El último intento del expresidente de la Corte Suprema de Justicia Leonidas Bustos por zafarse del proceso penal por el Cartel de la Toga, quedó en eso, en un intento, luego de que el alto tribunal negara la recusación que hizo a los magistrados que lo investigan. Así las cosas, el exmagistrado tendrá que enfrentarse a juicio.
La estrategia de Bustos había sido recusar a los magistrados Ariel Torres, Blanca Barreto, y Jorge Caldas para que se apartaran de la investigación. El exmagistrado argumentó que quienes lo investigan no son parciales, pues, aún creen en el testimonio del exfiscal anticorrupción Luis Gustavo Moreno.
También argumentó que estos magistrados no podían juzgarlo porque fueron los mismos que condenaron en primera instancia al exmagistrado de la Sala Penal de la Corte Suprema Gustavo Malo Fernández. Aduciendo, así, que no tiene las garantías para afrontar el proceso.
Lo que buscaba Bustos es que, al apartar a sus investigadores del caso, la Corte tendría que nombrar a unos nuevos que habrían tenido que evaluar todo el proceso desde ceros. Pretensión que fue negada en un documento de 19 páginas en los que los conjueces Alejandro Felipe Sánchez, Pablo Elías González Monguí y Ricardo León Molina López negaron la recusación de Bustos.
Los conjueces advierten, según los citan en El Tiempo, que en el fallo condenatorio contra el exmagistrado Malo Fernández no hubo un señalamiento que comprometiera la responsabilidad penal de Bustos:
“No es posible afirmar que con las menciones aisladas que aparecen acerca del aquí procesado en la sentencia condenatoria dictada en el (proceso de Malo), con respecto a situaciones fácticas relatadas por un testigo, pueda señalarse que corresponden a un análisis sustancial de su responsabilidad”, dice el documento. ”Todos los medios de prueba fueron analizados, en la perspectiva de la responsabilidad que le cabía al exmagistrado Malo Fernández, con fundamento en varios de los testigos, entre ellos exmagistrados de la alta Corte Suprema, exmagistrados auxiliares y otros funcionarios de la misma corporación, investigadores del CTI y personas particulares”, se puede leer en el documento de la Sala de Conjueces citado por El Tiempo.
En su decisión, los conjueces también señalan que “se observa que las ocasiones en que el nombre del hoy procesado Bustos Martínez se menciona, sucede en el contexto propio del relato de los hechos que hizo el testigo Moreno Rivera, sin juicio de valor alguno acerca de la presunta responsabilidad del mencionado acusado”.
Sobre la falta de garantías, en el documento citado por El Tiempo se determina que:
“Además, la decisión en el proceso se nutre de un contexto probatorio propio, autónomo y suficiente, que no necesariamente debe coincidir con el caso del actual procesado. Y aún si las dos causas procesales coincidieran en determinados núcleos probatorios, ello no es suficiente para activar la causal”, agregó la Corte al estimar que no es posible afirmar que Bustos no tenga garantías para un juicio justo.
La participación del exmagistrado Bustos en el Cartel de la Toga
La investigación señala que Bustos —que hizo carrera en esa alta corte desde 2008 hasta llegar a presidirla— habría recibido alrededor de 200 millones de pesos de manos del exfiscal Luis Gustavo Moreno para beneficiar al senador Álvaro Ashton, investigado por la Corte Suprema por su supuesta relación con el Bloque Norte de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) en el departamento de Atlántico.
“Se le entregaron 200 millones de pesos en su apartamento y también un reloj de marca Cartier Ballon Bleu avaluado aproximadamente entre 40 y 50 millones de pesos. Todo esto constatado con un acervo probatorio y con las afirmaciones de diferentes testigos. Además, existen cámaras que demuestran que se le entregó el reloj y esa plata”, aseguró el investigador.
En junio de 2021, la plenaria del Senado de la República había aprobado la acusación formal contra el exmagistrado, con una inusitada mayoría: 65 votos a favor y cero en contra. Durante esa sesión de la cámara alta del Congreso, el entonces senador Edward Rodríguez proyectó un video del exfiscal anticorrupción Luis Gustavo Moreno —que también hizo parte de ese cartel— admitiendo sin rodeos que el Leonidas Bustos también recibió parte de los sobornos.
También se tuvo en cuenta como material probatorio una interceptación telefónica entre el abogado Leonardo Pinilla, socio del exfiscal anticorrupción Gustavo Moreno, y Alejandro Lyons Muskus.
En esta última se escucha a Pinilla señalando que hubo corrupción en algunos procesos judiciales a cargo de la Sala de Casación Penal de la alta corte, en contra de los congresistas Musa Abraham Besaile Fayad, Luis Alfredo Ramos y Hernán Francisco Andrade.
“Se cometieron actos de corrupción para lograr decisiones favorables a esos congresistas. De acuerdo con el sentido de esas conversaciones, los exmagistrados José Leonidas Bustos, Francisco Ricaurte y Gustavo Malo habrían estado involucrados en esos actos de corrupción”, decía el documento radicado por el legislativo.
El documento, entregado por el representante investigador, recoge otras pruebas como declaraciones de los exsenadores Musa Besaile y Hernán Andrade; el senador Germán Barón Cotrino, el exfiscal general encargado Fabio Espitia, y otros magistrados de las altas cortes.
Según el exsenador Rodríguez, el exmagistrado Bustos daba instrucciones a sus subalternos sobre cómo debían proceder en los casos de los beneficiados por el cartel. “Era el que decía a qué congresistas tenían que ir a buscar, qué les tenía que decir y se reunían en diferentes apartamentos para determinar cuáles eran los pasos a seguir”, destacó.
El exmagistrado, por su parte, ha manifestado que el único testimonio que tienen los investigadores en su contra es el del exfiscal anticorrupción. Según Bustos, esa declaración no es suficiente para probar su participación en los hechos de corrupción. Según el exmagistrado, los audios de Moreno son “pequeñas muestras descontextualizadas de conversaciones largas, de muchas horas”.