General de la Nación llamó la atención en el incremento de los enfrentamientos entre el ELN y Clan del Golfo en zona rural de los municipios de Valdivia y Yarumal, Antioquia, que han dejado, desde el 6 de marzo, un saldo de más 18 miembros de estos grupos muertos.
En su llamado, el Ministerio Público manifestó que los combates han comenzado a generar desplazamiento, confinamiento y desabastecimiento de alimentos y medicinas para al menos 80 familias de las veredas la Cruzada y poblaciones aledañas al municipio de Yarumal.
Según la Personería de Yarumal, las parcelas habrían sido minadas por los ilegales para hacerse con ellas, así como tampoco es posible el acceso del Ejército Nacional, al estar alejados más de tres horas del área urbana.
Por denunciar los enfrentamientos entre el ELN y el Clan del Golfo, la Procuraduría General informó que el personero habría recibido amenazas de muerte por parte de estos dos grupos armados.
En ese sentido, el órgano de control le hizo un llamado al Gobierno nacional “para que se proteja su vida y se tomen acciones urgentes de atención humanitaria a las familias afectadas y evitar que esta situación continúe expandiéndose hacia otras zonas del departamento”.
Así lo comentó el procurador delegado para los Derechos Humanos, Javier Sarmiento:
“Esta problemática lejos de detenerse, se ha expandido a otras subregiones como el nordeste antioqueño, de donde se ha conocido de riesgos de desplazamiento de las comunidades de Segovia y Remedios, por las disputas de control territorial y de rentas ilícitas entre estos grupos armados organizados”.
Por último, la Procuraduría aseguró que, “a través de sus capacidades misionales, continuará monitoreando las afectaciones contra la vida y libertades fundamentales de los habitantes de estas zonas del departamento de Antioquia; y vigilando la respuesta institucional, que en estos escenarios ha de ser urgente, excepcional e inmediata”, finalizó el comunicado del Ministerio Público.