El geólogo antioqueño Daniel Álvarez, egresado de la universidad Eafit y quien realizaba una maestría en la Universidad Politécnica de Cataluña, fue una de las tres víctimas mortales que dejó el derrumbe de una mina el pasado jueves 9 de marzo en la localidad de Súria que se ubica en la provincia de Barcelona, en España.
El profesional de 28 años de edad completaba un año en el país ibérico y falleció cuando llevaba cabo labores propias de su profesión en una mina de potasa, cuando ocurrió un desprendimiento de rocas a 900 metros de profundidad en el mencionado yacimiento, informaron en el periódico regional El Colombiano.
Agregaron que tras el siniestro, el cuerpo sin vida del antioqueño fue rescatado, junto con los de sus colegas, hacia las 5 de la tarde, hora de España, por los organismos de emergencia.
Mientras que en el periódico El País de España informaron que de la emergencia se conoció hacia las 8:53 de la mañana y se dispusieron ocho grupos de rescatistas y un helicóptero, que aunque trabajaron a contrarreloj para rescatar a los geólogos que perdieron la vida.
Uno de los trabajadores señaló en el diario español que ese día estaban trabajando en el lugar 240 personas, pero los tres fallecidos eran los únicos que estaban inspeccionando una zona de la mina en la que se estaban llevando a cabo perforaciones.
Ante la tragedia en la Universidad Politécnica de Cataluña rindieron un homenaje a los tres geólogos con un minuto de silencio durante la tarde del jueves.
Lo mismo hicieron desde Unión Sindical Obrera de Cataluña (USOC): “Queremos mandar nuestro más sentido pésame a las familias de los tres compañeros esta mañana que han perdido la vida realizando su trabajo en la mina de Súria”.
Mientras que en el país, la Sociedad Colombiana de Geología publicó un mensaje de condolencias por el fallecimiento de Álvarez en el accidente minero.
“Se lamenta profundamente la repentina partida de nuestro joven colega Daniel Álvarez, egresado de @EAFIT, gran apasionado de su profesión. Nuestras más sinceras condolencias a todos los que conocieron su alegre, efusiva y querida persona (sic)”, publicaron en la cuenta oficial de Twitter de la entidad.
Los bomberos levantaron una gran carpa en el exterior de la mina, mientras la bandera de la empresa ondeaba a media asta y un helicóptero de rescate sobrevolaba la zona.
ICL Group Ltd, con sede en Tel Aviv y cuya filial Iberpotash explota la mina, declaró en un comunicado que se había producido un “desafortunado accidente subterráneo”, antes de que se anunciaran las muertes.
En esa misma región española ya se habían registrado siniestros similares en los últimos 10 años, donde se tiene el registro de cuatro trabajadores que perdieron la vida.
En diciembre de 2013, Iberpotash dijo que dos personas que laboraban con esa compañía murieron tras el derrumbe de una mina en Súria.
Los medios locales informaron que un trabajador fue golpeado por una roca y murió en junio de 2020 en la mina Vilafruns de la empresa en la provincia de Barcelona. Tres semanas después, un minero murió en un accidente similar. La mina de Vilafruns se cerró ese año.
La potasa se utiliza como fertilizante en la agricultura y como materia prima en industrias como la farmacéutica, la de explosivos, la del vidrio y la química.
Los precios de ese mineral se han disparado en el último año después de que la Unión Europea sancionara a Bielorrusia, uno de sus principales proveedores, por su apoyo a la invasión rusa de Ucrania.
(Con información de Reuters)