Tras el primer semestre de la presidencia de Gustavo Petro no se ha podido frenar el exterminio de los líderes sociales en Colombia, pese a que el jefe de Estado trabaja por romper la execrable estadística de violencia de asesinatos de estas personas que representan y trabajan por sus comunidades, y que cierra el segundo mes del año con la escabrosa cifra de 20 asesinatos, donde las últimas víctimas, de las que se tuvo conocimiento recientemente, fueron dos lideresas: una en el Valle del Cauca y la otra en Bolívar.
El primer crimen fue el de la mujer transgénero Shaina Vanesa Pretel, activista afro y LGBTIQ+, quien fue ultimada por un grupo de hombres armados que le dispararon en el barrio El Poblado II en el oriente de Cali, informaron en el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz).
“Era una reconocida lideresa, activista y defensora de los derechos de la comunidad LGBTIQA+ en (la capital vallecaucana). Hizo parte del encuentro AfroResistance en torno a temas raciales relacionados con los derechos humanos y la justicia”, destacaron en la ONG.
En la revista Semana detallaron que la Pretel fue hallada sin vida en la madrugada del martes 28 de febrero y aunque fue trasladada al Hospital Carlos Holmes Trujillo, falleció por la gravedad de sus heridas.
“Todavía se desconocen los hechos y móviles que nos arrebataron la vida de Shaina; formaba parte de organizaciones sociales y un día antes había participado del encuentro con mujeres AfroResistance. Nos están matando, y no podemos seguir perdiendo la vida de ningún integrante de los sectores sociales LGBTIQ+, exigimos celeridad a las investigaciones, que puedan esclarecer los hechos”, citaron de lo dicho por la Fundación Plataformas de Cali, una de las entidades que alertó sobre el asesinato.
La otra lideresa víctima fue Rosa Elena Celix Guañarita, quien fue asesinada el pasado domingo 26 de febrero mientras departía en un establecimiento público que se ubica en la vía que comunica a los municipios de San Pablo y Santa Rosa (Bolívar). Hasta allí llegó un hombre con arma de fuego que le disparó en dos ocasiones por la espalda, reseñaron en Indepaz.
Destacaron también que su trabajo era reconocido por la comunidad y las personas afectadas por el conflicto armado en Santa Rosa, por lo que fue elegida como vicepresidenta de la Asociación de Víctimas de la vereda Los Guayacanes.
“Fueron dos impactos de arma de fuego, en un establecimiento de bebidas embriagantes, la persona consumía alcohol, y sin mediar palabras, otra persona llega y le dispara. Estamos estableciendo con los familiares los posibles móviles de este hecho, es materia de investigación, es una mujer”, citaron de las declaraciones del coronel Luis Alejandro Cubillos, comandante de Policía en el Magdalena Medio.
Previo a conocerse de estos dos nuevos crímenes, se tenía el reporte del homicidio de Abelardo Duarte Moncada, cuyo cuerpo sin vida fue hallado en Tame (Arauca) en la mañana del lunes 27 de febrero.
En Indepaz informaron que Duarte fue reportado como secuestrado desde el pasado sábado 11 de febrero, luego de que fuera raptado en su propia vivienda en zona rural de la capital Arauca. Sin embargo, el lunes hallaron su cadáver con evidencias de impactos de bala.
El líder asesinado era reconocido por su trabajo en la Junta de Acción Comunal (JAC) de la vereda El Rosario en la capital araucana de la que llegó a ser presidente, destacaron en la ONG.
Con estos homicidios se supera el macabro promedio de 13 líderes sociales asesinados que se registraba mensualmente en 2022 y se llega a un total 1.427 homicidios de estas personas que trabajan por sus comunidades o por la defensa de los Derechos Humanos, desde la firma del acuerdo de paz entre la extinta guerrilla de las FARC y el Estado colombiano, de acuerdo con las cifras de Indepaz.