Diego Molano en entrevista con Infobae: “Queremos representar a esa inmensa mayoría silenciosa atónita de que se premie al que destruye”

Diego Molano Aponte tiene 52 años y ha ido construyendo su vida política de la mano del uribismo, sector con el que llegó a dirigir Acción Social en el gobierno de Álvaro Uribe y posteriormente el ICBF en el gobierno de Juan Manuel Santos. Con ese partido llegó al Concejo de Bogotá en 2015, al que renunció para dirigir el DAPRE de Iván Duque, con quien terminó como ministro de Defensa.

Ahora, este bogotano de nacimiento, de hablado tranquilo, busca llevar la política de seguridad a la Alcaldía de Bogotá en donde se propone representar a aquellos que no salieron a marchar en las protestas del 2021. Cuenta a Infobae sus preocupaciones, sus posturas y las opiniones sobre algunos competidores.

Infobae: ¿Cómo tomó la decisión de ser candidato a la Alcaldía de Bogotá?

Diego Molano (D.M.): Cuando el presidente Petro anunció que el Metro debería ser subterráneo y el ministro del Transporte hizo un anuncio en forma de chantaje, diciendo que si no se hace el Metro subterráneo le quitaba las obras a Bogotá, tomamos la decisión de salir a defender el Metro de la ciudad, que está contratado, que beneficia a todos los bogotanos frente a este caos de movilidad que afecta a los más vulnerables.

Infobae: ¿Usted cree que una consulta popular es la solución a este problema del Metro de Bogotá?

D.M.: El problema es estructural. Hay que entender que, de los últimos 20 años, la izquierda ha gobernado 16 y no se ha hecho ninguna obra de infraestructura que permita a Bogotá salir de este caos y proyectar su crecimiento hacia el futuro de forma ordenada. Hay que quitarle ese carácter ideológico porque aquí cada obra dura años debatiéndose en vez de ejecutándose. Las obras no son de izquierda ni de derecha, de Petro o de Peñalosa, sino de los bogotanos.

Infobae: ¿Si usted estuviera en el papel de Claudia López, negociaría con el Gobierno nacional el proyecto de Primera Línea del Metro de Bogotá o qué posición asumiría?

D.M.: Yo creo que parte del problema es que la ciudad tiene que lograr unirse en torno a un consenso de que las obras toca ejecutarlas. Este Metro no puede ser un capricho del presidente Petro para que sea subterráneo. Ya se definió ese Metro, -y se dio una discusión amplia, técnica, con el Gobierno nacional de Santos y luego con el Gobierno de Duque, en el Concejo, y la obra se contrató- cambiar esa obra es una ilegalidad, si la llega a cambiar. Si al Gobierno le interesa una línea subterránea, pues que termine la financiación de la segunda línea.

Infobae: ¿Cómo lograría ese consenso entre el Gobierno y la Alcaldía?

D.M.: Si no hay un consenso, que se vote en una consulta y si aquí lo que se respeta es la voz del pueblo, entonces el pueblo ya definió, pero que sea en democracia, no por caprichos presidenciales.

Infobae: ¿Cuál cree usted que es el principal problema de Bogotá?

D.M.: Nosotros tenemos un caos en inseguridad y una inseguridad atada a la inmovilidad de la ciudad. Hoy cualquier ciudadano siente temor permanente de salir a la calle, de coger un Transmilenio. Vimos esa noticia, que me dejó perplejo, que el Tren de Aragua se tomó un conjunto residencial en el Tintal, venden microtráfico, extorsionan a los vecinos, no pueden salir de su propio conjunto. El caos y la inseguridad está generando una afectación grave a la calidad de vida, la tranquilidad de todos los bogotanos, especialmente de los ciudadanos más vulnerables, de los más pobres y de la clase media.

Infobae: ¿Cuál es la causa de esta situación de inseguridad?

D.M.: En primer lugar que al principio de esta administración, la alcaldesa Claudia López rompió relaciones con la Policía y en vez de apoyarlos lo que hizo fue generar desconfianza en ellos. En segundo término, se dejó crecer un fenómeno de bandas criminales de narcotráfico que se tomó parques, colegios y mafias al interior de Transmilenio que roban, acosan y destruyen la ciudad. Para eso lo que se requiere es decisión política de la Alcaldía y fortalecimiento de la relación con la Policía. Es importante tener presente la posición de Bogotá frente a las reformas y cambios a nivel nacional, porque permitir que liberen a todos los delincuentes para que salgan a la calle, como lo pretende la reforma a la justicia, es tener más criminales en las calles generando situaciones de crisis de violencia, afectando a los ciudadanos.

Infobae: Algunos indicadores de la política de seguridad que dejó el gobierno Duque, que usted dirigió, están en rojo, como el homicidio y el secuestro que subieron el año pasado

D.M.: Si usted revisa los datos al 2021, cerramos con la tasa más baja en los últimos 42 años. Había un incremento del homicidio en el primer trimestre del 2022, debido particularmente una situación después de la pandemia que le pasó a Colombia y a varios países en el mundo, no fue un fenómeno solo de las ciudades colombianas, donde se incrementó el homicidio. Implementamos un plan de choque, articulados con Alcaldías y Gobernaciones y terminamos en agosto con una tendencia a la baja, inclusive Bogotá terminó a diciembre del año pasado con una tendencia a la baja en homicidio, insuficiente porque con el problema de seguridad uno nunca puede estar satisfecho con los resultados, pero terminamos a la baja. Lo que hay que hacer es continuar con esos resultados que desafortunadamente en materia de homicidios crecieron en estos últimos dos meses, lo mismo que el atraco, robo a celulares y violencia intrafamiliar.

Infobae: Usted propone que se aumente en las cárceles y cuestiona la política de de carcelaria que está presentando el Gobierno al Congreso porque una justicia restaurativa. ¿Cómo conciliar esas dos concepciones de la seguridad desde lo local y desde lo nacional?

D.M.: A nosotros nos toca reinventarnos la política de seguridad urbana con base en tres principios: un principio de prevención dando oportunidades de trabajo a los jóvenes, con programas especiales de cultura, recreación, de deporte de manera que mantengan ocupados y extendiendo la jornada única de modo que tengan esa posibilidad y no que queden a merced de las bandas delincuenciales que los inducen al consumo y luego los reclutan. Segundo, tiene que tener una seguridad y justicia muy efectiva, tenemos que tener CAIS móviles para garantizar capturar y judicializar. Lo tercero, es necesario construir una nueva cárcel que hoy se puede hacer con la ley de seguridad ciudadana de modo que no tengamos las estaciones de policía hacinadas.

Infobae: Pero también hay mucho hacinamiento, no hay cupo para meter criminales

D.M.: Hay hacinamiento en las cárceles nacionales y en las estaciones de Policía, precisamente por la celeridad de los procesos de judicialización. Pero la Cárcel Distrital funciona muy bien y deberíamos ampliarlo especialmente en los delitos de bajo impacto, que es lo que tiene a las estaciones de Policía concentradas, que tienen ahí al que roba, atraca y es reincidente y los policías están dedicados a cuidar estos delincuentes, cuando deberían estar dedicados a proteger a los ciudadanos. Se requiere una cárcel adicional en donde se lleven a estos delincuentes, incluidos los venezolanos, para que paguen por esas penas o cuando incumplan o generen contravenciones o delitos en contra de la Constitución y la ley.

Infobae: ¿Qué haría con el Pico y Placa?

D.M.: Yo creo que en el esquema de Pico y placa se agotó. Lo que no puede ser es que la política de movilidad más importante en la ciudad durante 20 años ha sido el pico y placa y no se han hecho las obras esculturales, no se terminó las troncales de Transmilenio que estaban establecidas por una distinción ideológica, se dejó deteriorar el servicio de Transmilenio, no se hizo el metro, no se hicieron las salidas y entradas a Bogotá. El pico y placa está agotado en esa dimensión que tiene y toca replantearlo.

Infobae: ¿Qué haría usted con el Corredor Verde de la Séptima?

D.M.: Es necesario lograr la reinvención de Transmilenio en su totalidad, toda la estructura, las troncales y el servicio debe ser reinventado para que tenga más frecuencias, mejor servicio y que la gente lo valore más. Eso implica también construir las nuevas troncales la Avenida 68, la de la Ciudad de Cali y la Caracas, con el metro, porque así están diseñados. En el caso del Corredor Verde, muchas veces la izquierda cumple es falacias, dijeron un corredor verde que al final es un Transmilenio con buses eléctricos. Nosotros, en el Concejo Bogotá, no estuvimos de acuerdo con el Transmilenio por la Séptima, lo que señalamos es que el Transmilenio debería ser desde la 200 hasta la 100, donde hay espacio; que se conecten con la Avenida 68 y que más bien de la 100 hasta la 34, por la Séptima, se utilicen buses duales y que se hagan las obras estructurales que se requieran directamente en la calle 92, el puente la calle 85 y el intercambiador en la calle 72 con Séptima.

Infobae: Usted dirigió la política de seguridad durante el paro nacional del 2021 que tuvieron epicentro en Bogotá ¿Cómo cree que sería recibida su candidatura tras esos hechos?

D.M.: En ese proceso de lo que se ha denominado la protesta social hubo tres grupos de ciudadanos: unos que salieron a machar por alguna causa de indignación social, que lo hicieron pacíficamente, que se le respetaron sus derechos; otros millones de colombianos y de bogotanos que no salieron a marchar, que se quedaron en sus casas, y que se vieron afectados en sus derechos tales como los, por ejemplo, el portal de las Américas o los vecinos de Yomasa que se vieron restringidos en salir, afectados porque el portal de las Américas lo convirtieron en un sitio que enclaustraron, donde murió un joven degollado por una guaya en una moto, que el microtráfico se tomó los parques, los locales destruidos y se bajó el precio de los apartamentos. Hubo otro grupo pequeño, pero ruidoso de la Primera Línea que destruyó, que no hizo manifestaciones, sino que atentó con atentados terroristas, a nivel nacional fueron 300 de ellos capturados, 23 de ellos por homicidio, más de 100 por terrorismo, extorsionaron y fueron capturados y judicializados. Desafortunadamente hoy los están soltando, les están pagando un millón de pesos a todos aquellos que hicieron el mal y que destruyeron, mientras que millones de jóvenes que no marcharon hoy no los están premiando y a quienes marcharon pacíficamente tampoco se sienten representados.

Infobae: ¿No cree que hubo un exceso en acusar a estos jóvenes de la Primera Línea de terrorismo, cuando habían hecho acciones de pronto vandálicas?

D.M.: Ahí se configuraron cuatro delitos, terrorismo, homicidio, secuestro y concierto para delinquir. Cuando usted destruye un CAI a punta de piedra es un acto de terrorismo, tirarle una piedra a un Policía, a un CAI, buscar incendiarlo dentro de un CAI, es un acto terrorista porque se agrede una institución que provee la seguridad. Aquí uno no puede poner los reflectores donde ellos fueron judicializados con un fiscal, con un juez y las sentencias están en curso. No fueron judicializados por manifestarse pacíficamente.

Infobae: Las protestas fueron un llamado al cambio político, cómo interpreta usted ese fenómeno para ser candidato

D.M.: Hay una mayoría silenciosa de bogotanos que hoy reclaman que aprecie, se quiera, se ame esta ciudad y son mujeres, hombres, trabajadores, jóvenes, estudiantes, microempresarios, deportistas que dicen: oiga, reconozcan a los que hacemos las cosas bien. Nosotros queremos representar a esa inmensa mayoría silenciosa que hoy está atónita de que se premie al que destruye. Le paguen un millón de pesos para ser gestor social, mientras que hay millones de jóvenes que hoy salen a estudiar, con dedicación, trabajan de día, estudian de noche y no les reconocen nada. Representamos esa inmensa mayoría que hoy dice: queremos que la justicia valga, no puede ser que aquí se den por vencidos frente a los criminales y más bien los premien y los dejen salir mientras que los ciudadanos se siguen viendo afectados. Queremos representar para que nosotros podamos salir adelante con empleo, con dedicación y que lo que promete, se haga; no una ciudad que sea gobernada con odio de clases, con una sociedad que busque abrir las brechas y la diferencia, sino más bien a todos prestarles un servicio digno, que se sientan respaldados en esta ciudad, que la ciudad que recupere su orgullo.

Infobae: ¿Sigue pensando que los niños reclutados son máquinas de guerra?

D.M.: La izquierda siempre ha utilizado argumentos falaces para distorsionar lo que se dice y engañar. Voy a contarle el contexto, porqué yo mencioné el término de “los convierten en el máquinas de guerra”, que eso es lo que yo dije. Porque a mí una niña, una menor de edad, que conocí en un hogar del ICBF en el Meta, me dijo: a mí me convirtieron en máquina de guerra, me convirtieron en máquina de guerra porque me reclutaron a los 12 años, me violaron a los 13, me obligaron a abortar, a los 14 me colocaron un morral con partes del cuerpo humano durante dos semanas para deshumanizarme, luego le disparaban a los soldados y a mis propios compañeros. Eso me lo contó, dí voz a lo que ella me dijo, me convirtieron en máquina de guerra. Indudable, indiscutible, que los menores de edad son víctimas, en eso he trabajado toda la vida, lo dije en Acción Social reaparando a las familias y a las víctimas, lo hice en el ICBF, lo mencioné porque es ese el tipo de atrocidades, de violaciones de los derechos humanos que cometen las Farc. Pero yo dije eso y los reflectores se colocaron en mí como siempre lo hace la izquierda, en vez de colocarlos en las Farc que son los que los reclutan, los entrenan y los convierten en combatientes. Yo tengo clarísimo que los menores de edad son vícitmas y los reflectores deben estar en las Farc que son los que cometieron este delito y los convierten en víctimas.

Infobae: ¿Usted tiene el aval del Centro Democrático o cómo va a presentar su candidatura?

D.M.: Nosotros entendemos que para bien de los bogotanos hay que ir más allá de un partido. Poner a los bogotanos en torno a la construcción del Metro, convocar a los partidos, a los empresarios, los ciudadanos, los trabajadores, a los que hacen trabajo social. Así vamos a plantear nuestra campaña, convocando a todos los sectores, yendo más allá de los partidos y construyendo con los partidos también una propuesta de largo plazo para unir a los bogotanos.

Infobae: ¿Tiene el aval del Centro Democrático o no?

D.M.: Nosotros vamos a esperar tener el aval del Centro Democrático y de otros partidos, pero especialmente de los ciudadanos que quieren que Bogotá salga de este caos.

Infobae: ¿Usted cree que Claudia López podría dejar un sucesor?

D.M.: Lo que creo es que la alcaldesa Claudia López, el presidente Petro y otros que han pasado por la Alcaldía de Bogotá, lo han hecho es con el propósito de llegar a la Presidencia, pero no para servir verdaderamente a los bogotanos. Eso incluye tratar de dejar algún sucesor, pero los bogotanos son un electorado independiente, exigente y rebelde, que entiende muy bien y esperamos que tome las decisiones adecuadas del tipo de alcalde que necesita la ciudad para garantizar su proceso de desarrollo mucho más organizado, más tranquilo, viviendo con mucha más seguridad.

Infobae: ¿Qué piensa de otros candidatos a la Alcaldía como Gustavo Bolívar?

D.M.: Hay un jurgo de candidatos que han sonado por todos lados, pero no se ha concretado específicamente quiénes están y por supuesto nosotros debemos trabajar para que haya los mejores servidores públicos y en el propósito recuperar a Bogotá. Lo que sí no podemos permitir es que Gustavo Bolívar llegue a la Alcaldía para que siga destruyendo y generando caos como el que buscaron general en varias ciudades y en Bogotá el año pasado.

Infobae: ¿Qué piensa de Juan Daniel Oviedo que compartió con usted el gobierno Duque?

D.M.: Juan Daniel es una persona responsable y trabajadora y por supuesto considero que con él es una persona con la que hay que trabajar.

Infobae: ¿Qué piensa de Rodrigo Lara que está evaluando ser candidato?

D.M.: Rodrigo representa una generación de políticos con compromiso social y demócratas, por supuesto con ellos hay que siempre estar atentos a cómo se hace el trabajo conjunto.