Una granada lanzada sobre las 6:40 de la tarde del jueves 23 de febrero, en la avenida séptima con calle sexta en Cúcuta, dejó hasta el momento seis personas heridas. La explosión se presentó en el barrio El Callejón de la capital de Norte de Santander.
Hasta ahora se desconoce quiénes serían los responsables de este hecho que se presentó en inmediaciones de la terminal de transportes de la ciudad. El coronel Carlos Andrés García Suárez, comandante encargado de la Policía Metropolitana de la ciudad, se refirió al ataque e informó que: “todo indicaría que son cobros extorsivos a establecimientos de comercio”, explicó el oficial.
Hasta el lugar donde explotó la granada llegaron las autoridades nacionales para adelantar las investigaciones pertinentes y esclarecer lo sucedido. Las personas que resultaron heridas fueron trasladas a centros de salud para ser atendidas por los especialistas.
Algunas de las medidas para esclarecer lo sucedido será analizar las cámaras de seguridad del sector con lo que buscan dar con los responsables del ataque. La explosión dejó algunos locales comerciales y vehículos afectados por las esquirlas. Por ahora, la Alcaldía de Cúcuta no se ha pronunciado sobre lo sucedido.
Diego Villamizar es defensor de derechos humanos en Cúcuta y habló con la revista Semana luego del ataque en el centro de la ciudad.
“La seguridad ha fracasado en Cúcuta y Norte de Santander, el terrorismo y la criminalidad se tomó la región. Es el producto de un gobierno que solo premia a la criminalidad y a los grupos armados. Acá no existe autoridad. Lo que sucedió en Cúcuta es disputa de las bandas criminales por el control territorial de las diferentes comunas de la ciudad que generan terror para extorsionar a comerciantes de la ciudad”, expresó ante el medio de comunicación.
Villamizar finalizó su entrevista diciendo que: “Cúcuta se ganó el deshonroso lugar de las ciudades más peligrosas del mundo y acá nada pasó, ni los comandantes, ni el alcalde, ni el Gobierno nacional reaccionan. Pareciera que la frontera fue entregada en concesión a los grupos armados”.
El Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal AC, organización creada en 2002 con la finalidad de plantear algunas estrategias que permitan reducir los índices de violencia, presentó el 22 de febrero su listado de las 50 ciudades más peligrosas del mundo. En el primer lugar se situó Colima en México con una tasa de homicidios del 181.94%.
Las ciudades colombianas que hacen parte del listado son: Cali, Santa Marta, Buenaventura, Cartagena, Palmira y Cúcuta. Esta última se ubicó en el puesto 49 con 296,47% de tasa de homicidios.
Según la Defensoría del Pueblo, en el área metropolitana de la ciudad delinquen diversos actores armados como el ELN, EPL, disidencias de las Farc y bandas criminales al servicio del narcotráfico.
Las otras ciudades colombianas se ubicaron así en el listado: Cali en el puesto 32 con una tasa de homicidios del 42,09%. Le siguió Santa Marta en el puesto 37 con una tasa de 39,28%. En la posición 43 quedó Buenaventura con 35,16%, mientras que Cartagena en el puesto 47 con una tasa de homicidios de 37,29% y Palmira en la posición 48 con una tasa de 30,66%.
Hay que señalar que en Norte de Santander, en las últimas 24 horas, se han presentado varias acciones terroristas que han dejado como saldo un policía y un militar muertos en los municipios de Sardinata y San Calixto, respectivamente.
Asimismo, la Policía Nacional informó el jueves 23 de febrero que en el municipio de Ocañ, fue desmantelada una fábrica clandestina de armamento, además de la captura de dos personas por el delito de tráfico, fabricación o porte de armas de fuego, municiones y accesorios.
La operación se realizó en el barrio 20 de Julio, allí efectivos de la Seccional de Investigación Criminal SIJIN, desmantelaron la fábrica clandestina e incautaron 20 armas de fuego de fabricación artesanal tipo escopeta, un arma de fuego original tipo pistola calibre 22, 10 culatas de madera, tubos y una prensa para la elaboración de las armas.