Existen miles de historias de amor, pero no todas son retratadas en un documental, para que esto suceda debe existir un elemento excepcional, ya sea en sus protagonistas o en las dificultades que deben afrontar.
Un poco de ambos elementos se encuentra en el largometraje Transfariana, dirigido por el cineasta francés Joris Lachaise, que narra la historia de amor entre Laura y Jeison, ella una mujer trans extrabajadora sexual y él un comandante de las Farc-ep.
Se conocieron cuando ambos estaban recluidos en la Cárcel La Picota de Bogotá, ella por delitos relacionados con la delincuencia y él por ser miembro de la guerrilla; Laura fue traslada, de un pabellón destinado a delincuentes comunes, a uno ocupado en su mayoría, por miembros de la guerrilla, allí inician una relación sentimental.
Sin embargo, cundo dirigentes de la guerrilla se enteran de la relación que sostienen, Jaison es relevado de su cargo de comandante, pues no era bien visto por esa organización que uno de sus líderes sostuviera una relación con una mujer trans.
En medio de la coyuntura de los diálogos de paz, desarrollados en La Habana, la relación de Laura y Jeison toma un matiz diferente, pues el enfoque de género y diferencial se convierte en uno de los puntos de discusión en el dialogó, así como en el reconocimiento de las víctimas.
“Una inesperada historia de amor entre una extrabajadora sexual trans y un rebelde de las FARC, que comienza en una prisión colombiana y desemboca en una alianza solidaria entre activistas trans y militantes de las FARC que han depuesto las armas”, es la sinopsis oficial de la cinta.
Pero en esta historia de amor no solo importan los novios, es pieza clave en el argumento el trabajo que durante más de una década realiza la Red Comunitaria Trans en las cárceles del país a favor del respeto de los derechos de las personas trans recluidas, ejemplificado en el proyecto “Cuerpos en Prisión, Mentes en Acción”.
Es por medio de esta organización social que se genera sincronía y encuentro entre las agendas de las personas trans colombianas y los excombatientes de la guerrilla, que durante el momento de la filmación se encontraban en medio del proceso de desmovilización.
Por esto, una de las protagonistas de la cinta es Daniela Lulu Maldonado, fundadora de la Red Comunitaria Trans y una de las líderes trans más reconocidas del país. Una de las apuestas de la organización social es la reivindicación de derechos por medio del arte y la cultura, como mecanismo para transformar las realidades sociales.
“Durante los últimos diez años de experimentación y colaboración artística, la Red Comunitaria Trans ha apropiado prácticas artísticas en un proceso formativo y colectivo para la transformación social de sus contextos locales, barriales y de la calle. Principalmente, han usado la creación audiovisual para plasmar y documentar su trabajo y vivencias, como estrategia de difusión y de denuncia política y social, además de explorar con este formato, formas diferentes de narrar y contar sobre la situación de las personas transgénero en Colombia”, se explica en el portal web de la organización social.
Uno de tantos reconocimientos que ha obtenido la Red Comunitaria Trans es la orden civil al mérito José Acevedo Gómez, otorgado por el Concejo de Bogotá, a razón de “su objetivo de reaccionar contra la discriminación, la exclusión, el rechazo, el maltrato, la violación y negación de derechos a personas trans en el Distrito, entre otros”.
Transfariana es el único largometraje colombiano que se presenta en la versión 73 del Festival Internacional de Cine de Berlín o Berlinale, como también es conocido. Su última presentación en el evento será el domingo 26 de febrero, en la sala 7 del cinema Cubix, y ya fueron vendidas todas las boletas.
El filme es una coproducción ente Francia y Colombia beneficiaría del fondo para el desarrollo cinematográfico (FDC) otorgado por Procolombia, del cual resultó ganador en la convocatoria de 2021 y se encuentra en la etapa de exhibición internacional.