Keyla es una joven cantante tolimense que actualmente se convierte en una de las participantes favoritas de los televidentes en el concurso de canto La Descarga, en donde hace parte de la selección de la famosa artista Marbelle. En el más reciente capítulo del programa la artista de 19 años expuso ante una de sus compañeras un difícil momento que afrontó en el colegio, por culpa del matoneo, y que casi la hace abandonar la música.
Ya en los primeros episodios del programa Keyla le había revelado a su mentora que había sido víctima de bullying en el colegio tras su participación en una edición de La Voz Kids. “Yo no entendía por qué en lugar de celebrar mi participación me molestaban”, recordó entre lágrimas la concursante en ese momento ante Marbelle, pero no había tocado nuevamente el tema hasta el más reciente episodio, previo a su presentación junto a la cantante de tecnocarrilera.
En una conversación con su colega Stéfany Zabaleta, del equipo de Santiago Cruz, Keyla habló sobre uno de los momentos más graves que vivió a raíz del matoneo en su escuela, que afectó no sólo su físico sino que podría haberla dejado sin la posibilidad de volver a cantar.
“Llego yo un día, normal, al colegio. Estaba haciendo la fila de la cafetería y llega una chica y me empuja para sacarme de la fila”, empezó a recordar la joven ibaguereña. Según señaló ella ya le tenía miedo a esa compañera del colegio y a sus amigas porque constantemente la molestaban, por lo que decidió no reclamar ante la situación y se fue a la parte final de fila.
En ese momento llegaron las otras amigas de la agresora y se empezaron a burlar todas de ella. “Me decían ‘pelo de trapero’ y se reían. Todo eso no era nuevo para mí, así que yo me quedé callada y tenía mis audífonos. Entonces la que me empujó se acercó a mí, me jaló del cabello y me llevó hasta la mitad de la cancha en pleno descanso”.
Lo que recuerda Keyla es que las cuatro estudiantes empezaron a golpearla y sujetarla fuerte para que no pudiera escapar, mientras los demás estudiantes se amontonaban alrededor y grababan el hecho. “Una me dañaba el uniforme mientras la otra me golpeaba ... Cuando la nena de un momento a otro saca un lápiz y me empieza a chuzar el oído”.
Stéfany Zabaleta no daba crédito a lo que su colega le estaba contando, pero Keyla prosiguió con su historia. “Yo me le arrodillé, me puse a llorar y le pedía que no me dañara el oído, si me jodía el oído yo en lo único que pensaba era en mi voz”, señaló la joven y añadió que un profesor logró calmar la situación. Se llevaron a las agresoras a coordinación y a Keyla la dejaron sola en el patio, a pesar de que su oído estaba sangrando por la agresión.
“¿No te auxiliaron, ni te dijeron nada?”, cuestionó la otra concursante y Keyla le respondió que no solo la dejaron sola y no le prestaron ayuda médica, sino que “las peladas no recibieron ningún tipo de sanción. Mi mamá decidió sacarme del colegio, entonces la que se quedó sin estudiar fui yo. Ese colegio fue un infierno para mí”, concluyó.
La conclusión de Zabaleta ante la historia de su colega fue una dura reflexión. “Hay algo que se está presentando en la sociedad y es que quieren tapar con un dedo el problema y es que en muchos colegios hay niños que sufren de bullying y eso tiene que acabarse alguna forma. Eso es un tema de seriedad”.