Durante la noche del lunes 27 de febrero se reportaron protestas de los pasajeros de la aerolínea Viva Air, en los aeropuertos de Rionegro y Bogotá, luego de que esa compañía anunciara que suspendería sus operaciones en el país tras el anuncio de la Aeronáutica Civil de Colombia (Aerocivil) de que hay terceros interesados para que esa compañía de vuelos a bajo costo se integre con una empresa que le permita superar la crisis financiera por la que atraviesa.
“Esta decisión, sin precedentes por parte de la entidad, dará como resultado nuevos retrasos en la toma de una decisión, por lo que Viva se ve obligada a anunciar, lamentablemente, la suspensión de sus operaciones con efecto inmediato”, señalaron.
Recordaron también que le presentaron al gobierno colombiano numerosas evidencias de que se encuentran en una situación financiera crítica y que seguirían en negociaciones con sus acreedores para poder reiniciar operaciones.
“La única forma en que se puede continuar volando es que la Aeronáutica Civil permita que esta haga parte de un grupo de aerolíneas más fuerte y bien capitalizado. En cambio su decisión (...) pone en entredicho el futuro del servicio aéreo de bajo costo en Colombia y pone en peligro los empleos de 5.000 colombianos”, aseguraron.
Y agregaron al final del comunicado que trabajaron incansablemente para lograr una alianza con Avianca, la cual se vio frustrada, ya que entre otras razones la Aerocivil no siguió los procedimientos adecuados para evaluar la transacción.
“En un periodo de siete meses, el Gobierno recibió más de cinco actualizaciones financieras para demostrar que Viva calificaba para tratar su pedido bajo figura “excepción de empresa en crisis” que daba cuenta de la urgencia apremiante de una definición”, concluyeron.
Ante estos señalamientos, en la Aerocivil publicaron otro comunicado en el que le respondían a la compañía aeronáutica asegurando que el mencionado proceso se ha llevado a cabo de acuerdo a lo estipulado, tras hacer un recuento de lo que ha ocurrido con la integración que buscaba Viva Air con Avianca.
“La operación presentada por las compañías para autorización de la Aeronáutica Civil fue objetada por la Dirección de Transporte Aéreo el pasado 4 de noviembre de 2022, al identificar que tendía a producir una indebida restricción a la competencia”, recordaron.
Explicaron que de esa manera la autoridad aeronáutica ordenó rehacer el trámite regido bajo la ley de competencia y que los intervinientes tenían la opción de pronunciarse y ofrecer soluciones para que al realizarse la integración de esas dos aerolíneas no se afectara la libre competencia.
“Los condicionamientos ofrecidos por las intervinientes para mitigar la afectación a la libre competencia serán trasladados de manera oportuna y transparente a terceros interesados reconocidos en la actuación, quienes podrán expresar sus opiniones al respecto”, detallaron.
Aseguraron que el mencionado trámite lo llevan a cabo bajo los principios de celeridad y eficacia en la función administrativa, cuyos tiempos estipulados han sido respetados.
Finalmente anunciaron que trabajarán porque se garanticen el bienestar de los viajeros que están padeciendo las consecuencias de la suspensión del servicio.
“Ante las manifestaciones efectuadas por Viva en cuanto a su decisión de cancelar los vuelos de miles de pasajeros que compraron tiquetes con la expectativa de volar, la entidad, dentro del ejercicio de sus funciones y junto a la Superintendencia de Transporte, velará especialmente por el respeto de los derechos de los usuarios afectados”, finalizaron el comunicado.
Durante la noche del lunes y las primeras horas del martes se tenía el reporte de usuarios de esa aerolínea varados en los aeropuerto José María Córdova en Rionegro, y el de El Dorado en Bogotá, quienes publicaron videos expresando su molestia con esa compañía aeronáutica y su suspensión de operaciones en el país.