Calidad del aire en Bogotá: evitar el uso de vehículos contaminantes y regresar al tapabocas, recomendó la alcaldesa Claudia López

Los incendios en la Orinoquia empeoran la calidad del aire en la ciudad, aseguró la administración distrital

La mandataria afirmó que la contaminación ambiental es el arma más mortal de la capital del país. Foto: Alcaldía de Bogotá

La calidad del aire en Bogotá sigue preocupando a las autoridades. El viernes (24 de febrero) el distrito declaró una alerta ambiental, por cuenta de la concentración de material particulado en la ciudad.

Desde las secretarías de Ambiente, Desarrollo Económico y Alcaldía Mayor hicieron un llamado a adoptar medidas voluntarias, para evitar la imposición de restricciones obligatorias, que podrían afectar a la economía, en caso de que no mejore la calidad del aire.

En ese orden, la alcaldesa Claudia López invitó en la noche del domingo (26 de febrero), a los bogotanos a abstenerse de utilizar vehículos contaminantes y sugirió que quienes sufren de problemas respiratorios regresen al uso del tapabocas, para evitar afectaciones a su salud:

“La calidad del aire sigue muy regular. Esta semana le pedimos y agradecemos a todos los ciudadanos que voluntariamente puedan abstenerse de usar todo tipo de vehículo contaminante. A las personas con vulnerabilidades respiratorias les recomendamos usar tapabocas. #AlertaAmbiental”, escribió la mandataria en su cuenta de Twitter.

Junto a la descripción publicó una fotografía de la Red de Monitoreo de Calidad del Aire de Bogotá, en la que Bosa, Kennedy y Barrios Unidos presentan una calidad regular del aire, mientras que, las demás localidades registran una calidad moderada.

Tres zonas registran una calidad regular del aire

A raíz de los incendios forestales en la Orinoquía colombo-venezolana y en los Llanos Orientales, cuyas emisiones –por la fuerza de los vientos– llegaron y se han mantenido en Bogotá, la ciudad se ha visto obligada a pensar en nuevas medidas, en aras de proteger la salud de sus habitantes.

“Lo que hasta ahora nos dice nuestro modelo es que las condiciones de estabilidad atmosférica, es decir las condiciones y choques de vientos que hace que el material particulado permanezca en el aire, se van a mantener, como mínimo, hasta el martes. Sin embargo, agradecemos toda la gestión que se ha hecho desde distintos gremios para tomar medidas voluntarias que, posiblemente, nos están ayudando a mantener las concentraciones en condiciones similares”, manifestó Carolina Urrutia, secretaria de Ambiente.

Tras la reunión del viernes entre el Ministerio de Ambiente, el Ideam y las autoridades distritales, en la que terminó declarándose la emergencia ambiental, el lunes (27 de febrero) un comité técnico evaluará si la ciudad debe tomar medidas adicionales.

En días anteriores la decisión había sido no imponer medidas restrictivas, “pero sí medidas voluntarias y preventivas en todos los sectores del Distrito, desde Educación, Integración Social, Salud, Ambiente y Movilidad, estaremos trabajando con los sectores económicos y con los servicios que presta el Distrito, parta cuidar la salud de los bogotanos”, indicó la secretaria Urrutia.

Sin embargo, si no hay un impacto positivo en la calidad del aire, el Distrito tendrá que imponer medidas restrictivas que, indudablemente, afectarán a la economía, como la eliminación del Pico y Placa solidario, restringir la movilidad de los vehículos de carga de más de 10 años y establecer horarios de operación para la industria, entre otros.

“Hoy tenemos casi cuatro veces más aportes de contaminantes provenientes de los incendios regionales, de los que tuvimos en la última declaratoria de calidad del aire, en la primera semana de febrero. Estamos viendo llegar material de incendios del Meta, del pie de monte amazónico, que están trayendo a Bogotá entre 18 y 22 microgramos de material, al día”, recordó la secretaría de Ambiente.

De acuerdo con el pronóstico, lo más probable es que los elementos contaminantes en el aire se mantengan en condiciones moderadas y regulares, por toda la ciudad. A grandes rasgos, esto indica que los incendios forestales en las regiones siguen generando aportes significativos en la cantidad de material particulado que se percibe en la ciudad.